Hola Young Bin!(Young Bin)(JaeSeong)

capítulo°18

(...)

Young Bin entró al café donde la pelinegra lo había citado y se sentó frente a esta.

Ella se veía diferente, se había cortado el cabello hasta dejarlo por los hombros y se veía sumamente linda.

—¿Dónde está Yi Han?—fue lo primero que preguntó al ver que no había señal de la pelirroja por todo el sitio.

—Verás, olvidé mencionar que Sang Hyuk ya no se irá. Esta mañana Han me lo dijo cuando me llamó.—dijo con una sonrisa nerviosa y Young Bin se golpeó la frente con la palma de su mano.

—Entonces, ¿para qué me pediste que viniera? Se supone que nuestro objetivo era animar a Yi Han no venir a perder el tiempo.—soltó de repente y Jae Rim lo miró asombrada.

—Te pedí que vinieras porque no quiero estar aburrida. Es cierto que nuestro plan era animar a Yi Han, pero ella no lo necesita. Y además, no vinimos a perder el tiempo, o al menos eso creo yo. Si tienes que hacer algo tan importante que no puedes quedarte, pues entonces vete!—dijo molesta para luego mover su cabello.

—Hey, take it easy.—dijo el rubio y ella dió un revuelo de ojos para luego ponerse de pie.—¿A dónde vas?

Se quedó con las palabras en la boca porque la chica salió del sitio molesta.

No tardó en ponerse de pie e ir trás ella.

La agarró del brazo y la volteó.

—No te enojes por semejante cosa.—pidió Young Bin y ella le hizo una mueca.

—Ya suéltame. Tú estás demasiado ocupado como para perder el tiempo conmigo.—habló y esta vez fue el quien dió un revuelo de ojos.

—Olvida eso. No tengo nada que hacer que sea tan importante.—habló y la soltó.
— bien. Pero, hablo en serio, si quieres irte, puedes hacerlo.—aclaró.

—No, tranquila me quedaré contigo. Puede que mi hermana luego me mate, pero no importa. Prefiero que ella me mate antes de que tú lo hagas...

—¿Tienes una hermana?—interrumpió al chico.

—Si, tiene 10 años. No vive aquí, pero mi papá la trajo para que se pasara con nuestra familia el fin de año.—explicó y Jae Rim asintió para luego mirar al suelo.

—Seguramente la extrañabas.—él asintió.—Genial, ahora me siento pésima por haberte hecho venir.—Young Bin rió y negó.

—No te preocupes. Tengo el resto de los días para estar con ella.—subió sus hombros restándole importancia al asunto y entrelazó sus dedos con los de la pelinegra.

Esta, al notar eso sonrió mientras miraba al suelo. Era cómodo estar así con Young Bin.

Sinceramente, ya no se sentía confundida, claramente Young Bin seguía gustándole.

Caminaban despacio mientras miraban los lugares. Las calles estaban llenas de sitio y cosas geniales.

—Por cierto ¿No notas algo diferente?—preguntó Jae Rim y Young Bin negó.—¿Estás ciego?—preguntó nuevamente pero esta vez de manera divertida.

—¿Qué cosa es?

—Mi cabello, lo corté.—dijo tocando este.

Young Bin obviamente lo había notado pero quería hacerle una broma.

—Ahh, era eso. No lo había notado, es que te ves igual de fea que siempre.—soltó repentinamente y Jae Rim soltó su mano para luego golpearlo.

—Kim Young Bin!—dijo molesta y al chico le dió un ataque de risa.—No te rías!

—Solamente bromeaba, te ves hermosa igual que siempre. De hecho te ves aún más hermosa así.—halagó y Jae Rim sintió sus mejillas sonrojarse.

Young Bin le extendió su mano y ella la tomó volviendo a entrelazar sus dedos.

—Hay algo que quiero preguntarte.—la chica lo miró con total atención.—¿Por qué siempre me llamas a mi y no a In Seong o Jae Yoon?

—Creo que la respuesta es muy obvia, te he dicho cinco mil veces que me siento mucho más cómoda contigo. Además Jae Yoon e In Seong son novios.—él asintió convencido y luego volvió a cuestionarla.

—¿Por qué conmigo? Si antes yo te detestaba y me comportaba como un estúpido total...

—Bien, creo que me toca hablar. No digas nada al respecto de lo que diré.—el asintió.—No sé el porque pero me siento más cómoda contigo. Es cierto que antes eras un insoportable conmigo pero aún así me gustabas...

—Yo ¿te gustaba?—preguntó asombrado y ella asintió.—Wow, debió ser horrible para tí.—ella rió ante su comentario.

—Eso es todo, ya lo sabes.—él la miró nuevamente y luego decidió hablar.

—Si yo te digo que me gustas ¿qué harías?—la tomó por sorpresa y ella tragó fuerte.

—...Ahhh....Mmmm....Shhhh....Ahhh....No lo sé.—logró formular luego de tanto balbuceo y él río.

—Bueno, está vez seré más claro. Me gustas Jae Rim ¿Que dirás ahora?

Ella lo miró y luego miró hacia el lado buscando resolver su duda existencial.

—¿Debo responder con palabras?—él asintió.

—Se supone que sí, no sé.

—Soy mala dando respuestas, así que mejor...

Se acercó a él y se aguantó de sus hombros para acercarse a sus labios y darle un pequeño beso.

—Interpreta eso.—finalizó la frase y él sonrió.

—Creo que sé claramente que significa.—dijo con aires de autosuficiencia y ella rió levemente.