Fulminado por un rayo - Chris Colfer

~10~ CAPITULO

15 de octubre

 

 Clovergate, día uno

  Salí antes de la clase de química para que Malerie y yo

pudiéramos ponernos en marcha. Crucé el campus y la recogí en la

clase de arte. Estaban trabajando con arcilla y Malerie modelaba una

especie de Bugs Bunny.

  —¡Malerie, vámonos! —le dije desde la puerta—. ¡Ha llegado la

hora del Clovergate!

  —Pero estoy haciendo una escultura —dijo ella, buscando con la

mirada al profesor, que antes se encargaba del taller de carpintería;

lleva un parche en el ojo y le faltan cuatro dedos. Que Malerie se

saltara la clase era lo último que le preocupaba.

  —¡Malerie, no es momento de ponerse a hacer esculturas! —le

dije. Parecía un cachorrito confuso en mitad de una encrucijada.

Recogió sus cosas con los codos porque tenía las manos llenas de

arcilla.

  —¡Eh, pero si es el chico-lápiz del desfile! —dijo algún gilipollas.

Le presenté a mi dedo corazón y nos marchamos.

  En la clase de periodismo, Malerie y yo elaboramos un gran

diagrama del Clovergate. Colocamos las fotos de carné de las que

serían mis primeras víctimas: Claire Mathews, el entrenador Walker,

Remy Baker, Nicholas Forbes y Scott Thomas. Había decidido apuntar

a lo más alto.

  —Captura a la reina, y el resto de la colonia vendrá detrás —dije.

  —Sí. A menos que las hormigas se rebelen y decidan ejecutar a

la reina como sucedió en mi granja de hormigas.

  Añadimos a Vicki Jordan y a Dwayne Michaels al diagrama.

Como os decía antes, chantajeo sin discriminar a nadie; mis objetivos

no se limitan a los alumnos más populares. Además, esa diversidad

me viene bien para la revista.

  —¿Y cómo vamos a chantajearlos a todos? —preguntó Malerie.

  —Tengo material contra la mayoría de ellos —contesté—, pero

de los otros no estoy muy seguro. Aunque, bien pensado, Colón

tampoco estaba seguro de que Norteamérica estuviera ahí. ¿Y sabes

qué hizo cuando llegó?

  —¿Qué? —preguntó Malerie.

  —Hizo esclavos a todos los indios que encontró a su paso.

  —Oh —dijo Malerie, y miró el diagrama—. Mucho cuidadito,

indiecitos.

  —Con algunos va a ser mucho más fácil que con otros —dije,

meditando quién recibiría el primer golpe—. Recuerda, Malerie: si algo