*Katryna*
Jeremy me vino a buscar a las seis en su coche, un mercedes, o como les digo yo, los huevos. Fuimos al cine y sacamos los pases de la entrada, yo quise pagar el mío pero él se negó y lo pagó, estuvimos esperando media hora hasta que empezase, mientras nos fuimos a tomar algo.
- Bueno Katryna, cuéntame, ¿como que viniste aquí? -me preguntó Jeremy tomando de su refresco-
- Pues fue por temas familiares, no pude convivir con una persona y me tuve que venir -dije sonriendo. No le quise contar que mi padre me pegaba y que estaba en prisión-
- Vaya, lo siento mucho, princesa.
- ¿Princesa? -le pregunté confundida-
- Sí, en el baile, eras la princesa. Para mí eres princesa. -Sonrió dulcemente-
Pasamos el rato charlando sobre el colegio, los alumnos más novatos, anécdotas, risas y más cosas. A la hora del pase, Jeremy compró palomita y dos refrescos grandes. Pasamos y nos sentamos arriba del todo en el medio, veíamos la película de lujo.
*Una película, un bol gigante de palomitas y dos refrescos después*
No sé como, pero salimos de la mano, sí sí, de la mano, fue extraño sentir una fierecilla contenta en mi interior al notar su roce, era indescriptible esa sensación.
Después del cine, marchamos a un mirador. En ese mirador se podía observar toda la ciudad con las luces dado que era de noche, era precioso el paisaje que observaban mis ojos.
- ¿Sabes? Siempre me gusta venir aquí después de una tarde agradable, siento que el mundo se para cuando estoy con una persona que me hace sonreír, vengo para nunca olvidar los días tan maravillosos.
- ¿Maravillosos? -pregunté-
- Mira, Katryna, te parecerá raro por como te hablé el primer día, por como te defendí en el concurso de baile, por como te miré cuando Elisa vino a por mi... No sabía como decirte que... -suspiró- no hablamos nunca pero con sólo mirarte hay algo dentro de mi que me dice que tú me haces feliz, y lo he comprobado hoy.
- ¿A qué te refieres? -Una de dos, o estaba delirando o ha visto pasión de gavilanes-
- A que sentí celos cuando te vi con Lucas, ¿se llama así verdad? Bueno, el caso es que no quiero que alguien como tú... caiga en malas manos.
- ¿Lucas? ¿Malvado? Imposible. -le respondí negando-
- Katryna, cuando tú te fuiste de su lado él era lo peor del instituto, mujeriego, egocéntrico, insoportable... no quiero eso. -dijo convencido de si mismo-
- ¿Y qué quieres entonces? -le miré-
- Esto. -se acercó rápidamente a mi y me agarró de la cintura, junto mi cuerpo al suyo y bajó las manos a mi cintura, se fue aproximando poco a poco hasta rozar nuestros labios.- Solamente quiero tenerte a mi lado. -susurró contra estos y los besó. Nuestros labios encajaban a la perfección, mariposas corrían por todo mi cuerpo y yo me dejé llevar, subí mis manos lentamente hasta su cuello y lo rodeé. Le di paso a su lengua para que se mezclase con la mía, ambas bailaban lentamente y nuestra saliva se unía formando una sola. Proseguimos ese beso tanto que no parábamos de disfrutarlo. A los pocos minutos, nos tuvimos que separar por falta de aire.-
- No pensaba que esto llegase a pasar entre los dos -le dije mirándole a los ojos-
- Eso es porque nunca pensaste que estabas en mi corazón. -dijo él, mirándome fijamente.-
HOOOOLA LECTORAS.
Aquí os dejo un nuevo capítulo, espero que os haya gustado tanto como a mi escribirlo.
Ya sabéis, comentad, votad y disfrutad cariños, que esto tiene buena pinta.
Un besazo enorme, os quiero ♡