Capítulo 3

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Pov Jungkook

Si las correas fueran lo suficientemente débiles, esta mujer de vestido rojo y tacones altos estaría en libertad después de moverse tal cual hace ahora.

- Por favor déjame ir - su aguda voz mezclada con llanto y terror, provocan en mí cierta excitación que me hacen sonreír de lado, la observó con el rostro pacífico, las comisuras de mis labios ligeramente inclinadas y mis ojos bien abiertos. - Por favor tengo una familia, no quiero morir.

- ¡Oh dulzura! yo sé que la tienes - levanto ambas cejas y asiento con la cabeza- un pequeño hijo de hecho, del cual deberías estar haciéndote cargo en lugar de salir de puta conmigo.

- Oh, por favor. - su dentadura se apretó mientras lloraba con fuerza, comenzaba a salivar- yo solo quería ... solo quería ...

- Solo querías follar mientras él aprende de ello en televisión viendo pornografía a escondidas tuyas. Aprendiendo mientras tú te vas y le dejas solo en casa, eso no es digno de una verdadera madre. - me giro solo un poco y estiro mi mano enguantada en látex negro para tomar un pequeño cuchillo no más grande que la palma de mi mano, pero perfectamente bien afilado, y lo levanto ante su vista para que vea el brillo de este. Ella niega y grita con fuerza.

- Mira dónde estás Melli, muy debajo de la tierra, en un sótano oscuro que solo la luz de una diminuta lámpara ilumina. Insonoro, incapaz de dejar salir un solo sonido. ¿Y crees que tus grititos de gata los oirá alguien? –Río con fuerza echando mi cabeza hacia atrás, exagerando la actuación.

- ¡AYUDA! - me río con más ganas admirando su inútil perseverancia y repentinamente cambio el semblante a uno más serio, cualquiera que me viera lo notaría, esa mirada oscura cargada de odio y vengativa, puedo oler su miedo como sabueso, mi nariz inhala el olor que su piel desprende y lo acepta como la causa de mi delirio.

- ¿No lo comprendes aún, Melli? - camino lentamente hacia ella, con las manos en la espalda y el cuchillo en una de ellas, mi cabello oculta parte de mi vista pero la vuelve más intensa, mezclada con el sudor de mi piel provocado por el calor del lugar. - Nadie vendrá a ayudarte- me río entre palabras y me paro detrás de ella. -Estás completamente sola -advierto posicionándome detrás de su espalda y con una mano sostengo su hombro, mientras mi nariz aspira el olor de cabello.

- ¿por qué haces esto? - levanto la mirada más allá de ella, observando la larga mesa con materiales quirúrgicos necesarios para mi propósito, este ... es mi propósito.

- Para salvar la vida de tu hijo - y rebano su garganta en una sola tajada.
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Pov yoongi

- ¿Tienes idea de cuál es la diferencia? - pregunta Seokjin observando la misma viva y cruel imagen que yo, guardo silencio ante su capciosa pregunta - ¿la tienes, Yoongi?

- Irrefutable - respondo y él hace una mueca

- Yoongi - advierte y yo suspiro, en el largo tiempo que llevo en la investigación de este secuestrador, no había dejado un cuerpo jamás, no se si es peor esto, o encontrar solo las manos, lo que si es muy seguro es que el ya sabe que lo estamos buscando con mucha más intensidad, hemos sido bastante obvios últimamente y por supuesto que el ahora haría lo imposible por desviar nuestra atención, incluso si eso significa que tenga que cambiar un poco su modus operandi.

- Hay un cuerpo - me cruzo de brazos, esto está mal, está malditamente mal, esto cambia toda mi investigación, mierda, ¿Qué juego estás tratando de jugar, asesino?

- Exactamente, ¿por qué hay un cuerpo esta vez?

Observo una vez más la despiadada forma que tiene lo que ven mis ojos, estamos justo en un campo y frente a nosotros una mujer desnuda sin ambos antebrazos, empalada hasta lo alto, sus piernas abrazan el palo puntiagudo que entra por su cavidad anal, sale por su pecho y vuelve a entrar por su garganta para finalmente salir por su boca, y justo en la punta, la lengua colgada como parte de una broma.

Caníbal (Yoonkook) (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora