十一. La leyenda da comienzo.

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Rocksestate. 6:30 AM.

—Todo comienza cuando yo entro en Strindland, hace diecisiete años. Yo fui la primera persona en entrar a este juego, tenía cuarenta y tres años en ese momento. Entré directamente en Strindland, para ese momento el Código no tenía el espacio conocido como "Espacio Nulo" así que deambule por todo el terreno de Rocksestate hasta Popuchi, sobreviviendo a duras penas de pequeños animales que podía cazar con mis manos; no sabía de la existencia de la magia y las clases no existían, por lo cual no solo tenía la imposibilidad de realizar grandes cacerías, sino que también descubrí que no estaba completamente solo en este mundo.

»Descubrí que existían grandes monstruos, bestias mitológicas y animales irreales que parecían alguna clase de combinación entre las especies que estaba acostumbrado a ver. Casi no viví, si no fuera porque encontré una enorme cueva en la montaña Tsuige donde me asenté y con cuidado la fui explorando hasta llegar a un sitio especifico, donde a través de pinturas rupestres, contaba una leyenda sobre un chico particular, con brillantes ojos celestes, un ser particular en cuanto a sus elecciones, aprendizajes y su manera de vivir; tanto en la vida cotidiana, como en sus combates debido a su magia y habilidad.

»Luego de un tiempo, el cual lo usé para cazar y descifrar la pintura rupestre. No había hecho muchos avances para descifrar debido a que era algo confuso, pero lo logre, gracias a cierto ser inhumano con enormes poderes: El Código. El me ayudó a descifrar la pintura y me explico más sobre Strindland. Entrené con él y explore todo Strindland, aprendí sobre la magia y poco a poco pude ver como más personas eran traídas al juego y sin darme cuenta, me hice la mano derecha del Código.

»Empezamos a construir ciudades, pueblos y reinos enteros, decidimos instaurar monarquías debido a que lo vimos mejor y así nos beneficiaría a los primeros, pero no seriamos como las monarquías de los viejos tiempos en nuestro mundo. Utilizaríamos nuestros conocimientos actuales y mejoraríamos por completo nuestra manera de vivir. A partir de esto empezamos con las capillas que, con ayuda del Código, usamos para encontrar las reliquias y volver a nuestro mundo.

 Tan solo vestido con una camisa de hospital que lo cubría hasta las rodillas, varías vendas que cubrían sus heridas y totalmente desaliñado y adolorido fue como Alex escuchó atentamente cada palabra dicha por el Sacerdote, posiblemente, la persona más importante de todo Strindland.

«Y esto es apenas una pequeña parte de la historia de este señor, la primera persona en entrar aquí... veo que no es alguien muy normal, en varios sentidos. Hay decisiones extrañas, pero él es el fundador, y he podido notar que mucha gente le tiene confianza, o por lo menos lo poco que interactúe con la gente del mercado y mis compañeros de combate». Pensó el espadachín, con cierta admiración por el señor sentado frente a él.

—Bueno, Alexander Fotía, parece que ya conoces algo nuevo sobre ti—El anciano representante de Rocksestate se levantó. Ahora levantado y acercándose pudo distinguir mejor su apariencia.

 Se veía bastante desaliñado, una barba larga y revoltosa de color gris claro al igual que su cabello (igual de despeinado y desaliñado), unos pequeños ojos sin brillo y de color gris plomo, ya empezando a entrecerrarse por las arrugas de su rostro, su piel era bastante blanca rozando lo pálido y era muy delgado; vestía con una larga túnica de color café muy oscuro con un hexágono gris en medio, con una correa de un color marrón más claro, sostenía un báculo hecho de madera con una piedra azul flotando en la punta.

—Esto tan solo fue una parte de tu potencial, yo mismo te entrenaré para sacar todo lo mejor de ti, es hora de que el mundo vea la magnificencia del gran elegido—dijo Reiji, tomando la mano izquierda del espadachín con sus dos manos—. Se lo repentino que es esto para ti, puedo verlo en ti, pero has demostrado tener valía en aquel combate contra el gran centauro, mereces más que estar en una simple cama de hospital. Así que cuando te recuperes, tu nombre saldrá de esta habitación, solo conocido por nosotros cuatro, y se expandirá por todo Strindland, dándole las esperanzas a todos para continuar.

Magicae Furca: Un nuevo mundo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora