Lazos de Sangre

Capítulo 16: Destinados

Izumo año 505

En un prado lleno de pastos verdes y cientos de flores coloridas se encontraba un pequeño tratando de pescar algo para comer en el pequeño riachuelo que corría cerca de las ruinas de una casucha que al parecer había sido consumida por el fuego, de pronto cae al agua y sin pescado para comer.

-Mmmh me temo que de nuevo cenaré pasto hoy...

De pronto un hermoso carruaje blanco con adornos dorados pasaba por el camino halado por dos caballos negros como la noche, en el interior una hermosa niña de cabellos rubios y rizados y hermosos ojos azules veía la escena.

-Para el carro por favor...

-Pero señorita no debemos desviarnos...

Decía su sirvienta con cara amargada.

-Ufff no tardaré mucho sí? Solo un momento.

El coche se detuvo y la pequeña salió de el, llevaba un hermoso vestido rojo escarlata con encajes blancos y un gracioso sombrero que hacia juego con el vestido, el pequeño que reía divertido jugando en el agua de pronto la vio acercarse.

-Oh?... Hola!!!

El pequeño empapado saluda a la pequeña rubia que lo ve con cara graciosa.

-Hola, eso parece divertido...

Dice la pequeña con una inmensa sonrisa, a lo que el pequeño se queda boquiabierto observándola.

-Eeh?? Nah solo es agua hahaha trataba de pescar algo, pero al parecer los peces son más astutos que yo.

-Oh tal vez es que tu buen corazón no te permite hacerles algún tipo de daño.

El pequeño la ve sorprendido debido a su comentario.

-Hehehe no lo creo, lo que sí es seguro es que tienes una sonrisa hermosa.

La pequeña se sonroja un poco.

-No digas tonterías, y mejor dime... vives por aquí? Estoy algo aburrida de solo viajar.

-Vivo en todos lados, no tengo un hogar fijo, aun que últimamente me estoy quedando en uno de esos templos abandonados.

-Mmmh... Llévame allí...

-Hehehe está bien, pero no se enfadarán contigo?

-Que importa... me aburren, sólo hablan de lo valioso que será mi intercambio, así que no me preocupa si se enojan o no.

El pequeño de cabellos largos le tiende su mano con una inmensa sonrisa y comienzan a correr en dirección al templo en el que el pequeño se alojaba.

-Intercambio dices?

-Sí, mis padres me han intercambiado a una familia adinerada por tierras y un poco de oro... eso es lo que valgo...

La pequeña hace un gesto triste bajando la mirada.

-Aquí es, este es mi hogar actual... cómo puedes ver no tengo mucho, pero se preparar un delicioso té de hiervas aromáticas, quieres un poco?

-Hahahaha... sí... por favor

-Bien, algo caliente te hará sentir mejor...

Los dos pequeños se sonríen mutuamente, pasando así las horas.

-No me has dicho tu nombre... oh debo llamarte "el chico de los peces"?

-Hahaha no mi nombre es Mappa Douji.

-Mappa Douji??... es extraño.

-Hahaha sí lo sé, pero me acostumbre rápido a ese nombre.

La pequeña lo ve con un rostro confundido, mientras toma un poco más de té.