Amor y Poder

Wei Ying extraña a Lan Zhan

ÓPTICA DE WEI YING:

Nos fuimos al restaurante con los chicos, he ido más por fuerza que por ganas, no me gustó terminar mal con Lan Zhan, justo el día de mi cumpleaños, pero tengo que fingir que todo está bien, aunque no puedo estar más distraído, porque la persona a la que más quiero ver, aunque suene egoísta, es a Lan Zhan y no puedo, porque la estoy pasando con otras personas y nuestra relación es un secreto, es la primera vez que me estresa en verdad estar en las sombras con mi relación y lo peor de todo es que no puedo hacer nada, que frustrante situación, debo ver una forma de poder irme de aquí y reunirme con Lan Zhan, así él no quiera, pero no sé cómo hacerlo, debo pensar en algo. Ya estamos en la posada, los chicos se han estado quejando de mí, especialmente Jiang Cheng, diciéndome de que apenas hablo con ellos, él único que no me dice nada es Wen Ning, porque sabe la situación en la cual me encuentro, aunque igual no puede ayudarme.

- Chicos, ¿qué tal un poco de magia? - les digo, ocurriéndoseme una idea

- Claro- dice Nie HuaiSang animado y con una sonrisa

-¿Qué tipo de magia? - pregunta Wen Ning también con una sonrisa

- A está hora, ya es demasiado tarde- se queja Jiang Cheng y comienza a bostezar

- Es mejor que nada- dice Jin Zixuan

-Bien- les digo sonriente y saco uno de mis talismanes, de dentro de mi manga izquierda y lo lanzo al aire, cuando comienzan a explotar una especie de fuegos artificiales dentro de la recamara, pero que no tienen fuego, ni son peligrosos y tampoco hacen ruido dentro del cuarto, pero a cambio tienen vivos y hermosos colores y cuando explotan, se forman como flores y después dentro del cuarto, se forma como una galaxia, en donde hay innumerables estrellas, pero en vez de planetas, se ven animales, de diferentes colores, algo precioso para la vista, que hace que todos se queden anonadados, mirando con la boca abierta, de pronto, los animales comienzan a desintegrarse como el polvo y ese polvo, absorben un poco todos los chicos, excepto yo, que me tapo disimuladamente con mi manga y veo como todos, poco a poco se quedan dormidos, incluso comienzan a roncar relajados, ¡está es mi oportunidad!, pies para que te quiero, ¡me largo de aquí!

Ya estoy afuera de la posada, son como la una de la mañana, y me adentro por un camino que es como una especie de bosque, que es de regreso a Gusu, aunque sin duda será largo, porque Jiang Cheng no me dejó traer mi espada , ¡maldita sea!, no importa, iba a correr a toda velocidad, cuando en eso me choco con alguien alto, vestido de blanco y cabellos largos, que pese a la oscuridad de la noche, él se ve incomparablemente hermoso, mientras que la luz de la luna lo alumbra, viéndose perfecto, impoluto, casi celestial, al verlo trago en ceco, porque me doy cuenta perfectamente de quien es esa persona, esté hombre es un sueño, sólo quiero abrazarlo y así lo hago.

- Lan Zhan- le digo feliz, pero después de salir de mi emoción inicial me pongo a pensar: «¿qué hace él aquí?» -Lan Zhan ¿qué haces aquí? - Le pregunto mirándolo

Él se queda mudo, baja la vista, lo veo claramente abochornado, yo sonrío y lo comprendo todo, ¡él vino a buscarme!, seguidamente lo tomo de la cara y lo beso con pasión, nos sale un quejido, el viento pasa, nuestros cabellos vuelan en dirección donde va el viento y nuestro beso prosigue, dejándonos anonadados, deseando más, mucho más del otro

-Estoy feliz que estés aquí cielo- le digo abrazándolo de la cintura y pegándome a su pecho, seguidamente escucho lo que no puede mostrarme, un corazón que late con fuerza, más rápido de lo normal, una respiración entrecortada y siento una piel sudorosa por los nervios, mientras él me rodea con sus brazos, yo sonrió sin querer dejar de estar abrazado a su pecho, cuando de pronto lo escucho:

- Perdóname Wei Ying, realmente no debí molestarme, disculpa mi...

- No te preocupes - lo interrumpo- está bien, lo importante es que estás aquí, porque viniste para verme ¿no? - luego lo miro y él baja la mirada y yo sonrío, sé que está avergonzado, yo levanto su cara, le sonrío feliz