Lemon Boy. [AizaBaku]

now or never

KATSUKI BAKUGO.

Seguía en aquel baño encerrado, tomé asiento en el suelo y suspiré afirmando mi cabeza con mis manos. No podía creer todo el daño que le había causado a Aizawa, por alguna razón pensaba que él se había olvidado y me había superado, después de todo lo que sucedió entre nosotros pensé que no sería difícil buscar a otra persona... Supongo que me equivoqué.

—Mierda...

Susurré secando mis ojos antes de que las lágrimas cayeran. Mi celular sonó y noté que era un mensaje de Kirishima, el cual abrí rápidamente para contestar.

Kirishima Eijiro.

Bakugo, ¿Dónde estás?
La ceremonia casi acaba.

Katsuki Bakugo.

Ven..

Kirishima Eijiro.

¿Qué? ¿Dónde estás?

Katsuki Bakugo.

En el baño cerca de las oficinas..

Dejé el celular en el suelo y apreté mis ojos esperando a que llegara el pelirrojo quien no tardó demasiado, pues a los pocos segundos su voz agitada se hizo presente en el baño.

—¿Bakugo?

Golpeó la puerta y me estiré un poco para quitar el seguro dejando que abriera. Apenas me vió se arrodilló frente a mí con su puto rostro de preocupación.

—¿Qué sucedió? ¿Te hicieron algo?

—Hablé con Aizawa.

—Ah... ¿Qué tal salió todo..?

—Creo que le hice demasiado Kirishima, en ese momento cuando preguntaste por qué lo hice de esa forma.. Debí haberte escuchado, mierda.

—¿Qué sucedió en esa conversación..?

—Intenté verme bien y fuerte pero tuve que irme debido al dolor de mi corazón al verle así.. Arruiné su vida, Kirishima.

Negó mirándome con aquellos ojos que simplemente dicen que todo mejorará o que todo está bien, aveces envidio a éste idiota. Se acercó un poco para acariciar mi cabello, no me negué, por alguna razón puedo demostrar debilidad frente a Kirishima.

—Los estudiantes ya deben irse y sigue la fiesta de héroes, ¿Quieres quedarte?

Suspiré asintiendo levemente y me levanté del suelo sacudiéndome un poco. Seguido de mí se levantó el pelirrojo para hacerse a un lado y dejarme pasar. Lavé mi cara para que no se notara tanto que había llorado y juntos salimos del baño para dirigirnos al sector de la fiesta.

—Mina tiene la ropa, ¿Te cambiarás o te quedas así?

—Estoy jodido de andar con éste traje de mierda, ¿Tú qué crees?

Rió posando su brazo tras mi cuello pata abrazarme y seguimos caminando con lentitud hasta donde estaba Ashido.

—¡Oy! Dame la puta ropa ahora.

Prontamente un bolso fue lanzado hasta mis brazos y me dirigí al baño más cercano para cambiarme.
Quité completamente mi traje y me quedé en ropa interior mientras buscaba mis prendas en aquel bolso, encontrando un sector con mi nombre, la saqué rápidamente y me puse aquellos pantalones rasgados bien ceñidos, un botín de cuero y una camiseta de cuello alto, los tres de color negro. Suspiré tomando aquella chaqueta blanca para abrocharla solo un poco abajo y guardé el traje para salir del baño con aquel bolso. Me miré al espejo unos segundos y ordené mi cabello a como siempre lo hago para salir dirigiéndome prontamente donde los demás.