Capítulo 9

3.1K 77 1
                                    


— Hace días que te encuentras de esta manera.

— ¿Cómo?

— Estas muy decaída.

— Claro que no Didier . . . Mejor me voy.

— Espera hace tiempo que no vienes a verme.

— No vine ha verte a ti, vine a ver a Dean.

— Sabes que no es cierto, además fui yo quien te encontró cuando te perdiste en ese laberinto.

— Eso ya lo sé.

— Aún no entiendo como te perdiste en ese lugar.

— También te lo expliqué.

— Tú no eres tonta para entrar a un laberinto de noche y sola.

— . . .

— Bueno eso ya no importa.

— Lo siento se que hoy tenías una cita con Ari.

— Me interesa más mi prima preferida.

— Tan seductor como siempre.

— Me volví así por tu culpa.

— No me quieras culpar ahora, no es mi culpa que coquetees con cada chica que vez.

— Me conoces tan bien.

— Eres todo lo contrario a tu hermano.

— Los gemelos no son siempre parecidos en carácter.

— Tienes razón.

— ¿Quieres una copa de vino?

— Lo que tú quieres hacer es embriagarme.

— Es la verdad, dices cosas interesantes cuando estas ebria.

— ¿A qué te refieres?

— Nada, olvida lo que dije.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

— No estoy ebria, pero si me afectó un poco las copas de vino que tomé - Llévame a casa por favor.

— ¿Ya te quieres ir?

— Mañana tengo una reunión con los productores y directores de la película no sería nada profesional si voy con resaca ha la reunión.

— Tienes razón, vámonos te llevaré a casa.

Pero que sucede no puedo pararme sin tambalear a los lados.

— ¿Te encuentras bien?

— Me maree un poco, eso es todo - Quiero caminar pero mi cabeza aún da vueltas

— ¡Hey caeras!

— Siento como pone sus brazos al rededor de mi cintura. Estamos muy cerca el uno del otro, el aroma de su perfume es exquisito, no puedo resistirme, quiero que me bese — Didier bésame — El junta sus labios con los míos, el calor de sus labios invade mi cuerpo . . . Pero esta sensación no dura mucho tiempo.

— ¡Didier ya llegue! Traigo a Aria y Ari con migo

Nos separamos de inmediato

— ¡Oh! No sabía que estabas aquí Valentina.

— Hola Dean.

— ¿Qué hacían ustedes dos?

— Ari cariño sólo hablábamos un poco, verdad Vale.

— Sí, pero yo, ya me iva.

— Te llevó.

— No te preocupes Didier llamaré un taxi afuera — Hago todo lo posible para caminar en línea recta pero no creo estar logrando mi objetivo.

— Didier quédate con las chicas yo la llevaré a casa, ya es tarde y no podemos dejarla sola.

— Esta bien.

— Vamos Valentina.

— Bien, adiós chicos.

— Cuídate.
.
.
.
.

— ¿Estuvieron bebiendo?

— Sólo un poco — Muy pronto llegaremos a mi casa.

.
.
.
.
.
.

— Hey nos pasamos — Veo desde la ventana del auto como se aleja de la mansión.

— No iremos a tu casa, planeo llevarte ha otro sitio.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Gracias por seguir la historia

Secretos IncestuososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora