Lejos de ti.

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POV...KARASUMA.

Abrí mis ojos con pereza y note que el día estaba nublado.Entonces recordé la noche anterior.

Aquellos ojos azul cielo, totalmente cristalizados y llenos de temor.

Dí un lago suspiro y salí de la cama, para comenzar a prepararme, puesto que hoy sería un largo y pesado día...

Me encontraba subiendo la colina de la clase E, cuando me tope con el objetivo.

-Buenos días, Profesor Karasuma- saludo, mientras que yo seguía caminando sin prestarle atención -Sabe, ayer después de clases no supe si Nagisa regreso a tiempo a su casa ¿Usted sabe algo de él?- al escuchar su nombre, los nervios se me pusieron de punta y me detuve en seco -Uhm...¿ocurre algo profesor Karasuma?- 

Sentía como un nudo se formaba en mi garganta impidiéndome respirar bien. Comencé a relajarme, para no verme más sospechoso de lo que y me veía - *carraspear* No pasa nada- tome aire y continué caminando hasta llegar al edificio.

Entre a edificio y escuche unos pasos que venían en dirección de donde yo estaba. Al verlo pasar frente a mí, no pude evitar sostenerle la mano delicadamente - Nagisa...-

Al verme, su sonrisa y mirada llenas de alegría desaparecieron, y en su lugar quedo una mirada temerosa y una sonrisa falsa -B...Buenos...días, profesor...Karasuma...- era evidente que tenía miedo de verme, pero quien lo culpa, después de lo que le hice no merezco ni estar a su lado.

-Nagisa...quiero...quiero pedirte perdón, por lo que ocurrió ayer- mis ideas estaban hechas un caos completo, no sabía que era lo que debía decir o hacer.

Él ni siquiera me veía  los ojos y desde que lo tome  de la mano no ha pardo de temblar -Ahh...yo...bueno...no...- no entendía que era lo que quería decir; en eso lagrimas gruesas comenzaron a brotar de sus ojos.

Verlo de esa manera me rompía el alma, tanto así que no resistí mis impulsos y lo jalé contra mi cuerpo, abrazándolo fuerte pero sin lastimarlo - Perdóname, enserio perdóname...Nagisa- sin notarlo, yo también derrame un par de lagrimas. En ese instante no me importaba en lo absoluto que nos vieran, solo quería que él dejara ese sentimiento que le provocaba dolor.

Los segundo pasaron y Nagisa por fin logro dejar de llorar y con un ligero suspiro, se separo de abrazo - Lo siento, no quería que me viera de está forma - se tallo los ojos y de manera más tranquila, me dio una pequeña sonrisa. La única diferencia que había en esta sonrisa era que al ser sincera era mucho más resplandeciente.

-Ngisa, yo...- fui interrumpido por una voz que me irritaba mucho.

-Ehhh...¡Karasuma! - Entró gritando Irina - ¿Cuánto más piensas hablar con ese crió? deberías ponerme más atención a mí - 

Hice caso omiso a las quejas de la rubia y regrese mi atención a mi contrario, solo para darme cuenta que este ya no se encontraba ahí.

Pasaron las horas, hasta que finalmente el día había terminado. Después de varios intentos de asesinato hacía el pulpo, decidí irme a mi casa. Salí del edificio y poco antes de que me perdiera en el bosque de la montaña Terasaka me detuvo - Oiga, profe, me gustaría que habláramos un momento - lo mire de forma sería, dando a entender que no tenía ganas de hablar y mucho menos con él.

- No tengo tiempo, tal vez mañana te haga caso. Claro, mientras aun tengas ganas de hablar - hable con el tono de voz más sarcástico que podía tener.

-Créame, yo tampoco quiero hablar con usted. Mucho menos después de lo que le hizo a Nagisa- 

- Entonces, ¿Para qué quieres que hablar conmigo?- el solo me miro y suspiro de manera bastante pesada.

-Es acerca de Nagisa,él...él aun siente algo por usted... - esto lo dio con una expresión de dolor y resentimiento. Podría jurar que estaba apunto de llorar, pero lo escondía.

- ¿A qué te refieres? ¿Como es que lo sabes? - pregunte ligeramente asombrado por lo que me había dicho el chico frente a mí.

- Eso no importa, lo que si importa es que...usted le ha hecho un daño casi irreparable - 

Al escuchar las palabras de Terasaka quedé atónito. Aquel pequeño muchacho de cabello azul celeste, que me robo el corazón en el momento en que nuestros labios se juntaron en una cálida y suave sensación que nunca antes había sentido. Aquel chico que es capaz de sacarme una sonrisa cada vez que lo veo.Aquel chico al que le hice cosas horribles por mis celos ¿aun es capaz de seguir queriéndome? 

-¿En donde está Nagisa ahora?- 

- Se fue a su casa, pero escúcheme bien. Si le vuelve a hacerle  algo malo o si lo hace llorar de nuevo, tenga en cuenta que le aré la vida muy difícil - al terminar de hablar, dio media vuelta y se fue "ja, ja, ja, en serio que estos alumnos, no dan más que problemas" pensé, mientras esbozaba una pequeña sonrisa.

Después de la pequeña platica que tuve con Terasaka, salí lo más rápido que pude del campus de la escuela Kunogigaoka, directo a la casa de Nagisa (donde era probable que ya estuviera). Conduje por la ciudad al rededor de unos 30 minutos, hasta dar con el departamento en el que vive.

Salí del auto y me quede parado frente a edificio por unos instantes, replanteandome si lo que estaba apunto de hacer era o más sensato "¿Pero qué es lo que estoy haciendo ahora? se suponía que solo vendría a ver a Nagisa" pensaba mientras veía fijamente el edificio "Querer vero y hablar con el no es nada malo y si es así ¿Entonces porque estoy tan nervioso?" Tome aire y después de varios segundos logre caminar hasta entrar en el edificio y quedar frente la puerta del departamento.

Ahora ya decidido, di el ultimo suspiro para relajarme y toqué el timbre; pocos segundos después la puerta se abrió, dejando ver una cabellera azul, totalmente desordenada y llena de hojas y ramitas.

- Ohh...Buenas tardes profesor Karasuma - asomo la cabeza fuera de la puerta, mirando hacía ambos lados, como si estuviera esperando a alguien más - ¿ocurre algo? -

Mi cabeza estaba hecha un lío, pero eso no me detuvo para que tomara a Nagisa del mentón y lo acercara, hasta quedar unidos por un cálido beso. Duro pocos segundos pero para mí fueron los mejores.

Nos separamos y pude notar que aquello lo había tomado por sorpresa, puesto que en su rostro yacía una expresión atónita - Nagisa...Te amo... -el mantenía su mirada expectante sin poder articular palabra alguna - Y se que te he hecho cosas realmente terribles, también se que muy probablemente me odies por eso; pero aunque sea así, no quiero que te alejes de mí...no quiero estar lejos de ti... -  Baje un poco la mirada, esperando le negativa del chico frente a mí.

- No lo odio, jamas podría odiarlo. Es solo que... tenía miedo de lo que fuera a pasar - No supe en que momento se acerco a mí y me abrazó, pero lo que si sabía era que había cometido un grave error - Además, yo tampoco quisiera que se alejara de mí - 

Correspondí el abrazo y me separe un poco para ver que su rostro nuevamente estaba lleno de lagrimas, las limpie y tome su rostro entre mis manos y lo acerque lentamente, estando a pocos centímetros y entonces susurre: "Gracias".

Termine con esa distancia que hasta el momento me parecía grande. Ahora comprendía bien, que lo que debía hacer era proteger esa sonrisa que me llenaba de un sentimiento de felicidad.

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Con respecto al pequeño concurso ( si es que se le puede decir así) La ganadora fue: sosunacacerola. Con la respuesta: "Fuyo no hanashi" del anime GIVEN.

Att: Yuriko.

Ps: No me linchen por estar ausente tanto tiempo.

Ps2: se que les prometí subir tres capítulos el mismo día, pero aparte de no tener tiempo, mi creatividad solo me dio para esto y preferí escribirlo antes de que se me olvidara y ya no lo hiciera.

:3

A mi Querido alumnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora