Kristhel.
Miro como Liam y Andy entrenan con Jeremy, desde la lucha de ayer, cuando Izan cayó desmayado, mis amigos han decidido que quieren aprender a pelear, según ellos no quieren ser más una carga, aún cuando les he dicho un millón de veces que no lo son, pero por otra parte entiendo que se sientan de ese modo y que quiera aprender a defenderse.
Desde ayer que salí de esa habitación no he vuelto a entrar, me da miedo que el se haya ido, no sé si soportaría eso.
Mientras tanto, Abdel y Ruth buscan alguna manera de romper el hechizo sin necesidad de matarme, aunque como lo veo todas las opciones terminan conmigo estando muerta y llegado a este punto creo que morir es la única forma de salvar a Izan. Realmente quiero creer que hay alguna opción, que quizás, puedan encontrar la manera de terminar con el sufrimiento del chico que se encuentra en la habitación, esa, a la que no he Sido capaz de entrar.
Un suspiro brota de mi garganta mientras pienso si es buena idea entrar a verlo, tengo miedo, se que está atado, pero mi cabeza no para de formular Miles de escenarios en los que el vuelve a estar bajo la influenza de aquel hechizo. Me digo a mi misma que debo confiar en que sigue aqui, que no se a ido de nuevo, pero una parte de mi ~esa que no hace más que recordarme que todo es mi culpa~ cree que el se ha dado por vencido.
- Debes decidir si quieres entrar o terminarás volviendote loca - dice Ruth a mi espalda.
- Lo se - respondo aún sin quitar la mirada de aquella puerta.
Comienzo a caminar en dirección a ella, tomo un último respiro antes de decidir abrir la puerta.
La escena con la que me encuentro es diferente a todas aquellas que estaba formulando en mi cabeza, lo que me encuentro hace que quiera correr lejos, que quiera salir del lugar en el que acabo de entrar y gritar.
La mirada que me dedica el chico sentado y atado a la cama hace que mi respiración se corte, el corazón me late casi de una manera sobre humana y no puedo hacer nada más que quedarme ahí, de pie junto a la puerta.
Pasado unos segundos o quizás minutos me tomo el tiempo de detallarlo, su rostro luce cansado, tiene ojeras bajo sus ojos, casi parece que no ah dormido nada, su gesto moribundo hace que quiera asegurarme de que está vivo, pero aún notando todo eso, mi cuerpo se encuentra paralizado, no me permito moverme ni un centímetro.
- Kris - me llama, pero no puedo hacer otra cosa más que mirarlo a la distancia. - Kris, por favor, acércate, no voy a hacerte daño - pide y puedo distinguir en sus ojos un destello de dolor.
Camino hacia el, aún sin decir nada.
- No quiero que me temas, jamás quisiera lastimarte - dice cuando por fin estoy a su lado.
- No te tengo miedo a ti, le temo a qué no podamos encontrar una manera de salvarte - susurro mientras desvió la mirada.
- Se la manera, no lo recordaba porque era un recuerdo que había logrado bloquear - dice.
No puedo evitar sentir que un destello de esperanza se asienta en mi, quiero aferrarme a lo que dice, aún sin saber si la manera que sabe funcionara.
- Llama a mi hermano, por favor - pide y no puedo hacer otra cosa más que asentir.
Corro en dirección a la puerta, pero no puedo evitar mirarlo antes de salir del lugar.
Busco a Dean en los lugares en los que suele estar, pero no lo encuentro.
Voy al lugar en el que Liam y Andy están entrenado y veo a Dean mirando a mi mejor amiga con una sonrisa.
Una sonrisa se instala en mi boca en el momento en el que me doy cuenta de que todo lo que llevo creyendo desde que lo conocimos es real. A Dean le gusta Andy.
Por un momento estoy perdida y no se que es lo que venía a hacer, pero en cuanto miro a Dean nuevamente recuerdo que esto es urgente y no puede esperar.
- ¡Dean! - grito para llamar su atención. Inmediatamente el me mira y comienza a caminar en la dirección que estoy.
- ¿Que pasa? - pregunta funciendo ligeramente el ceño..
- Izan dice que sabe la manera de romper el hechizo, pero quiere que tú vayas, no se de lo que se trata, pero el realmente parece seguro -
- ¿Lo que dices es cierto? - me sobresalto al escuchar a Abdel.
Lo miro. Asiento.
- Vamos a verlo - dice mientras se da la vuelta.
Caminamos en dirección a la habitación de Izan. Todo es silencio mientras entramos y solo esperamos a que Izan comience a hablar.
- Hace 3 años mi madre hechizo a Dean - dice e instantáneamente el aludido asiente - no recordaba eso ya que durante todo ese tiempo bloquee el recuerdo por proteger a mi hermano, el siempre a Sido el único de los dos que ah hecho lo que ah querido, yo no quería que eso cambiará, pensaba que de alguna manera todo saldría bien - sonríe - recuerdo haber encontrado a mi mamá preparando el hechizo, también recuerdo haberle preguntado si había alguna manera de romperlo, al principio no creí que me lo dijera porque sabía que ella quería que Dean fuera todo lo obediente que nunca ah sido - dice mientras mantiene la mirada en sus manos.
- ¿Y te dijo como romperlo? - pregunta Abdel.
- Pues Dean no está hechizado ¿O si? - responde - me dijo que hay una planta al oeste del reino, en la cima de la montaña más alta, es un tipo de hongo poco conocido que solo nace ahí, de color lila, si comen un poco el hechizo puede romperse, además cuando fui a buscarlo descubrí que la persona que vaya debe tener un vínculo fuerte con el hechizado ya que una vez que ese hechizo se rompe no hay manera de que puedan volver a ponértelo - dice.
La habitación se queda en silencio, creo que todos están evaluando quien es la persona u personas que irán, pero yo tengo claro que debo ser yo, se que Dean es su hermano, pero no creo que haya vínculo más fuerte que el que Izan y yo tenemos.
- Yo iré - digo rompiendo el silencio.
Los tres chicos en la habitación me miran como si me hubiera vuelto loca.
- De ningúna manera Kris, si vas tú tanto Liam como Andy querrán ir, podría ser peligroso, no sabemos lo que puedan encontrar en el bosque - argumenta Dean.
- He dicho que iré, y eso haré, debo ser yo, lo sabes tanto como yo.
- Bien, yo acompañaré a los tres mosqueteros - ahora es Abdel quien habla.
Trato de no quejarme por la manera a la que se a referido a mis amigos y a mi.
Asiento.
- Está decidido entonces, saldremos en la mañana - dice el vampiro antes de salir de la habitación seguido de Dean, dejándome sola con el chico atado.
El solo me mira tratando de descifrar no se que en mi.
- Puede ser peligroso - susurra
- No importa, estaré bien, deja que sea yo quien te salve está vez ¿Si? - digo antes de acortar la distancia y sentarme junto a el.
Toma mis manos.
- Regresa a salvó y algo te pasa yo...
- Está bien, nada va a pasarme - susurro antes de besar sus labios.
ESTÁS LEYENDO
Mi Deber: Asesinarte (MD Libro #2)
General FictionContinuación de Mi Deber: Protegerte. Escucho voces mientras camino, no se donde esta Izan. Camino por un pasillo estrecho y largo. Los murmullos se oyen cada vez mas cerca. Me detengo afuera de la habitacion en las que se escuchan aquellas voces...