The Fathers↠Muke

#12

A veces Michael se sentía un tanto extraño, su rutina comenzaba a parecerle agotadora y si no fuera por Luke, estaría completamente pérdido.

Un par de días atrás, la llamada de Crisstina lo había tomado por sorpresa, ya tenía claro que sus sentimos a la madre de su hijo estaban más que enterrados en el pasado, ahora un rubio era quién ocupaba ese lugar que tanto tiempo estuvo vacío.

Los ojos verdes del pelirrojo se enfocaron en la mujer que tomó asiento frente a él, seguía tal y como la recordaba, ella le dio una sonrisa, pero él no reaccionó de ninguna forma.

—Sigues  tal y como te recordaba, Mikey, es un gusto verte de nuevo.

—Ojalá pudiera decir lo mismo de ti, ¿Qué es lo que quieres? Vuelves después de 16 años y pretendes que nada pasó—Su voz se elevó a tal grado que la mujer frente a él se sobresalto.

La pelinegra retomó su porte y lo miró a los ojos.

—Quiero ver a mi hijo, quiero recuperar a mi familia—Sus finas manos tomaron las de Michael y las acunó entre las suyas.

Por un momento el ojiverde no supo reaccionar, se sentía confundido.

Alejó sus manos del toque de la mujer y negó con la cabeza.

—Es muy tarde para eso, no tienes ningún derecho, te fuiste, ahora vuelve a hacerlo, Geller nunca te necesito.

Los pequeños ojos negros de Crisstina de llenaron de lágrimas, Michael sabía el impacto de sus palabras, pero eran la verdad.

—Sé que aún me quieres—susurro—Los quiero de vuelta, a ti y a Geller.

Eso derribó emocionalmente a Michael, ella fue su primer amor, pero no podía perdonar tan fácil lo que hizo, además de Luke, lo tenía a él.

—No te equivoques, yo ya no siento nada por ti y tú ya no tienes familia, dejamos en paz, regresa al lugar donde estuviste todo este tiempo y no regreses.

Michael se levantó de su silla, miró a la mujer frente a él y se dió la vuelta. No sabía que más hacer, subió a su auto y se marchó.

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Las manos de Luke acariciaban el cabello rojo de Michael, la risa del rubio calmaba el embrollo en el interior del ojiverde, le había contado todo, desde el inicio, hasta llegar a lo sucedido horas atrás.

Luke lo tomó entre sus brazos y le dió todos el cariño que Michael no sabía que necesitaba, se sentía tan tranquilo, se sentía tan en paz.

—Luke—su voz salió cómo un susurro, el ojiazul se veía tan tranquilo recostado a su lado que no quería interrumpir su descanso.

—Michael—respondió sin abrir sus ojos y dió una pequeña caricia con sus dedos al brazo del pelirrojo.

—¿Qué debo hacer?, ¿Debo dejar que Geller ve a su madre?

Luke no tenía mucha experiencia en problemas con ex amores, divago un momento y se acomodo para ver a Michael a los ojos.

—Eso no depende de ti, Geller ya no es un niño pequeño, deja que él decida si quiere darle a Crisstina una oportunidad.

Michael tomó la mano de Luke y la entrelazó con la suya.

—Te quiero, Luke.

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Qué pedo amistades, ya volví.

Aye... Ésto es para ti♥️