✧ '𝗮' 𝗲𝘀 𝗽𝗼𝗿 '𝗮𝗺𝗼𝗿' ❚ bubbline. [✓]

➤ L 。

"L"  de "Limonada"

ㅡ ¡Si vuelves, te patearé el trasero! ㅡgritó Marceline al chico con cabeza de limón.

Limonagrio había estado deamvulando por el castillo, intentando robar gente dulce otra vez, y Marceline lo había visto. Lo persiguió hasta la gran puerta real y le pateó en trasero, literalmente, que lo hizo volar.

ㅡ A la princesa no va a gustarle ésto... ㅡmurmuró Mentita, mientras tomaba la mano de la vampiresa y la tiraba hacia abajoㅡ Y más le vale apoyar los pies en el suelo.

ㅡ Ése idiota... ㅡmurmuró entre dientesㅡ No puedo creer que Bonnie pudiera crear algo tan malvado cómo ésa cosa.

ㅡ Ya te sabes la historia... ㅡsusurró, mientras la arrastraba al auto real.

Una vez arriba, Mentita de conductor y la azabache de acompañante, ésta se fijó por el retrovisor una caja llena de pequeños limones.

ㅡ ¿Qué es esto? ㅡpreguntó.

ㅡ Limonagrio los trajo ㅡconfirmóㅡ No sé de qué servirán, pero espero que sean buenos.

La azabache suspiró, más bien dió un largo bufido, mirando por la ventana. Quería tomar ésos limones y exprimirlos entre sus manos hasta que no quedara más que un limón arrugado cómo una pasa. Entonces, tuvo una idea.

Al llegar a casa, llevó la caja con limones hasta la cocina, tomó un cuchillo y cortó tres a la mitad. Tomó las mitades y las apretó de forma que todo el jugo de los limónes cayera en el tarro con agua, luego cortó rodajas de limón y las puso dentro, con un poco de azúcar y hielos.

Tomó dos vasos y vertió el contenido sobre los vasos y los llevó en una charola hasta la habitación que compartía con Bonnibell.

Cuando abrió la puerta, vio a Mentita siendo regañado por su pareja, ambos voltearon a verle cuando entró.

ㅡ ¡Traigo refrigerios! ㅡdijo, luego de que nadie le dijera nada cuando cerró la puerta tras de sí.

ㅡ Mentita me contó lo que has hecho a Limonagrio, Marcy deberías-... ㅡla pelirosada fue acallada por los dedos de su pareja.

ㅡ Traje limonada casera.

ㅡ ¿Limonada? ㅡpreguntó Mentitaㅡ ¿Con los limones que se olvidó Limonagrio?

ㅡ Ahá.

ㅡ ¿Por qué hiciste limonada? ㅡpreguntó Bonnibell, rascándose las sienes, estaba a punto de explotar, su paciencia estaba en el suelo.

ㅡ Si la vida te da limones... ㅡpensó por un momento, luego miró el suelo algo avergonzadaㅡ ...Haces limomada.

Sí, fue una estúpidez.

¿A quién se le ocurriría semejante frase?

Bonnibell estalló en risas y éso le dió la confienza suficiente a Marceline para seguir diciendo boberías.