Amor y Poder

Lan Zhan se va de viaje

ÓPTICA DE WEI YING:

Los chicos han ido a cenar al comedor de la secta, yo no puedo, tengo un poco de fiebre, sólo un poquito, por eso no quiero comer nada y estoy tirado en mi cama, sin ánimos de levantarme, Jiang Cheng prometió que me traería mis pastillas más tarde. Estoy tapado, de pies a cabeza, en medio de la oscuridad, cuando escucho que tocan la puerta, voy a salir de la cama para abrir, cuando de pronto me siento un poco mareado, mejor me vuelvo a echar, después de todo Jiang Cheng y Wen Ning tienen llave del cuarto, así que me vuelvo un tapar de pies a cabeza, pero siento que la puerta se abre, escucho unos pasos, alguien prende la luz y me asusto sentándome en la cama a pesar del malestar y veo a Lan Zhan con una bandeja, que tiene un plato de sopa, una cuchara y una pastilla

-¿Qué haces aquí? - le pregunto sorprendido y mi corazón comienza latir a mil por hora - ¿Por qué entras a mi cuarto?

- Disculpa, Wen Ning me dijo que tenías fiebre y no ibas a cenar, por eso, te traje una sopa y una pastilla- me dice Lan Zhan mirándome

- Está bien, gracias, eres muy amable - le digo con ironía - ya te puedes ir señor de la caballerosidad, necesito descansar- pero veo que él está parado mirándome, como queriendo decir algo más, pero no está seguro de hacerlo - ¿Qué pasa? - le pregunto mirándolo - ¿Por qué aún no te has ido?

- Nada, sólo te quería comentar que voy a viajar hoy a la ciudad de Yameng y pasare por zonas aledañas, a exorcizar con mi hermano, estaremos fuera por dos semanas- comenta Lan WangJi

- ¿De veras?, esa es una gran noticia, no veré tu engreída cara por dos semanas y podré descansar de ti cuanto me plazca, ahora vete por favor- le digo y luego me tapo otra vez, de pies a cabeza, imaginando que ya se irá, pero escucho que se acerca y me pongo nervioso otra vez, mi corazón vuelve a latir rápidamente, comienzo a sudar, incluso a temblar, contengo la respiración, temo que trate de tocarme de nuevo o besarme, estoy atento a cualquier cosa, pero tengo miedo... Cuando de pronto, siento que deja la bandeja sobre mi mesita de noche, se aleja, apaga la luz, cierra y se va del cuarto. Ahora que estoy otra vez solo, sigo sintiendo que mi corazón late con fuerza, no entiendo porque me inunda la decepción, recuerdo su beso, también su boca y su lengua sobre mi cuello, seguidamente me estremezco, siento como ondas de placer por el recuerdo.