Dio un grito lo bastante alto como para que los vecinos de la casa de su… "cita", como lo llamaba, se quejaran, asustaran o llamaran a la policía pensando de que se trataba de algún robo o intento de secuestro.
HoSeok era muchas veces alguien dramático, pero ¿quién no lo sería en aquella situación?
-Eres un miedoso, hyung-
El mayor cubrió rápidamente sus ojos esperando a que aquella aterradora escena de fantasmas acabara con su tortura y miedo hacia las cosas paranormales. Al mismo tiempo, sentía como unos fuertes y protectores brazos lo cubrían con mucho cuidado, intentando que sintiera el cariño que le transmitía con ese pequeño abrazo.
Eso lo estaba calmando un poco.
-¿Y de quién es la culpa?, sólo a ti se te ocurre poner una película de terror cuando sabes que no me gustan- Aprovechó la cercanía del gran cuerpo del menor para darle un pequeño golpe en el pecho, aunque sin fuerza alguna que pudiera lastimarlo. -Eres un tonto TaeHyung-
-Soy tu tonto-
El pelirrojo dio un pequeño salto por la sorpresa cuando el más alto bajó pícaro sus manos hacia sus perfectos glúteos.
¿Qué estaba pasando?
Muy fácil. Después de un par de citas, a las cuales Jung las catalogaba como "simples salidas entre amigos", las cosas comenzaban a tomar un rumbo algo "picante", aunque Hobi sabía perfectamente de las intenciones del menor, era alguien demasiado orgulloso como para admitir que estaba también algo interesado en él, siendo un hombre también. HoSeok aceptaba sus abrazos, caricias, besos, y también un par de toqueteos, pero a pesar de esto, jamás admitía que su relación con Kim iba más allá que dos "simples amigos", unos especiales amigos.
Ahora mismo ambos se encontraban en la casa del menor, aprovechando que los padres de éste estaban en una cita que sabía que duraría horas, o posiblemente toda la noche, viendo una película y disfrutando de unos deliciosos snacks. Y HoSeok podría haber disfrutado de la película si no fuese porque ésta era una de terror, además de que confiaba en que TaeHyung escogería una película romántica o incluso infantil, pero no.
Tomó el control, alejando previamente al menor de su cuerpo, y apagó el televisor, ya tuvo suficiente con la molesta película.
-¿Tan rápido la apagas?-
-Te dije específicamente que no quería una película de terror y tú la pusiste, pensé que al menos escogerías esas románticas que me estuviste recomendando-
Quitó la película y la guardó en su estuche, cuando de repente dos fuertes brazos lo jalaron de su pequeña cintura, lanzándolo al sillón.
-¿Querías una romántica?- Parpadeó algo desconcertado aún con el estuche de la película de terror. -¿O prefieres hacer algo más que sólo ver una película?- Tuvo que morder su labio inferior para evitar que un travieso jadeo se saliera de su boca al escuchar lo sexy que había sonado su voz así, toda ronca y sensual, especialmente para él.
-¡Ah!- Dejo que la pequeña cajita de la película cayera al suelo por la impresión cuando su sensible oreja fue mordida, sin ningún tipo de fuerza, luego pudo sentir la suave y mojada lengua del más alto.
-Eso sonó… demasiado bien-
Estaba algo sensible. Quiso correr, pero los fuertes brazos del menor se lo impedían, ejerciendo un fuerte agarre pero sin llegar a lastimarlo. De repente Kim caminó de espaldas nuevamente hacia el sillón y se sentó con el delgado cuerpo de HoSeok sobre sus piernas, apoyando su fuerte pecho contra la espalda de Hobi. Aprovechó la cercanía y la sorpresa del mayor para comenzar a repartir besos por toda la suave extensión.
Jung se sentía demasiado bien, no podía negarlo, le encantaba lo bien que TaeHyung lo guiaba hacia la locura, soltó otro gemido de sorpresa cuando una de las grandes y frías manos del menor se coló debajo de su camiseta, tocando toda la suave y delicada piel de su torso. El pelinegro sonrió, luego de dar una última lamida por toda extensión del blanco cuello de Seok, al sentir lo ligeramente marcado que estaba del abdomen del mayor.