IDIOTA |Ushijima Wakatoshi|

Capitulo 3.

Se habían quedado en silencio, al parecer, Ushijima nunca había considerado que un día T.N volviera a jugar vóley y ahora que había la posibilidad no sabia que pensar.

- ¿Wakatoshi?- dijo T.N paseando su mano delante de sus ojos- Tierra al as, ¿puede oírme?

- Eh, si- susurro- Es una gran noticia.

- Supongo, pero esperare a ver que pasa mañana- dijo agarrando sus cosas con fuerza- Deberías regresar al dormitorio, te veo luego Wakatoshi.

Despidiéndose, T.N siguió su camino a la salida, por otro lado, Ushijima tardo unos segundos en volver al interior de la escuela, solo T.N miro atrás.

---

Casi cuarenta minutos después T.N había llegado a casa, el sol apenas se estaba ocultando pero aun había niños jugando en la calle, que dejaron su juego al ver a T.N.

- ¡Es T.N!- grito uno y todos la rodearon.

- Hey chicos- les dijo sonriendo- ¿Como están?

- ¡Bien~!- gritaron todos.

- ¿Jugaras con nosotros?

- Mm, ¿Que hare~?- dijo juguetona, en respuesta los niños empezaron a gritar- ¡No puedo! Tengo que ir a casa. Diviértanse.

Los niños protestaron pero T.N no les prestaba atención y con una sonrisa se alejo en dirección a su casa pero antes de estar muy lejos escucho la platica de los niños.

- Escuche de mi mamá que T.N esta enferma- dijo uno- y que tiene que ir al doctor.

- Que mal- dijo otro- Yo odio ir al doctor.

- Yo también- susurro T.N caminando mas deprisa.

Cinco minutos después T.N estaba delante de su casa, no tenia su llave y realmente no quería entrar, no quería que la vieran con esos ojos, los ojos que reflejaban arrepentimiento y lastima. En Shiratorizawa nadie la miraba así, aunque ahora que Ushijima sabia era probable que el la mirara con esos ojos.

Y no quería que la mirara con esos ojos. No el.

Dejo salir un suspiro al mismo tiempo en el que se abría la puerta principal, su madre mostraba una cara de sorpresa, su cabello era castaño como el de T.N originalmente pero sus ojos eran negros y era mas bajita que T.N.

- ¡T.N!- exclamo su mamá sonriendo- ¿Que haces aquí? ¡Entra!

Tomo a T.N del brazo y casi arrastrándola la llevo dentro a la sala de estar donde estaba su papá y su hermano menor.

- ¡T.N!- exclamo su papá al mismo tiempo en el que se acercaba y la abrazaba- ¡Siento que no te eh visto en años! ¿Estas mas alta?

- Cálmate querido- dijo su madre N.M - deja que T.N se siente y nos cuente como le va.

La arrastraron al sofá y todos la miraron expectantes.

- de hecho... estoy un poco cansada- dijo mientras despeinaba a su hermano N.H - Iré a dormir, mi cita con el medico es temprano y quiero ir descansada.

- ¿Tomaste tus medicamentos?- pregunto su mamá, T.N torció sus labios- T.N.

- Claro que los tome- susurro T.N- aunque sepan a pies.

- ¿Como sabes a que saben los pies?- pregunto su hermano.

- Porque cuando eras mas pequeño me metías tus asquerosos pies en la boca- le señalo revolviendo su cabello mientras N.H se sonrojaba un poco- Los veo mañana.

Tomo sus cosas y fue a su habitación; estaba justo como la había dejado. Una cama con unas sabanas simples, un escritorio casi vació, una silla donde había ropa amontonada y un closet casi lleno ya que al usar solo el uniforme en Shiratorizawa casi no llevaba ropa normal el fin de semana ya que tenían entrenamiento así que solo llevaba ropa cómoda.

Dejo salir un suspiro y se tumbo a su cama - ¿Que estoy haciendo?

No estaba tan cansada y definitivamente estaba hambrienta pero no quería estar en la sala con sus papás, le darían esa mirada de lastima que todos le daban y odiaba que lo hicieran.

- Mañana será un nuevo día- susurro y comenzó a dormirse lentamente hasta que finalmente empezó a dormir.

---

- ¡Hermana levanta!-

Un grito, después una opresión en su pecho y al final un constante rebote arriba de ella. Con pesadez abrió sus ojos y miro a su hermano arriba de ella, con una sonrisa en su rostro riendo a carcajadas.

- N.H, pesas- susurro media dormida, aun así lo tomo de la cintura y lo quito de encima suyo y dio media vuelta en su cama para seguir durmiendo.

- ¡Mamá dice que te levantes porque hay que ir al doctor!-

- ¿No tienes que ir al kínder o algo?- pregunto sin levantarse.

- ¡Tengo 8! ¡Ya no voy al kínder!- exclamo- ¡Y dijo mamá que puedo faltar hoy porque mañana te regresas a Shiratorizawa.

- Shiratorizawa...- susurro T.N- Debiste haber venido a Shiratorizawa...

- ¿Que?-

- Nada- dijo, preguntándose mentalmente cuando se había convertido en Ushijima- Voy en un minuto

N.H salió corriendo de la habitación cerrando la puerta cuando salió, T.N se quedo acostada mirando el techo; estaba nerviosa. Ese día el doctor confirmaría si o podría o no volver a jugar voleibol. No quería tener sentimientos negativos, había esperado dos años por esto, pero... ¿Y si la cirugía no arreglaba nada?.

- Detente...- se susurro - Jugaras voleibol otra vez... destruirás a la perra de Rini Aoyama y entraras al equipo femenino nacional...

- ¿T.N?- pregunto su mamá asomando su cabeza por la puerta.

- Oh, perdón- dijo levantándose caminando a su closet tomando los primeros jeans y camiseta que encontró- me cambio y voy.

cambio sus pijamas por ropa normal y salió de la habitación, sus padres y hermano ya estaban listos para irse, como T.N no podía desayunar ya que le iban a hacer exámenes sanguíneos así que salieron en cuanto T.N había salido de la habitación. Se subieron al auto y se quedaron en un absoluto silencio, los exámenes iban a tomar toda la mañana pero seria en la tarde cuando le dirían a T.N si era o no apta para hacerse la cirugía ahora. Se pusieron en camino al consultorio medico, en el centro de la ciudad, así que el trayecto iba a tomar un rato, pero en lugar de charlar el auto se quedo en un silencio. Todos tenían miedo de decir algo e incomodar a T.N y ponerla en una posición difícil así que mejor se quedaban en silencio, T.N agradecía eso.

Llegaron después de quince minutos en el auto, salieron y entraron al hospital. T.N se sabia el trayecto de memoria, aunque no había ido en los últimos dos meses había estado tantas veces ahí antes que sabia donde se encontraba todo; llegaron al área de cardiología donde una enfermera ya los esperaba.

- Hola, T.N-chan, ¿Como estas?- le pregunto la enfermera, que la había atendido desde la primera vez que internaron a T.N en el hospital.- ¿Emocionada?

- Siempre estoy emocionada de que me claven agujas en los brazos y hacer todo tipo de pruebas para saber como esta mi corazón- susurro sarcástica.

- ¡T.N! lo siento, Sara- dijo la mamá haciendo una reverencia.

- No se preocupe señora, entiendo- le sonrió y los encamino al consultorio- en unos minutos llegara alguien para hacerles los exámenes.

Y tenia razón, diez minutos después químicos habían llegado para tomar muestras de sangre y cinco minutos después de eso llego el doctor de T.N guiándola a la sala de exámenes donde la pusieron a hacer todo tipo de pruebas para ver si su corazón era lo suficientemente fuerte como para resistir la cirugía. Se quedaron en el hospital hasta las dos de la tarde, y habían llegado a las 9 de la mañana, T.N era la única que se moría de hambre ya que en lo que ella hacia sus exámenes, su familia había desayunado y comido.

- Muy bien, en un par de horas tendré los resultados y les diré como esta todo.- les dijo el doctor- T.N, ve a comer algo, debes estar hambrienta.

la familia salió del hospital, en un mejor humor que el de antes , entraron al coche y le preguntaron a T.N que quería comer.

- arroz hayashi- les dijo cansada- hay un buen restaurante a unas cuadras de aquí.

- ¿Porque arroz?- pregunto a su hermano.

-¿Porque Shiratorizawa?- le pregunto de vuelta.

- ¿Porque es la mejor?

- Exacto.

Claro que el arroz Hayashi era delicioso, pero el restaurante estaba cerca de Shiratorizawa y se sentía mas cómoda cerca de donde estaban los chicos, en especial cuando recordaba que Wakatoshi estaba ahí.