El sombrero seleccionador
La puerta se abrió de inmediato. Una bruja alta, de cabello negro y túnica verde esmeralda, esperaba allí. Tenía un rostro muy severo, y mi primer pensamiento fue que se trataba de alguien con quien era mejor no tener problemas.
-Los de primer año, profesora McGonagall -dijo el fortachón.
-Muchas gracias, Hagrid. Yo los llevaré desde aquí.
Abrió bien la puerta. El vestíbulo de entrada era tan grande que hubieran podido meter el orfanato en él. Las paredes de piedra estaban iluminadas con resplandecientes antorchas como las de Gringotts, el techo era tan alto que no se veía y una magnífica escalera de mármol, frente a nosotros,conducía a los pisos superiores.
Seguimos a la profesora McGonagall a través de un camino señalado en el suelo de piedra. Podía oír el ruido de cientos de voces, que salían de un portal situado a la derecha (el resto del colegio debía de estar allí), pero la profesora McGonagall llevó a los de primer año a una pequeña habitación vacía, fuera del vestíbulo. Nos reunieron allí, más cerca unos de otros de lo que me gustaría.
-Bienvenidos a Hogwarts -dijo la profesora McGonagall-. El banquete de comienzo de año se celebrará dentro de poco, pero antes de que ocupéis vuestro lugares en el Gran Comedor deberéis ser seleccionados para vuestras casas. La Selección es una ceremonia muy importante porque, mientras estéis aquí, vuestras casas serán como vuestra familia en Hogwarts. Tendréis clases con el resto de la casa que os toque, dormiréis en los dormitorios de vuestras casas y pasaréis el tiempo libre en la sala común de la casa.
»Las cuatro casas se llaman Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin. Cada casa tiene su propia noble historia y cada una ha producido notables brujas y magos. Mientras estéis en Hogwarts, vuestros triunfos conseguirán que las casas ganen puntos, mientras que cualquier infracción de las reglas hará que los pierdan. Al finalizar el año, la casa que obtenga más puntos será premiada con la copa de la casa, un gran honor. Espero que todos vosotros seréis un orgullo para la casa que os toque.
»La Ceremonia de Selección tendrá lugar dentro de pocos minutos, frente al resto del colegio. Os sugiero que, mientras esperáis, os arregléis lo mejor posible.
Los ojos de la profesora se detuvieron un momento en la capa del niño sapo, que estaba atada bajo su oreja izquierda, y en la nariz manchada de un pelirrojo alto y pecoso.
-Volveré cuando lo tengamos todo listo para la ceremonia -dijo la profesora McGonagall-. Por favor, esperad tranquilos. Salió de la habitación.
Los murmullos entre ellos no se hicieron esperar, contando cortas historias sobre la selección con terribles combates delate de todo el colegio y pruebas de dolor.
Una niña cerca de mi se la pasó todo el rato recitando hechizos que los distinguí del libro de este año. Me alegra saber que no soy la única que devora tantos libros como puede, significaba que no todos serían unos ineptos. Mantuve los ojos fijos en la puerta, entonces sucedió algo que le hizo dar un salto en el aire... Muchos de los que estaban atrás gritaron.
-¿Qué es...?
Resopló. Lo mismo hicieron los que estaban alrededor. Unos veinte fantasmas acababan de pasar a través de la pared de atrás. De un color blanco perla y ligeramente transparentes, se deslizaban por la habitación, hablando unos con otros, casi sin mirar a los de primer año. Por lo visto, estaban discutiendo. El que parecía un monje gordo y pequeño, decía:
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Lilianne y la Piedra filosofal
FanficLilianne, confinada en unas cuatro paredes de lo que ha sido su hogar durante once años. Apartada por sus sucesos inexplicables hasta que un día, un hombre entrara en su infierno entregandole la libertad en forma de carta. Bienvenida a Ho...