Pili's POV.
El día pasó más lento de lo normal y yo no paraba de pensar en las palabras de Purre, mi padre estaba iniciando una nueva familia y por eso se había ido, por eso se estaba divorciando de mi madre. Había evitado a mis amigos por lo que restó del día, ya había sonado la campana de salida así que estaba esperando que la escuela se vaciara para así salir yo, no quería hablar con nadie.
Le había dejado un mensaje a Ethan, él debía quedarse entrenando así que no podría llevarme, agradecí internamente por eso. Finalmente la escuela estaba desierta, caminé hasta la salida revisando mi celular y cómo si no fuera suficiente todo lo que me había pasado en el día, el auto de mi padre estaba estacionado ahí mismo, en la salida. La rabia se apoderó de mí así que caminé hasta el mismo y golpeé la ventana para que me abriera, él no tardó en hacerlo.
— Hola, princesa.— Me sonríe ampliamente, yo me acomodo en el asiento de copiloto sin dirigirle la mirada.
— Hola, papá.— Le respondo sin ninguna expresión en mi rostro.
Estaba de más decir lo enojada que estaba con él, no por el hecho del divorcio, más bien por su desaparición de dos meses sin ni una llamada ni un mensaje.
— Quiero que me escuches.— Murmura, yo asiento mordiéndome la lengua.— No quise desaparecer así, te lo prometo.
— ¿Ah, no? Explícame, te escucho.— Me río sarcásticamente y finalmente lo miro, su expresión daba a entender que estaba triste pero le resté importancia, yo estaba más triste que él.
— Tu madre me sacó de la cada.— Dice.— Me dijo que me quería lo más lejos posible de ella y ustedes, le dije que era algo absurdo porque era un problema de dos, ustedes no debían influir en esto pero ella no cedió, me dijo que lo hablaría con ustedes y que después yo podría buscarlos, quise darle su espacio pero no pensé que hasta esté punto seguirían sin saberlo.— Culmina, sabía que estaba diciendo la verdad pero no se justificaba, éramos sus hijos, sin importar lo que ella dijera su deber era buscarnos y explicarnos.
Suspiré muy profundo, mis padres nunca habían tenido problemas, no sin que nosotros nos enteráramos. Me pregunto qué habrá pasado para llegar hasta ese punto, para llegar al divorcio.
— Tenías que buscarnos, independientemente de lo que ella te dijo, debías hacerlo.— Murmuro, él asiente arrepentido mientras acaricia mi mejilla suavemente.— No entiendo nada, ¿por qué? ¿cómo pasó esto?
Mi voz se quiebra, no era algo que me incumbía pero me dolía demasiado, eran mis padres, los que me vieron nacer y me criaron por 17 años completos, se juraban amor eterno todos los días, eran felices; o eso quería creer.
— Pili...no lo entenderían, no ahora, primero quiero resolver las cosas y luego te prometo que les voy a decir.— Deja un beso sobre mi frente y yo asiento limpiándome las lágrimas.— Quiero proponerte algo.
¿Una propuesta? Eso si era extraño.
— ¿Qué cosa? — Cuestiono mirándolo, él me sonríe.
— Ven a vivir conmigo, estoy en una casa bastante grande como para estar solo y tus hermanos estarán con ella, no va a quedarse sola.— No dije nada.
Mi papá tenía mucho dinero, cuando tenía 9 años vivíamos en aquella mansión, en el residencial de los ricos. Tenía a Purre en frente de mí, pero la decisión de irnos a otro lugar fue de mi madre por las costumbres que les dió mi abuela, mi padre tuvo que ceder sin quejarse porque como dije, ellos eran felices en ese momento.
— No creo poder acostumbrarme a tantos lujos otra vez, papá. — Suspiro, él se ríe.— ¿Aceptas que me vaya contigo por 1 año?
Él asintió, yo sonreí y lo abracé para luego sentir como plantaba un beso en mi mejilla.
Se ofreció a llevarme a casa así que no me negué, me acomodé en el asiento y ajusté mi cinturón para luego sentir como el coche se ponía en movimiento. Al llegar a casa me despedí de papá y rápidamente entré.
Si bien era una mala idea vivir al frente de Purre otra vez, no podía ser egoísta, mi padre me necesitaba y yo lo ayudaría, he apoyado a mi madre en todo y siempre he estado con ella, era momento de soltarla aunque sea un poco.
— Hola, corazón.— Dice mi madre voltendose para verme, yo le sonrío y me siento en el comedor.— ¿Cómo te fue?
— Vi a papá.— Confieso jugando con mis dedos, su expresión cambió en dos segundos, pude notar como su cuerpo se tensaba desde la distancia en la cual nos encontrábamos.— Quiere que me vaya con él por año.— Ella se ríe.
— Eso no va a pasar.— Alzo mis cejas con confusión y dejo de jugar con mis dedos, ella vuelve a la cocina y yo decido seguirla.— No lo permito.
— No puedes estar hablando en serio...
— ¡YA TE DIJE QUE NO, PILAR!
— Su voz era ruda, incluso me sorprendí cuando lo dijo.Nunca la había visto tan enojada, era obvio que algo más grave de lo que yo pensaba estaba pasando y no era momento de preguntar, pero me preocupó al instante.
— No te puedo creer.— Bufo y salgo de casa sin mirar atrás, ella me grita mientras camina detrás de mí pero la ignoro y sigo mi camino, mi casa se estaba yendo a la mierda y yo no podía hacer nada para evitarlo.
Inconscientemente llegué al parque, me senté en una de las bancas y tomo mi celular de la mochila para llamarlo, para llamar a Purre.
(En la llamada)
— ¿Pilar? — Su voz suena en la otra línea.
— Purre, ¿puedes hacerme un favor? — Cuestiono en un susurro mientras intentaba no descontrolarme y llorar ahí mismo.
— ¿Estás bien, pasó algo? — Se escuchaba preocupado, yo absorbí mi nariz.
— Estoy bien, solo necesito llegar a la casa de mi padre y no tengo auto, ¿puedes pasar por mí?
— Por supuesto, ¿dónde estás? — Cuestiona apurado, pude escuchar como agarraba las llaves de su auto rápidamente.
— En el parque, ya sabes cuál es.
— Estaré ahí en 10 minutos.
— Muchas gracias. — Murmuro antes de colgar la llamada.
(Fuera de la llamada)
Pensar en llamar a Ethan no era una opción para mí, recién era mi pareja y abrumarlo con problemas familiares no sería favorable, era al menos una relación que debía cuidar para no sentirme más miserable por haber perdido todo.
Con Purre tenía mucha confianza a pesar de los anteriores sucesos, sé que podía contarle todo sin miedo, era lo único que podía hacer en ese momento. Poco después vi el auto de Purre estacionarse frente a mis ojos, me levanté no sin antes haber tomado mi mochila y me subí al auto para posteriormente recostar mi cabeza en el asiento y cerrar mis ojos.
— ¿De verdad estás bien? — Yo asiento, me abrocho el cinturón de seguridad y lo siguiente que siento es el motor cobrar vida para que luego el auto se pusiera en movimiento.
— No quería molestarte, solo debo llegar a casa de mi padre lo antes posible.— Lo miro apenada, él tenía su vista centrada en el camino.— Espero no haber interrumpido nada.
— Tranquila, no estaba haciendo nada, además no iba a dejarte si me necesitabas.— Me mira algunos segundos, yo le sonrío cortamente y me dispongo a mirar por la ventana.
No tenía ni idea de que todo esto me pasaría junto, era un golpe tras otro. Necesitaba descansar, mi mente debía hacerlo, con mis padres divorciados y una vida personal tan desorganizada y asquerosa no podía pensar con claridad, vivir con mi padre me daría paz, era lo correcto y lo haría con o sin la aprobación de mi madre.
—
N/A:Novela en edición.
— Lía. 🤍
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Del odio al amor ; Pilurre [RENOVANDO]
Teen FictionPilar y José (alías el Purre) son mejores amigos desde que tienen uso de razón, incluso sus familiares son unidos, se juraron lealtad y amistad eterna, a pesar de que los planes de José en el instituto eran bastante diferentes a los de su mejor ami...