ZEDEKIAH - El Chico Raro II

❆4| Infortunio ❆

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El infortunio pone a prueba a los amigos y descubre a los enemigos

-Epicteto 

K  A  T   E

Cuando el novio de Lydia viene a recogernos estoy decentemente arreglada y lista para irnos, cruzo mis dedos para que en la fiesta este el amigo de Lydia que acabo de conocer, para por lo menos tener un rostro conocido. Pero no aparece por ningún lado.

En el primer minuto que llevo en la fiesta Lydia ya me presenta a un chico, no es mal partido, pero no quiero que mi futuro novio me sea presentado de esa forma.

-Ojalá y esta vez funcionen mis dotes celestiales- me dice en el oído para poder escuchar sobre la música y acto seguido huye de ahí, dejándome con aquel chico.

-Hola bebé! - reprocho para mis adentros. Odio tanto que los chicos usen ese tipo de palabras cuando ni nos conocemos-

Yo me limito a sonreír.

Al final me cuenta que es del equipo de futbol de la universidad, que tiene una mansión por casa y que puede tener a cualquier mujer que quiera. Yo por mi cuenta me limito a reír como descerebrada y asentir para todo, pues sé que son así las chicas a las que frecuenta. Me escabullo de su conversación lo más rápido que puedo y decido empezar a beber alcohol.

La noche pasa tranquila, converso con unas cuantas personas más y me hago de amigos de la misma universidad y cruzo palabras con unos cuantos compañeros de grupo.

Estoy sentada en el sofá cuando llega Lydia curiosamente con al parecer otro amigo.

-Kate, te quiero presentar a un amigo- ruedo los ojos porque ya se su rutina-

-Hola! - le sonrió y me llevo mi vaso a la boca-

-Se llama Harry-

-Mucho gusto- abro mi boca de nuevo-

El chico se sienta junto a mí y yo me recorro un poco hacia el lado contrario.

-En verdad no soy mucho de fiestas- empieza la conversación- Pero mi compañero de habitación me arrastro hasta aquí-

Lo miro y por su aspecto sé que dice la verdad. Le sonrió.

- ¿Estudias en la UCB?- él asiente, dándole otro trago a su bebida- Yo también, yo estoy en diseño y tú?

-Arquitectura- Me alegro que la conversación no sea como el primer descerebrado-

-Bueno por lo menos nos veremos por ahí-

Terminamos hablando de las series populares actualmente y de lo que nos gusta hacer en nuestras horas libres. Y aunque la conversación va fluida me escabullo de ahí para ir por más bebida.

Encuentro a Lydia en la cocina.

-Eres pésima consiguiendo pretendientes para mí- le digo ya un poco mareada por la bebida-

-¿De quién hablas?-

-Del primero- le doy una sonrisa forzada-

-Pero es guapo- me responde Lydia y yo niego al momento-