El impedimento

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Narra _____

Han pasado unos días desde la charla con mi padre acerca de ir a otro planeta.

Él ya estaba mejor y ya no necesitaba estar en reposo, lo que significa que podríamos hacer ese dichoso viaje, pero para mi mala suerte enfermé…

—Te juro que estoy bien... n-no tengo nada — Miento pero no sirve de nada ya que solté un estornudo.

Mi padre y yo estábamos a un lado de la nave pues se suponía que haríamos ese viaje hoy.

—Es claro que no estas bien, te quedarás aquí — Ordena.

¡Maldición! Yo quiero ir con él.

—Solo es un ligero resfriado, tu sabes que es raro que me enfermé — Y no mentía, no es muy habitual que me pase esto.

—Tienes fiebre ¿No es así?  — Ahg ya se dio cuenta — A las mujeres Saiyajin les da un fuerte resfriado junto con otros síntomas, solo les pasa una vez en la vida pero es muy fuerte, a algunas les llega de bebés y a otras ya de adultas parece que a ti te toco a esta edad.

¿Una enfermedad que solo les da a las mujeres Saiyajin? Que injusto.
¿Y porque me tenía que dar justamente ahora?

—Eso es estúpido, puedo con esto dejame ir — Volví a insistir.

—¡Ya te dije que no!

—No puedes dejarme aquí, soy tu hija — Dije con la intención de convencerlo pero eso era imposible.

—No dejare que vayas, no pienso cargar contigo solo me estorbarías.

Así es mi amoroso padre señoras y señores.

—¡Vegeta, _____! — Escuchamos una voz a nuestras espaldas.
Era Bulma... Lo que me faltaba. ¿Ahora que quiere?

—Que bueno que no se han ido, ¿pensaban irse sin despedirse? — Esto último lo dijo más alto — Se que regresaran pero al menos tengan la cortesía de despedirse.

—_____ se quedará… esta enferma — Avisa mi padre provocando que Bulma me viera con preocupación.

—¿Qué? ¿Enferma? — Sin previo aviso se acerco a mi y toco mi frente — ¡Estas hirviendo! Debes ir a recostarte.

¿Quien se cree para darme órdenes?

—No tengo porque hacerte caso.

—Obedecela — Ordena mi padre.

—¿Q-Qué? — Dijimos Bulma y yo al mismo tiempo con sorpresa.

—Necesitas descansar, pronto se hará mas fuerte la enfermedad.

Bulma me miró y luego dirigió una mirada enojada a mi papá.

—¡Que irresponsable eres Vegeta! como puedes irte y no cuidar de tu hija — Le regaña.

Si que tiene agallas.

—Jhum, ella estará bien aquí — Dice mientras se adentraba a la nave — Volveré en unas semanas, más te vale estar bien para entonces.

De un momento a otro cerro la puerta e hizo que la nave despegara.

Ahg se fue sin mi.

—Tu padre es un necio pero se que se preocupa por ti — Habla Bulma mientras veía como se alejaba la nave — Te llevaré a tu habitación.

—Puedo hacerlo sola — Estaba dispuesta a irme pero un fuerte dolor de cabeza me atacó haciéndome soltar un grito.

—¡_____! — Bulma me ayudo a pararme y me llevo hasta mi habitación.

Guerrera Saiyajin (La hija de Vegeta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora