Amores confusos

II

Jason

—Connor, basta —dije irritado.

—Es demasiado obvio que te gusta

—No, Connor. ¿Es linda? Sí ¿Me gusta? No.

—Claro que sí —me aseguró.

—Me gusta Danielle ¿Okey?

—¿La amiga de Linda? —preguntó sorprendido y yo asentí con la cabeza—. La conociste cuando estabas borracho.

—A Hallie también —refuté defendiéndome.

—No es cierto, dijiste que apenas habías abierto la botella cuando ella se acercó.

—Connor, basta —volví a decir—. Sí, Hallie es linda, es amable. Pero Danielle es hermosa y además...

—Es mayor que tú, por eso te gusta.

—Por supuesto que no.

—Jay, siempre te han atraído chicas mayores, pero no es un delito aceptar que hay una chica que rompe con tus esquemas.

—¿Quién eres y qué demonios hiciste con mi hermano? —reímos.

—Te voy a confesar un secreto —dijo Connor.

—¿Tú? ¿A mí?

—Sí, pequeño idiota. Estoy enamorado.

—Ya lo sabía.

—¿Qué? Es la primera vez que lo digo en voz alta —dijo sorprendido.

—No es necesario que lo digas en voz alta, se te nota.

—¡Ja! —exclamó—. No es necesario que digas que Hallie te gusta, se te nota.

—No seguiré con esto —dije y subí a mi cuarto.

Era imposible que me gustara Hallie, recién la conozco. Además estoy seguro de que me gusta Danielle. Connor solo quiere volverme loco.

—Jason, ¿Puedo pasar?

—Claro —Matt, mi hermano mayor, entra a mi habitación.

—Solo quería, ya sabes, disculparme por no apoyarte el otro dia —dijo.

—No importa, sé lo imponente que es mi padre.

—Y, ¿Qué tal la escuela?

—Agradable, en realidad no es para nada mala.

—Me alegro por ti —dijo dando la vuelta para salir.

—Oh, Matthew —lo llamé.

—¿Si?

—Gracias por la disculpa —sonrió y cerró la puerta.

Vaya, mi hermano disculpándose era algo realmente nuevo y sorprendente, por lo regular él no es empático.

Recordé que Danielle y yo intercambiamos números de teléfono. En realidad todos intercambiamos, pero tengo el suyo y eso es lo importante, así que le escribí un mensaje