•Aͣmͫoͦrͬ dͩeͤ Cͨluͧвⷡ•

•Cap 10•

Un día cualquiera, pero con un sabor agridulce, ¿Qué puede suceder un lunes de colegio aburrido?

Pues un examen~

A cuantos nos ha pasado, que vamos felices por la vida y descubrimos que hay un examen para el que no estudiaste ni madres.

Esto le sucedía al castaño con ojos color miel, mejor conocido como, Sparta.

-¡Corre, corre, que llegas tarde! -Dijo maldiciendo su día, aunque no lo sepan, él siempre fue un alumno ejemplar y responsable, habilidoso para las matemáticas y entusiasta para la biología y demás, o eso quería creer. -

Abrió la puerta de golpe interrumpiendo la clase, solo pidió disculpas y se sentó en su lugar.

-Bien, jóvenes pueden comenzar con sus exámenes -Dijo la profesora al terminar de entregar todas las hojas-

El castaño además de llegar tarde y de todas las cosas que le habían pasado en el camino, ¡¿Tenía que tener un examen justo un lunes?!

¡Qué mala suerte!

Pero...

¿Qué había sucedido en el camino?

Comencemos desde que se levantó de su hermosa cama.

Eran como las 6 de la mañana, y aquel joven con cabellos revoltosos despertaba lentamente.

Esta vez su hermana había llegado de visita, si solo supiera lo que hacía su hermano.

-Me da tiempo de ir a la casa de Ace -Dijo aun en su cama, luego de hacer su rutina, no quería despertar a su hermana, así que salió lo más silencioso posible-

No quedaba tan lejos, pero tenía que caminar rápido, sabía que a su amigo le gustaba dormir y a veces se le pegaba el sueño de su "compañero"

[...]

-Disculpa, ¿Me podrías decir que hora es? -Pregunto un chico con mayor estatura y encapuchado-

El menor desconfío un poco y miro su reloj, al momento de querer hablar el sujeto le quito el accesorio y salió corriendo.

-¡Hey! -Este lo siguió como impulso, vaya que podría correr una maratón fácilmente aquel ladrón-

La gente aumentaba en las calles, y el sujeto se difuminaba con las personas, al momento de querer doblar una esquina, choco con una de las cuantas personas que pasaban, justamente tenía que llevar un café.

Pues este cayo arriba del castaño, soltó un quejido de dolor al caer al suelo, mientras el líquido caliente escurría en su ropa y piel, sentía que su piel se quemaba y rápidamente se levantó.

Mientras que a la persona que había chocado se encontraba recogiendo los papeles que se le habían esparcido por todo el suelo, la gente caminaba como si nada, mientras algunos pisaban las hojas blancas

-¡Lo siento mucho, no quise tropezar contigo! -Comenzó a juntar los papeles que aún estaban sobre el suelo-

-Tranquilo, solo ten más cuidado la próxima vez -Dijo un castaño más oscuro con ojos verdes, no se habían visto aun, solo juntaban los papeles que se esparcieron- Además, lo siento por haber derramado mi café sobre ti -Dijo levantando la mirada hacia aquel chico, sus miradas se cruzaron por un minuto, el de ojos verdes se quedó perplejo-

-No importa, ¡Pero llegare tarde si no me apresuro! -Este cruzo miradas con el joven y sonrió, solo le entregó las hojas y se alejó tan rápido como pudo- ¡Adiós!

Salió corriendo con la ropa empapada de café, dejando al joven castaño con la boca abierta.

Miro su teléfono

¿Ya eran las 7:35 am?!

¡¿Por qué no pasa así de rápido las horas en el colegio?!

Para colmo piso un charco de agua en el camino

[...]

-Al fin! -Exclamó algo cansado al llegar a la casa de su amigo, toco el timbre y espero unos segundo-

-Hola Andy -Dijo sonriente un chico con cabellos cafés, y ojos oscuros-

-Hola Jon, ¿Y Liu? -Saludo aun jadeando, esperando una respuesta de aquel muchacho-

-Hoy no podrá ir al colegio, se resfrío -Dijo con una sonrisa-

¿En serio creía que se iba a tragar esa excusa?

Pues sí, hoy si, ya que no tenía tiempo.

-Está bien...-El menor entendió a que se refería y solo cambio de tema- ¿Me puedes prestar un poco de su ropa?, Luego se la devuelvo.
¿Por favor?

Mejores amigos, ¿Qué esperabas?

-Claro, pasa, le diré que ya te vas a la escuela -Sonrío y dejo pasar al menor a la sala de estar-

-Menos mal que no tengo novio -Dijo aliviado, solo espero unos minutos, cuando el de ojos violetas regreso con las prendas de ropa- Gracias

Este luego de salir de la casa de su amigo se dirigió al colegio y comenzó a correr de nuevo.

La mala suerte que tenía ese día era de otro mundo

Unos perros callejeros comenzaron a correrle hasta que los perdió de vista perdió mas tiempo que nunca.

Al fin llego a la puerta de la escuela, solo faltaba que llegue tarde...

Miro el reloj de su teléfono

¡¿Las 8:10?!

Comenzó a correr nuevamente, al llegar a su salón abrió la puerta de golpe, por lo menos llegó

Solo que...

En el examen no le fue tan bien, Meh.

Pero qué más da, ¡tiene todo el año para levantar la nota!

Y así paso este lunes agridulce, ¿y por qué es dulce después de todo?

Pues porque por lo menos al día siguiente no hay clases

Eso soluciono todo el día anterior.

❤