𝙰𝚖𝚘𝚛 𝚎𝚗𝚝𝚛𝚎 𝚌𝚘𝚛𝚛𝚎𝚍𝚘𝚛𝚎𝚜 [A.M] {EDITANDO}

Capítulo 34

Último capítulo

Narra Milagros

Al terminar de subir las escaleras, me quedo un rato esperando a ver si alguien sube. Pero al ver que nadie lo hace, corro a la habitación de mi madre y trabo la puerta con seguro.

Me quedo parada, observando todo con atención y descifrando donde puede estar el objeto que necesito.

Agarro la silla del pequeño escritorio de mi madre y lo llevo al frente del placar. Me subo en la silla y comienzo a revisar por la parte de arriba y continuo con la parte baja del placar. Al ver que no esta por ningún lado, dejo la silla en su lugar y reviso sus cajones, sacando todo sobre la cama. Bufo molesta y vuelvo a dejar todo donde estaba. 

Muerdo mi labio inferior y sonrío. 

Me agacho y reviso de bajo de la cama. Encuentro dos o tres pares de zapatillas y una gran caja de color negro con algunos dibujos de mándalas de color blancos. Estiro mi mano hasta mi objetivo y la atraigo hacía a mi. La limpio un poco con mi mano y la dejo sobre la cama.
La abro con cuidado y me encuentro con varios álbumes de fotos, algunos grandes otros chicos y alguna que otra foto suelta. Saco los tres grandes libros que hay y los dejo uno al lado del otro.

El primero que es de color rojo contiene letras medianas blancas y en imprenta, formando"Familia".
El segundo es de color negro y este tiene letras igual que el anterior de color doradas y en cursiva, formando "Amigos".
El tercero y último es de color azul, contiene letras blancas con alguna decoración en negro formando "Mejores amigos desde chicos".

Frunzo mi ceño al leer el último libro.

Suelto un suspiro y me siento en el medio de la cama como indio. Agarro el primero libro llena de fotos y lo dejo a un costado. Por suerte no olvidé a mi familia.

Agarro el segundo libro y lo abro. Hago una mueca al verme a mi con chico un poco más alto que yo. Unos quince años tenía en ese entonces.

Voy pasando las páginas y me encuentro con más fotos de aquel chico y también con una chica. A medida que paso las páginas los tres vamos cambiando, vamos creciendo.
Sonrío al verme con el chico y la chica, riéndonos mientras estamos completos de espuma y confeti. Los tres con una gran sonrisa en nuestros rostros.
Continuó pasando las páginas y mi sonría se borra al ver al chico de abajo, el que estaba en la cocina junto a mi mamá.

Me está abrazando de la cintura, mientras besa mi mejilla y yo tengo mis brazos en su cuello mirando a la cámara con una gran sonrisa. Es muy parecida a la foto que estamos con una chica. La diferencia es que estamos nosotros dos solos, llenos de espuma y en la piscina de mi casa.

Un fuerte dolor comienza a parecer en mi cabeza.

Flashback

— ¡¡ELÍAS!! —grito riendo y agarro la lata de espuma que hay en la mesa. Mientras corro le tiro un algún que otro poco de espuma.
Corro tras de él y cuando estamos por llegar a la pileta frena. Aprovecho y le lleno de espuma la espada. Él me hace lo mismo y comienza nuestra guerra de espuma mientras escuchamos la risa de nuestros familiares y amigos. Al ver como pasa sus manos por su rostro para eliminar la espuma, corro a él y lo abrazo tirando lo a la pileta.

Salimos a la superficie y soltamos una gran carcajada,  y continuamos con nuestra guerra de espuma.