𝐋𝐚 𝐫𝐚𝐳𝐨𝐧 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐫 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐢𝐠𝐨 «𝐑𝐮𝐬𝐦𝐞𝐱» [Terminado]

Capitulo 26. Hunter

|2 días después|

La temperatura llegaba a los -4*C, el frío era muy insoportable para cierto país tropical, el chico con emblema de águila temblaba bajo las cobijas que el de ushanka le prestó

—Я принесла тебе горячий шоколадный и сладкий хлеб (Te traje chocolate caliente y pan de dulce)— apareció el gran país sosteniendo una pequeña bandeja con dos tazas y dos panes, en verdad Rusia recorrió todo su país para encontrar algo con que acompañar el chocolate hasta que recordó una platica junto al hispanohablante "sopear" ¿y con que mejor acompañarlo con un pan recién hecho?

Se le dibujó una pequeña sonrisa al verlo cubierto de cobertores, pero al instante desapareció al verlo derramar un río de lágrimas —¿Es por lo de...... tu hermano cierto?— el mexicano solo se cubrió la única parte que le sobraba, su cabeza —Sabes... un día mi padre me contó una historia— miró de reojo al bulto que se encontraba encima de la cama —Las almas puras y de buen corazón, son las más hermosas que podrás conocer, pero ya es poco común encontrarse con un espíritu así ¿porque crees que son las primeras en irse? Porque son muy especiales como para quedarse en este infierno...— abrió un poco la cortina dejando entrar una luz verde, el mexicano cayó en su curiosidad, destapándose la mitad de su cuerpo y observar la aurora boreal justo encima del denso bosque, el de ushanka se sentó aún lado del tricolor pasándole su taza con chocolate, y volver a mirar el cielo nocturno —...Y descansar de nuestros errores— una lágrima se deslizó por la mejilla del mexicano

—Lo extraño tanto— volvió a romperse esta vez Rusia olvidó su lado frío y abrazo al mexicano con fuerza pegándolo a su pecho —Era la única familia que me quedaba, el único con quien compartía mi misma sangre, y ahora saber que jamás lo volveré a ver, reír, jugar, llorar y enojarme junto a él... es algo con lo que no podría volver a soportar— agarro la camiseta del ruso con fuerza

—Я всегда буду рядом, чтобы ты не вмешивалась в море и люди, возможно, расстались, я всегда хочу быть с тобой до конца своей жизни (Tranquilo siempre estaré para ti no importa cuán lejos nos separe el mar o las personas, yo siempre quiero estar junto a ti el resto de mi vida)— aquellas palabras hicieron que ambos se sonrojasen como tomates, cenaban pacíficamente entre carcajadas por uno que otro chiste del latinoamericano, cuando terminaron, el mexicano se acosto viendo la aurora sin cansarse pronto sintió un escalofrío recorrer su espalda al sentir como el ruso se acostaba aún lado de él —Если я не буду чувствовать себя неловко, я могу уйти на пенсию (Si te incomodo puedo retirarme)— comenzaba a levantarse cuando una mano en su hombro lo detuvo

—No me incomoda en lo absoluto— el mexicano le dedico una pequeña sonrisa y el ruso se la devolvió al instante volviéndose a acomodarse, fue así como terminó el día con tragedias pero al fin estaban felices pues se tenían uno a otro eso era lo único que le importaba al ruso ahora, protegerlo hasta su último aliento. Y ambos cayeron en un profundo sueño.

|2:38 am|

La luz de la luna era la única que brindaba en la oscuridad total del bosque, los lobos dejaron de aullar, y los mosquitos dejaron de revolotear, como si la misma madre naturaleza le temiera a algo que merodeaba por ahí y no no era un animal, bestia o demonio, era una persona como tú y yo, capaz de asesinar y torturar, llegar a cometer algo tan inhumano y enfermo, con una mano sostenía su celular con su lámpara encendida y con la otra sujetaba una escopeta calibre 16 con dos balas en ella una dispuesta a herir y la otra para matar

"no hay que temerles a los muertos, si no a los vivos" la mente del mexicano daba vueltas intentando despertar de aquel borroso recuerdo junto a España

Una persona estaba viéndolos fijamente por la ventana, la diferencia que era bicolor y una emblema de hoja de maple le caracterizaba como Canadá, en sus ojos podía verse algo de compasión, pero cuando vio al ruso su sangre hirvió preparó su escopeta dispuesto a disparar en la frente de Rusia, pero un gruñido le hizo voltear a ambos lados hasta encontrarse con un perro alemán amenazandolo —Dante!!— un grito se escuchó a lo lejos, Canadá guardó su escopeta con extrema lentitud para no acelerar al bravo canino —¡Dante vuelve aquí!— otra vez el grito de un hombre resonó por todo el bosque

—Allez, doggie, ton propriétaire te parle (vamos perrito tú dueño te habla)— las pisadas de alguien más acercándose lo hizo alarmarse cuando observo que el canino estaba distraído se escondió audazmente en un arbusto sin hacer algo de ruido, su visión dio en el perro el cual comenzaba a olfatearlo cuando de pronto apareció su dueño nada más y nada menos que Alemania —Alter, ich dachte, ich hätte dich verloren (Amigo creí que te perdía)— abrazó al grande canino, al volver a levantarse por curiosidad observo por la ventana sabía de quien era aquella cabaña —Weißt du, eines Tages träumte ich davon, mich Russland zu erklären, aber jetzt bin ich froh, dich mit jemandem zu sehen, der dich liebt, lass los, Freund, wir müssen weitermachen (Sabes un día soñé con declararme a Rusia, pero ahora me alegra verlo con alguien que si lo ama, vámonos amigo tenemos que seguir)— acaricio la cabeza de su amigo, el perro ladro y algo dudoso comenzó a seguir al alemán —Wir müssen einen Kanadier jagen (Tenemos que cazar a un canadiense)— sonrió y ambos desaparecieron en el bosque

Canadá estaba más que asustado, no solo cazaba a los enamorados si no que ¡también lo persiguen a él!

Definitivamente no lucharía contra el alemán y su canino "Tu as sauvé la russie (Hoy te salvaste Rusia)" pensó antes de retirarse, hoy fue una noche mala para el canadiense.