VI.

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Precaución: Lenguaje explícito, AU.

©: gyeomismymoonbeam

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Cada año, la empresa de mi padre (Darrow Enterprises & Co.) realiza un campamento para celebrar otro grandioso año entre la empresa y sus socios.

Las afueras de Boston es un excelente lugar para que se lleve a cabo The Darrow Camp, evento al que llegan familias de diferentes países, ya que su empresa tiene demasiada influencia alrededor del mundo.

Después de tanta organización entre los que iban a participar y en qué equipo, nos encontrábamos en el campo, jugando lo que la mayoría sabe jugar: futbol.

Un pelirrojo Mark Tuan corría con el balón por la banda izquierda, yo corría a su paso pero por la banda derecha.

Penetre la defensa de los 3RACHA (ellos se hacían llamar así), le grité a Mark cuando me encontraba a cinco metros de la portería y en buena posición.

-¡Bunny, acá estoy!- Alcé los brazos.

Haciéndola de portero se encontraba él.

Mark lanzó la pelota hacia mi dirección. Acomodé el balón y con el pie derecho lo pateé con fuerza. Pasó entre las piernas de Min Yoongi y el árbitro sonó su silbato. Estalló en gritos la grada improvisada.

¡Otro más, genial!

Corrimos por cinco minutos más, Hoony me la estaba haciendo difícil, no pudimos avanzar hacia la cancha contraria.

El árbitro sonó el silbato y dio por terminado el partido. Anoté dos y otro lo anotó el rubio Jung Ilhoon, dando como resultado 3-1 a nuestro favor. Habíamos ganado el partido.

-¡Ganó nuestro equipo papá!- Grité eufórica.

- Voy a mi cabaña a ducharme, luego los alcanzo, no he saludado a los Kim.- Me acerqué y lo abracé.

-Gran partido corazón.- Sonrío.

- Está bien, estaremos en la fogata, te esperamos.

Asentí y fui directo a la cabaña a ducharme, había sudado demasiado.

Me despojé de mi ropa y entré en la ducha.

Mientras tarareaba una canción, me tallé el cabello y cerré los ojos para retirar el shampoo. Alguien habló a mi espalda.

-Futbolista estrella, no pierdes la oportunidad de patearme el trasero.- Abrí los ojos y di media vuelta, se encontraba desnudo y erecto frente a mi.

-Soy la mejor ¿no?- Pregunté con una sonrisa socarrona.

-¿Tú? Siempre cariño.- Afirmó.

Me tomó de la nuca y juntó nuestros labios. Los besos de Min Yoongi siempre eran desesperados al igual que su cuerpo.

-¿Qué quieres Min?- Lo empujé un poco.

-A ti noona...- Volvió a besarme.

El chico me atraía y demasiado. Pero vivíamos en países distintos. La cultura, la diferencia de edades y su familia, no ayudaban en mucho.

Atesorar mi aventura con el menor de los Min, era lo único que podía hacer.

Me pegue más a él y enrollé mis brazos en su cuello. Lo besé otra vez, nos mordimos con suavidad. Gemí.

Nos alejamos para obtener un poco de aire dentro de la lluvia artificial, no teníamos suficiente uno del otro.

Me tomó de las caderas y apegó mi cuerpo a la pared de cerámica, sus dedos fueron directo a mi centro. Movía sus dedos rápidamente en mi, de mi boca salían gemidos sin control, no podía callarlos.

Con su mano libre comenzó a masturbarse.

-Yoonie por favor...

-¿Por favor qué noona?- Metió dos dedos con lentitud, los movió suavemente y me estremecí ante la acción. Las palabras no me salían, mi garganta se había quedado seca.

- Dilo...- Embistió su dedo corazón dentro de mi, solté un jadeo e intente hablar.

-Necesito más Yoonie...- Movía sus dedos rápidamente dentro mío, mi pecho subía y bajaba.- Quiero tu miembro... Métemela... ¡Ah!- Yoongi sonrió victorioso.

Sacó sus dedos y acercó su miembro a mi entrada, lo rozó con la punta y un escalofrío recorrió mi espina dorsal. Las piernas me temblaban, mi mente estaba enfocada en nosotros, quería sentirlo.

-Mételo ya.- Gruñí.

Me tomó por los muslos y enrollé mis piernas en su cintura, se acomodó y entró de golpe. Gruñó ante la sensación y comenzó con movimientos lentos, disfrutando de mi estrechez.

El ruido de nuestras pieles chocando se escuchaban en la pequeña cabaña, el miembro de Yoongi entraba y salía rápidamente en mi. Intentaba callar mis gemidos mordiéndome el labio.

-Déjame escuchar tu melodía noona...- Mordió mi cuello para luego penetrarme con brusquedad. No pude evitar soltar un grito ahogado seguido de un gemido.

Las estocadas que daba eran rápidas y profundas, dejándome sin aliento.

-Yoon... Ah...- Gemí entrecortadamente.

Salió de mi lentamente y volvió a embestirme de golpe, me abracé a su cuello, cerré los ojos y eché la cabeza hacia atrás, disfrutando del placer que me brindaba.

Mi boca se dirigió a su cuello, lo mordí y chupe levemente, jadeos salieron de su boca. Mis gemidos comenzaron a ser más ruidosos que antes.

Me besó para acallar mis gemidos, su beso tenía una sensación diferente.

-Me-me gustas... Mucho noona...- Apretó mis muslos y siguió embistiéndome.

Reprimí las ganas de llorar. Gemí mientras mordía su hombro derecho.

-Yoon... Me vengo...- Susurré entre jadeos.

Tres, cuatro, sentía mis paredes contraerse. Cinco, seis, no creo que pueda aguantar más. Siete, ocho, arañé su espalda mientras mi orgasmo llegaba.

-Demonios... ¡Ah! ¡Yoongi!

-¡Noona!- Gritó mientras dejaba caer su cabeza en mi hombro.

Nuestros pechos subían y bajaban, nos quedamos aferrados el uno al otro mientras el agua caía.

-Lo que acabo de decir es cierto noona, mientras venía en el avión lo venía pensando... Te venía pensando.- Sus facciones se relajaron.

-Sabes que no es tan fácil Yoon.- Lo saqué de dentro mío y bajé de sus brazos.- Lo pensaré, pero sabes mi respuesta.

Me acerqué a él, tomé sus mejillas y le di un pico.

-Tengo que irme, nos esperan en la fogata.- Me envolví en una toalla, abrí la puerta y me dirigí al pequeño closet, para comenzar a vestirme.

Dirty Meow ; Min YoongiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora