Lemon Boy. [AizaBaku]

lemon boy

KATSUKI BAKUGO.

Hace seis meses que vivimos juntos como pareja, ya se sabía por algunos ciudadanos e incluso dentro de los héroes era nombrada nuestra relación. All Might y el Director ya no podían hacer nada pues yo era mayor de edad y ya no era estudiante de Aizawa si no, su igual puesto que ya era un héroe profesional.

...

Había tardado bastante en llegar a casa por lo que cuando lo hice, me encontré a Aizawa dormido en el sofá con el televisor encendido.

—¿Me estabas esperando? Mira la hora, ve a acostarte..

Le desperté con unos leves golpecitos en su mejilla seguido de un beso en su frente. Suspiró estirándose y me miró comenzando a preguntar cosas.

—¿Cómo te fue hoy?

—Tsk... Fue estresante, estoy putamente aburrido. Aún pienso retirarme.

—¿Te gusta salvar personas?

—Sabes que sí, no preguntes mierdas... Es solo que tsk, no lo sé...

No sabía cómo seguir aquella idea, supongo que solo me estresaba que el trabajo fuera tan pesado en cuanto a mí, que prontamente me convertí en uno de los mejores héroes. Realmente no sabía que seguir diciendo, solté el bolso que andaba trayendo dejándolo caer al suelo y me senté sobre Aizawa rodeando su cuello.

—Solo no preguntes, no hablem-

Me calló juntando nuestros labios mientras rodeaba mi cintura con sus brazos. Dejaba cortos besos seguidos de unas pocas lamidas a mis labios, a lo cual yo me mantenía con la boca semi-abierta disfrutando de aquello. Su mano se posó en mi mentón acariciándolo con suavidad y sacó un poco su lengua, hice lo mismo y las juntamos comenzando un beso algo caliente.

—Ah~...

Se me salió un leve jadeo y ambos sonreímos. Introdujo su lengua dentro de mi boca y la chupé con suavidad para luego quejarme cuando mi labio inferior fue atrapado por sus dientes. Volvió a besarme con suavidad para luego mirarme fijamente. Me sonrojé. Joder.

—Me gusta que calles mis quejas de ésta forma...

Asintió acariciando mi cabello y volví a juntar nuestros labios de una forma un poco más atrevida pues había introducido mi lengua sin permiso alguno, comenzamos una especie de guerra la cual definitivamente él ganó y se separó para luego con su mano aún posada en mi mentón se abrió espacio, lamiendo así desde mi cuello hasta mis labios dejando un último beso allí.

Necesitaba más, por lo que me posicioné un poco más cerca de su miembro, quedado casi completamente encima de éste y me moví con suavidad mientras tomaba las manos ajenas para bajarlas hasta mi trasero en donde se posaron de forma inmediata. Continué moviéndome levemente mientras volvía a atacar su boca con mi lengua, no se negó por lo que nuevamente comencé aquella guerra dándome por vencido a los pocos segundos, dejé mi lengua afuera para que el mayor comenzara a chuparla sin parar. Nuestras barbillas y labios estaban empapados en nuestra saliva pero nos encantaba. Aizawa lamió desde mi mentón a mis labios y dejó otro beso.

Sus manos bajaron un poco mi pantalón y ropa interior y comenzaron a masajear mi trasero sin descaro alguno. Lo apretaba y daba suaves nalgadas de vez en cuando, además de moldearlo y separar mis nalgas a su gusto, subía también a mi espalda para acariciarla suavemente mientras yo seguía moviéndome y besándole de aquella caliente forma que tanto me gustaba.