Capítulo 11

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Eren miró por largos segundos a Levi, podía notar como el cabello se comenzaba a pegar de manera seductora a su frente, como su piel blanquecina se volvía aperlada mientras una pequeña capa de sudor lo cubría, llevó su vista hasta los labios entreabiertos del azabache, estaban hinchados, rojos, apetecibles, su mirada desorbitada lo hacía recordar su condición, y ni que decir de su respiración irregular.

Eren hubiera querido verlo de esa manera bajo otro contexto, mejor aún, bajo de sí mismo.

Pero Rivaille no estaba ni cerca de lo que el castaño anhelaba internamente, llevaba las copas encima, estaba borracho. Aquella imagen era nueva ante los ojos de Eren, aunque lo supuso normal, era fin de semana, no tenía mayor responsabilidad, además de que pasaban un partido de fútbol en la TV, Emma estaba en casa de Hange, y se quedaría a dormir.

—Tsk, es idiota que un montón de hombres fornidos persigan un balón.—comentó de manera repentina Levi, ya había terminado su décimo noveno vaso de vodka con soda.

—¿Entonces por qué lo vemos?—cuestionó Eren, quien tan solo llevaba el tercero. Lo miró con una sonrisa ladeada.

Levi, sentado a su lado, se veía aún más pequeño. El azabache lo miro, se notaba divertido, sin querer sus ojos viajaron por fracciones de segundos a los labios de su contrario, encontrandolos apetecibles, deseados.

—Porque no hay nada mejor que hacer...—comentó, inclinandóse sin querer al moreno.

—Ah, claro que hay mejores cosas que hacer....como—no pudo terminar la frase, pues el azabache se lanzó contra Eren.

No tardo mas de tres segundos en quedar a horcadas sobre el ojiesmeralda, deboró la carne blanda de la boca de Eren, mientras meneaba las caderas con vaivén, lo necesitaba, tanto que dolía. Eren posó sus manos en la cintura de Rivaille, pues en el acto casi pierden el equilibrio, tardó un poco en poder responder al beso de manera adecuada, el aliento alcoholico de Levi junto con la adrenalina provocaron que le subieran las copas, dejandose llevar así por sus deseos.

Pronto llevó el control de la situacion, esta vez guiaba los movimientos de su contrario, indicando cuando ir mas rápido, o más lento.

Cuando el aire falto, Levi se negó a separarse, en lugar de aquello inspiró profundamente y siguió besandolo, con pasión, ardiente, aplazado por tanto tiempo que la necesidad del momento los llevó a ponerse duros en poco tiempo.

—E-Esto está pasando demasiado rápido...—dijo sin aliento el de ojos esmeralda mientras apreciaba la imagen erótica frente a él. Sus ojos viajaron hasta el blanquecino cuello de Levi, el cual le resultó delicioso, como aquel manjar prohibido del orfanato.

"La señora Dhoroty estará muy molesta, como cuando tomé una de las galletas antes de tiempo...", pensó con gracia mientras recordaba a una de las encargadas del orfanato, aquello lo dejó pensativo, ¿cómo es que recordaba aquello?¿quién era Dhoroty?¿por qué ahora los recuerdos llegaban?

—Sólo lo suficiente...—murmuró Levi antes de volver a atacar a su contrario de nueva cuenta.

De nueva cuenta Eren lo separó  por momentos.—Espera un momento, y-yo recordé algo...

No pudo terminar pues la mirada traviesa de Rivaille acompañado de su mano sobre su entrepierna lo desconserto por momentos. El azabache no tardó más de dos segundos en comenzar a acariciar el pecho de Eren mientras pegaba sus glúteos al falo del mismo, meneo las caderas con fuerza antes de dar ligeros sentones.

La mente del castaño se perdió en las curvas de Rivaille. No había vuelta atrás, y jamás desearía que hubiera una. Soltó un jadeo mientras sentía ponerse duro bajo los pantalones, tomó las caderas del azabache con posesión y lo apegó más.

VIDA (SEGUNDA PARTE DE "NUEVO INQUILINO*)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora