MARATÓN EN EL HANSHI

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Jiang Cheng está sentado frente al tocador del Hanshi, mirándose en el espejo, mientras Wei Ying lo peina a su tras y Wen Ning está parado al lado derecho de los dos primeros

- Hoy regresa el maestro Lan Xichen- le comenta Wei Wuxian a WanYin mientras lo peina y lo mira de reojo a su hermano de crianza a través del espejo

- ¿Estas feliz maestro Jiang? - le pegunta Wen Ning con una sonrisa cálida, también mirando el reflejo del aludido en el espejo, aunque ya sabe que sí

Jiang Cheng después de escucharlos siente que se sonroja ligeramente, de pronto esboza una tímida sonrisa y muestra sin querer un hermoso brillo en sus majestuosos y grandes ojos azules, que Wei Ying y Wen Ning después que lo miran, sonríen, sin necesitar más respuesta

- Ha sido una semana difícil- dice de un momento a otro WanYin, pensando en todos esos días en los cuales a estado ausente Lan Huan de la secta

- Lo sé- le dice Wei Wuxian a su hermano menor por un año - pero ahora tu hombre ya no tarda en llegar, no debes preocuparte más...

- No...- dice Jiang Cheng sintiéndose más tranquilo, para después respirar profundo por un momento, aliviado de que su pareja por fin vaya a regresar- a sido una semana muy larga para mí...- comenta

- Es cierto- dice Wen Ning- pero seguro que ya no tarda en llegar

- Uhmm- dice WanYin mientras se mira en el espejo, hasta que su hermano mayor lo termina de peinar y le echa un vistazo a su shidi, le a dejado el cabello suelto y le a hecho dos trenzas, que empieza cada una en cada costado de su frente de Jiang Cheng y se las a amarrado, como si fueran una media cola, un peinado que a WanYin le da un aire mucho más elegante de lo que ya es él.

- Listo- le dice Wei Ying después de acabar de peinarlo - ¿te gusta? - le pregunta a su hermanito por como a quedado su pelo

- Sí- contesta Jiang Cheng sin dejar de mirar su imagen en el espejo.

Como dos horas después, que los tres jóvenes están conversando en uno de los jardines de la secta de Gusu, se dan cuenta que Lan Xichen y su tío Lan Qiren recién llegan a la secta, junto con una comitiva de discípulos y Lan Zhan los está recibiendo en la puerta de entrada de la secta, al lado de Qiang y recién en ese momento Lan Qiren conoce al nuevo guardia que resguarda la puerta de la propiedad de los Lan.

- ¡Ya llegó el maestro Xichen! - dice Wei Ying sonriendo emocionado por su hermanito, mientras sonríe y mira a su shidi

Jiang Cheng siente mariposas en el estómago ni bien ve a su pareja en la entrada de la secta, su corazón acelera sus latidos y sonríe de oreja a oreja sin poder evitarlo, al ver que su hombre por fin está de regreso y en ese momento la vida no puede ser más perfecta para él, mientras su hermano y Wen Ning lo quedan mirando, observando cada gesto que él hace por ver llegar a Lan Huan, en donde se muestra completamente dichoso y emocionado, por eso también sonríen, ya que se sienten muy felices por él.

Lan Huan está en el Hanshi, ya conversando con algunos discípulos sobre las obligaciones que hay que hacer en el día, pero a la vez su mente está en otra parte, ya que no puede evitar dejar de pensar en WanYin, sobre todo en ese momento que sabe que se encuentra muy cerca y en cualquier lugar de su secta, al lado de su cuñado y Wen Ning. A sido una semana difícil y casi se a muerto de la nostalgia de su joven pareja, pero al menos ya está aquí de nuevo, para poder volver a abrazar a Jiang Cheng, que es la persona que él más quiere en este mundo, pero por más que quiera correr a buscarlo, no puede dejar botadas sus responsabilidades y para colmo, sólo en veinte minutos tiene una reunión con su tío y su hermano, para que el menor de los jades les informe como a estado la secta en esta última semana, que él y su tío han estado ausentes por estar presentes en el congreso de magia, seguidamente, tocan la puerta y él mismo la abre, para después ver a WanYin afuera sonriéndole, que ni bien lo ve Lan Huan se le ilumina la mirada y no puede evitar sonreírle ampliamente, mientras los latidos de su corazón aumentan y siente aleteos traviesos dentro de su estómago, por la emoción de por fin poder volver a ver a su novio, que se ve completamente hermoso y maravilloso... Incluso más que antes, con ese peinado que le queda también y lució también en la primera cita que tuvieron y le trae tan gratos recuerdos.

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