Capítulo 25

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La brisa matutina era fría y refrescante. El sonido de las hojas de los árboles moviendose a causa de esta era relajante y totalmente acorde al lugar en el que Chaeyoung se encontraba.

Hace mucho tiempo no la visitaba.

El trabajo y todo lo demás consumió su tiempo, pero ahora se tomó el tiempo de hacerle una visita. Ella siempre la escuchaba.

— Y eso fue lo que ocurrió. -Terminó de contar la rubia.- La culpa fue mía nuevamente, y lo asumo. -Suspiró desviando la mirada y apoyando sus manos en el piso.- ¿Algún consejo, Somi?

Le preguntó a aquel lugar donde el jarro que contenía las cenizas y la foto de su amiga se encontraban. Chaeyoung acarició el vidrio protector y tragó un nudo en a garganta.

— Te extraño...

La rubia suspiró y cerró sus ojos. Somi la ayudaba en todo momento, a ella no le importaba decir las cosas a la cara y en momentos así la canadiense estaría regañandola mientras la abrazaba. Así era ella, algo enojona pero cariñosa a la vez.

— Ah, Chaeyoung-noona. -Una voz masculina llamó la atención e hizo que volteara.- Tiempo sin encontrarnos aquí.

— Oh, Jungkook. -Habló sorprendida.-

Jeon Jungkook, el hermano menor de Somi, se encontraba tras ella con un ramo de flores en sus manos. El joven se sentó a su lado y con la llave abrió la pequeña puerta para cambiar las flores que habían ahí, ya casi marchitas.

— Me sorprende encontrarte aquí, unnie. Pensaba que ya no vendrías por tu trabajo. -Comentó el joven mientras sacaba las flores viejas.- A mi me cuesta debido al mío, vengo cada vez que tengo días libres. -Comentó.-

Chaeyoung lo observó bien después de un rato. El chico vestía su uniforme de trabajo, la insignia de la policia en el lado izquierdo de su pecho brillaba al igual que su sonrisa.

Aún recordaba las furiosas palabras del menor cuando Somi falleció. Que haría lo posible por evitar ese tipo de casos y que no permitiría que las denuncias por maltrato se dejaran de lado como lo hicieron con él cuando denunció a su padre.

— La verdad, sí he descuidado mis visitas. Pero usualmente vengo cada Domingo o día libre. -Respondió mirando la fotografía enmarcada de una sonriente Somi.-

— ¿Hoy es su día libre? Veo que trae muchas cosas. -Preguntó curioso el joven para luego colocar las flores nuevas en el florero y cerrar la pequeña puerta de cristal.-

— Necesitaba...hablar con ella.

Jungkook asintió, entendiendo.

— Sí...yo también vengo a veces a hablar. Siempre ha sido buena escuchando.

Y así ambos se situaron en un silencio. Recordando momentos y consejos que los marcaron por parte de Somi.

Hasta que a Chaeyoung se le iluminó el rostro al tener una idea que pasó de la nada por su mente.

— Jungkook, ¿de casualidad podrías ayudarme con algo?

•••

Mina suspiró y caminó por los pasillos del hospital. Hace una semana había discutido con Chaeyoung y no se lo había contado a nadie. Muchos hacían el comentario de que sus ojeras estaban marcadas pero ella tan solo respondía que era por el excesivo trabajo que estaba teniendo últimamente.

Había conversado con su padre con respecto a Yeojin y su avance. Se ganó un gran regaño por lo poco profesional que había sonado aquello para su padre, pero lo dejó pasar debido a que la doctora no se veía bien aún.

Moon & Bouquet •Michaeng G!P• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora