Capítulo 8:Tensión Parte II

827 104 2
                                    

No puedo evitar la tensión más y exploto.
-¿Por qué debería? No me digas que te avergüenza las miradas de la gente, porque entonces no deberías salir de casa. Vamos, ni tú ni tus hermanos-veo como me lanza una ojeada intensa-pero, especialmente tú. Tienes que saber que sois increíblemente guapos. Normal que os observemos con admiración
No sé qué pensar ni qué decir, por lo que me lanzó a comer. Cuanto antes termine de comer, antes me firma y antes acaba todo esto.
-Relaja, Krist. La comida no se va a acabar. ¿O estás intentado escapar de mí?
-¿Por qué me has pedido comer contigo?
-Me intrigas, me atraes y quiero conocerte.
Me muerdo el labio. Estoy nervioso, noto una gran tensión entre nosotros.
-No me conoces.
-Mira, a mi no me gusta engañarme. Soy homosexual, me gustan los hombres desde que tengo uso de razón.Resulta que me he fijado en ti y se que no es unilateral, por la manera en la que me miras. La tensión, lo que pasa cuando estamos juntos no es algo que pueda ni quiero obviar. Desde que te vi el primer día, he estado pendiente de ti. Quiero seguir conociéndote y saber a que lleva esto-nos señala.
Si quieres intentar negar que algo está pasando con nosotros, perfecto, no te lo voy a impedir;pero yo no lo voy hacer.
Creo que lo estoy sintiendo ahora mismo, lxs humanxs lo llaman alucinar o flipar.
Dios mío, la convicción de sus palabras me tientan. Quiero que me demuestre  hasta a donde puede  llegar para ver que pasa con nosotros. Pero es imposible y peligroso.
Soy un ángel, un ángel de Clase B que estoy pasando mi periodo de Transición en Tailandia, en esta facultad. Estoy aquí, para equilibrar la balanza un poco a nuestro lado y no para socializar con amigxs o para dejarme absorber por un joven humano, que tiene una pinta de ser un rompecorazones memorable.
Después de comer el último trozo,lo miro y le digo firmemente :
-¿Te importaría firmarme?
-Claro, un trato es un trato.
Por fin, firma y me entrega la libreta.
-P' Singto, agradezco mucho tu sinceridad. Aún así, yo he venido para una cosa muy diferente a ser tu experimento.
Agarró mi mochila e intento levantarme. Sin embargo, la voz de Singto me lo impide:
-No te vayas, por favor. No eres ningún experimento. A lo mejor, he sido un poco agresivo. Discúlpame. ¿Por qué no empezamos a ser amigos mejor?

AlasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora