IF EVERYTHING COULD EVER FEEL THIS REAL FOREVER ━━ dave grohl [EN EDICIÓN]

Capítulo 19.

Octubre de 1991.

Annie POV:

Desperté en mi habitación con toda la luz dándome en los ojos, aunque eso era molesto para mí misma, era una buena señal, eso es que lo más seguro y probable es que hoy fuera uno de esos días donde saliera el sol, después de tanta lluvia y mal tiempo que solo me dejaba con más frió del que desde hace unos días sentía. Hoy era uno de esos días en los que no tenía ganas de hacer nada, solo pensaba en el problema que tenía acuestas. A veces quería quedarme aquí, con mis mejores amigos, y olvidar lo que Dan me había hecho, y otras quería estar con Dan. Era como si todo esto era un dilema, una parte de mi lo quería, quería agarrarle fuerte y dejar toda aquella mierda que nos separaba y ser felices, pero la otra parte realmente sabía que yo no sería feliz. Estaba completamente aterrada, sabía que no era una buena opción. Podría cansarme de estar allí, o simplemente darme cuenta de que nada de lo nuestro funcionaria. Tenía dos opciones: romper a llorar sin que nadie se diera cuenta, o fingir que estaba bien. Tal vez, nunca antes había experimentado esto. Pero me sentía rara, era volver a mi pasado oscuro. Me prometí no volver a llorar nunca más por aquel maldito tema, que acabé odiando desde hace ciertos meses, su nombre era el "amor",pero a la misma vez echaba de menos sentir aquella adrenalina nerviosa, esas típicas mariposas en el estomago que todo el mundo sentía, solo las sentí 3 veces en mi vida, por muy cutre que aquello sonara, tenía que reconocerlo, la primera solo era una niña, o una adolescente, aunque de cierta manera aún seguía siendo aquella niña inocente que todavía no había descubierto el mundo. La segunda vez, me costaba de decir aquello, pero tenía que saber que de una manera o otra Dan formaba parte de mí. Estuve enamorada de él soportando aquel característico humor que me daba miedo, no había dicho esto a nadie, me no era la primera vez que quería pegarme. Pero mirando hacía atrás en aquella época, era feliz, pensaba que lo tenía todo junto a él. Pero como en casi todas las situaciones asquerosas todo pasó muy rápido, mas rápido de lo que yo pensaba. La tercera vez, no estaba definida, solo había pasado un mes justo cuando vi a aquella persona por primera vez. Esos ojos marrones que se iluminaban cada vez que le miraba, esa sonrisa tímida que a la vez era sincera, aunque veces no fijara en ella, pero lo que mas me gustaba era cuando me hacía ponerme nerviosa, amaba en la forma que mostraba su seguridad ante mí, esa era una de las mejores cosas, pero no solo eso, también me volvía loca la forma en la que tocaba la batería, cuando tocaba tan rápido que su pelo se movía de un lado a otro. Cuándo podía ver que estaba concentrado en aquel instrumento, cuando las gotas de sudor caían sobre su cuerpo, y sobre todo cuando podía dejar ver su torso al descubierto. Perdía el control y sentía algo tan intenso por dentro, que acaba muriendo. Era como ver pasar a un ángel delante de mis ojos. Poco a poco mis sentimientos salían cada vez más hacia fuera, y si, se que repetía esto muchas veces, pero era irresistible. Suspiré y al dejar de pensar en aquello me dí cuenta que tres maletas estaban posadas en la puerta de mi habitación, la que pronto pensaba que dejaría de serlo. Sin más remedió saqué parte de la ropa que me llevaría para depositar la ropa hasta mi maleta, pero un ruido que venía desde la puerta de fuera me alertó de que debía de parar un segundo. Así que sin más remedio me levanté de la cama, con parte de mi pijama puesto, y una camiseta. Resoplé por un segundo y abrí mirando a la puerta.

"Buenos días," Un Krist algo dormido aún saludo hacía mi.

"Umm.." puse cara extraña. "Buenos días." Sonreí y le miré.

"Alex dice que cuanto te queda para salir." Bostezó en mitad de aquella frase,y me miró mientras cerraba los ojos.

"Tengo que hacer la maleta." Repliqué mientras intentaba despertarle.

"Vamos, no, puedes hacerla luego." Me miró mientras entreabría los ojos.

"Está bien... solo deja que me vista, y estaré abajo en 5 minutos." Le miré con cara de aburrimiento y le cerré la puerta casi en las narices, aunque no fue a propósito.