punto 12

38 0 0
                                    

Pasaron los días y todo estaba relativamente normal, la situación iba igual pero yo ya no aguantaba, tenía planeado decirle todo en su último intercolegial,el sentimiento me estaba matando lentamente cada vez que lo veía, cada que le hablaba y estaba frente a mi me daban ganas de decirle todo, de abrazarlo tan fuerte y bueno...

Robarle un beso.

Pasaba día y noche repasando el tema y no encontraba la manera de que cuando le dijera no sonara tan enamorada o que pareciera que lo estaba acosando :'( 

Aclaro una cosa, no lo estaba aconsando, aveces solía verlo de lejitos cuando se iba de la escuela, lo veía alejarse sin poder quitarle la mirada hasta que desaparecía por completo.
Un día por la mañana un chico me dijo:

-Bueno Maria cuéntame de ti ¿qué es de tu vida?

- No creo que haya algo interesante que contarte acerca de mi vida.

- ¡Hey vamos! A de haber algo.

-Bueno si, hay una historia que quiero contarte, se trata sobre el chico que me gusta.

Le conté todo. Creo que ese es mi problema, normalmente no me importa hablar de mis sentimientos, suelo disfrutarlo tanto que hago aveces que las personas quieran saber mas sobre lo que les cuento, me gusta contarlo por que se que no hay muchas personas que se atreven a hacer lo mismo, a mi me gusta que las personas me vean siendo transparente,me gusta ser yo todo el tiempo, sin tener que fingir que no siento nada.

Le conté todo y le dije que el problema aquí era que ya no aguantaba estar cerca de Emilio sin decirle todo lo que sentía respecto a él. El chico prácticamente me dijo:

- se nota que te gusta mucho ¿por qué no se lo dices de una vez por todas? Eso estaría cool.

- No creo, estoy planeando el momento adecuado para decirle todo, solo quiero ganarmelo poco a poco.

- Ese tipo de cosas nunca terminan bien, no lo planees, te lo digo por experiencia, solo deja que fluya y dile todo lo que quieras que a final de cuentas creo que no tienes nada que perder.

-Bueno creo que lo pensaré un poco y tomaré una decisión pronta, que ya no puedo más con esto.

Todo esto pasó antes del almuerzo, pero mi día seguía siendo feliz sin importar que el chico del que tanto escribía apareciera. Suelo almorzar en la planta alta del primer edificio de la escuela, normalmente me pueden encontrar ahí. Estaba con un par de mis amigos cuando lo vi, pasó en frente de mi y se detuvo al verme, me sonrió y me dijo

-Hola ¿como estas?

Yo estaba sentada en el piso y cuando iba a darme un beso en la mejilla le dije

- bien pero mejor ayudame a pararme.

Me tomó con sus manos, me jalo hacia el. Hablamos como por 2 minutos, al final me dio un abrazo tan fuerte, un abrazo tan especial de esos que no se repiten dos veces, se sintió tan bien que en ese momento todo el estrés que tenía me había dejado descansar mientras estaba en sus brazos, realmente disfruto tanto abrazarlo. Justo cuando el abrazo terminó le dije...

-Necesito hablar contigo sobre algo

-Ammm claro ¿cuando?

- ...

-Mañana en el receso ¿te parece?

-si, esta bien :')

Aún que no lo crean, cada que lo veía mis platicas con el eran de este tipo, eran platicas cortas y creo que hasta esa fecha no tuvimos oportunidad de hablar bien sin que alguien estuviera y nos interrumpiera, ni siquiera sabía en lo que me había metido, ahora tenía que decirle todo mi caos, no sabía como hacerlo, quería decirle de mil formas que me gustaba, (por que si, ni el mismo se imagina lo mucho que me gusta) era mi pequeño momento y me estaba preparando para eso.

Aquí voy. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora