La Cruda Realidad

CAPÍTULO 12

Una, dos, tres semanas habían pasado desde que se separó de JiEun, y también tres semanas en la que Hae empezó a ignorarlo. Era demasiado obvio viniendo de el castaño, ya que antes hubiera dado todo por pasar tiempo con HyukJae.

Cada vez que el mayor se acercaba a el castaño, este se levantaba y se iba. O si le decía para hacer algo, siempre le respondía que estaba ocupado. Incluso ya no venía a despertarlo como lo hacía antes ya que prácticamente dormía todos los días en la casa de su novio. Si, Donghae seguía de novio con Oh Sehun, e incluso estaban planeando un viaje por cumplir un año siendo novios.

¿Acaso ya ni se consideraban amigos? 

Esta mierda tenía que acabar, él lo tenía que escuchar, era lo que pensaba HyukJae casi todo el tiempo.

Era Jueves por la tarde y sabía que en un par de minutos Donghae iba a salir del gimnasio, y esa era la razón por la que se encontraba parado frente a la entrada desde hace poco más de media hora. 

El sol se estaba ocultando dándole a entender que Donghae ya estaba por salir. Ansioso se acercó más a la puerta y lo vió. 

—¡Donghae!— gritó aún estando a pasos de él.

Por la cara que puso este, supo que no se esperaba encontrarlo allí. 

—¡Hey!— dijo una vez ya enfrente de él.

En una situación normal, el castaño habría sonreído y lo hubiera abrazado. Pero no, sólo levantó la mano en señal de saludo.

—¿Qué haces aquí? — preguntó manteniendo su distancia del pelinegro  como si acercarse al otro estuviera prohibido.

—Quería pasar tiempo contigo — respondió el mayor siendo sincero y esperando que el otro no lo rechazara como lo hacía últimamente.

Donghae se quedó en silencio unos segundos y miró su reloj, como si esperara que ese objeto le diera una buena excusa para alejarse.

—Lo siento, me invitaron a cenar y tengo que prepararme —dijo finalmente. 

—Dejame adivinar ¿Con Sehun no? — HyukJae puso su mano sobre su propia cadera y miró sobre su hombro, estaba pensando en las palabras que iba a utilizar.

—Si.

—Por Dios Donghae, nunca estás disponible para mí  — lo dijo más fuerte de lo que hubiera querido ya que algunas personas a su alrededor se volteron a verlos — pareciera que ni amigos somos — está vez lo dijo más bajo porque no era su intención armar un espectáculo.

Donghae suspiró pesadamente y sacó su celular. Se había alejado unos metros para llamar a alguien, al escuchar "te lo compensaré mañana Hunnie" — el pelinegro supo que ahora había ganado. Iba a pasar un tiempo con Donghae, como tenía que ser.

Mientras él castaño seguía hablando, HyukJae tomó la mochila de entrenamiento del otro y lo llevó hacía su auto.

Una vez dentro del vehículo esperó unos instantes a que Donghae subiera, y luego solo con el ruido de la radio manejó hacía un bar.

—¿Me trajiste a un bar gay porque soy gay? — dijo con estupefacción Donghae una vez que se estacionaron enfrente de este — Si sabes que puedo entrar en una regular ¿no?

HyukJae no se esperaba que el otro se lo tomara mal, incluso creyó que le gustaría y se pondría más cómodo.

—Lo siento Hee, me dijo que este lugar era uno de los mejores — contestó maldiciéndose a si mismo por no haberlo llevado a un restaurante — Si quieres podemos ir a...