¡¿Que rayos pasó anoche?!

Capitulo 21: Una sorpresa para Alberto

Sábado 02/03/2019

Ese día me levante temprano, como a las 6 am, y le mande un mensaje a Alberto diciéndole que lo iba a ir a ver hoy a su casa para que saliéramos, y también le dije que se vistiera de manera elegante.
Hoy tenía una sorpresa preparada para el, ya que hoy sería el día en que me le declararía oficialmente.
Sentí que ya era tiempo y ademas también aprovecharía para poder mostrarle el castigo que recibió Anya.
Mientras pasaban las horas yo me bañe, arregle y vesti con lo mas elegante que tenía, la cual era un saco negro con un pantalón del mismo color, una camisa violeta y unos zapatos negros.
Después de vestir me recibí un mensaje de la chica que nos había ayudado ayer diciendo que ya estaba todo listo para que fuéramos a ver a Anya. El saber esto me alegro el corazón ya que al fin esa horrenda bruja recibiría lo que se merecía.
Rebice mi teléfono y ya casi eran las 2pm, así que tomé mis llaves y la cajita de color dorado con un moño rojo para Alberto. La puse en mi bolsillo dentro de mi saco y camine hasta la casa de Alberto.
Durante el trayecto no podía dejar de pensar en lo perfecto que debía ser este día. Con tantos pensamientos dándole vuelta a mi cabeza no me di cuenta que ya había llegado.
Camine a la entreda y toque el timbre varias veces, ya que Alberto siempre se tardaba en abrirme. Ya cuando por fin me abrió pude ver a esra Alberto usando un hermoso vestido negro, unos hermosos botines negros con tacon y una elegante diadema negra que sostenía su hermoso cabello rubio.
Al verme de traje se puso todo rojo y me dijo en voz baja "te ves muy guapo". Al instante sonreí, lo abrace y le dije al oído "tu también te ves muy hermosa hoy", provocando que se sonrojara aun más.
Tomó sus cosas y nos fuimos caminando de allí con dirección a la primera de sus sorpresas.
Caminamos por 20 minutos cuando por fin llegamos a la primera parada, esta era la casa de Meli. Sujete la mano de Alberto y ambos entramos a la casa.
Al entrar Alberto se sorprendió mucho ya que allí estaban la mejor amiga de Meli (Olivia), la chica pelirroja que nos ayudó y su cuerpo conversando. Intenté hacer que se calmara, además de que lo sostuve para que no saliera corriendo.
Lo senté en uno de los sillones y la chica se sentó a su lado para explicarle lo que había sucedido.

–mira Alberto, recuerdas que ayer David me susurro unas cosas, pues todo esto fue su idea...–

Sin dejala terminar Alberto se levanto y comenzó a sacudir me del cuello diciendo: "! ¿por qué decidiste liberar a esa loca? !". La chica detuvo a Alberto diciéndole que aún no acababa de explicarlo. Se volvió a sentar en donde estaba y continuó escuchando mientras me veía de una manera extraña que me ponía algo incomodo.

–David al preocuparse mucho por ti me suplico que retirara a Anya de tu cuerpo y lo pusiera en otro, al principio lo veía como una locura pero al ver tanta preocupación acepte. Me pasó su número para que le mandara mensaje y continuar con esto.–

–Ya luego de discutirlo mucho ayer el decidió que el lugar indicado para tu cuerpo era alguien que en verdad lo necesitará y que mejor opción que Meli. –señaló a su cuerpo.

Alberto algo confundido suspiro un poco y le pidió a su cuerpo, osea Meli, que hablara con el en privado.
Se fueron a la cocina a hablar un rato, y cuando regresaron Alberto parecía ya estar más calmado y le pidió a Meli que dijera todo lo que habían charlado.

–miren Alberto accedió a esto pero con las condiciones de que yo cuidara su cuerpo y que fuéramos amigos por siempre para que estuviera en contacto con su cuerpo–

Todos parecían estar de acuerdo por lo que la chica fue al cuarto de atrás para que nos enseñará como quedó Anya. Regresó con el cuerpo de Meli esposado con unas cadenas rosas un tanto extrañas y con un tipo bozal rosa que impedia que hablara.
Alberto la miro atentamente por un rato, esta parecía estar muy furiosa con nosotros ya que según la chica sus cadenas se ponen de color rosado cuando la persona que las usa tiene intenciones de atacar a matar pero que las cadenas le impiden hacerlo. Esto parecía ser algo tétrico pero al mismo tiempo nos daba felicidad a todos.
Al ya enseñarle todo lo que quería a Alberto ambos nos retiramos pero antes de salir de la casa Meli, nos detuvo y nos dijo muy alegremente: "los vemos allá en un rato".
Esto hizo que Alberto se exaltara y me hiciera un montón de preguntas mientras caminábamos a nuestro siguiente destino.
Cuando llegamos a nuestro segundo destino Alberto se detuvo y me dijo: "no quiero que vayas a hacer algo realmente humillante". Lástima que para Alberto todas las locuras que hacía para el eran consideradas como humillantes.
Nuestra segunda parada era un parque, allí tenía planeado hacer tiempo para que llegáramos a la hora de la reservación.
Caminamos por el parque unos 20 minutos y mientras lo hacíamos sujetaba la mano de Alberto, la gente nos miraba como una pareja normal y enamorada, y eso me encantaba.
Luego de dar el pequeño paseo caminamos a la parada del camión para que nos llevara al restaurante "La Fountain", el cual era uno de los restaurantes más elegantes de la ciudad.
Una vez que llegamos al restaurante afuera estaban Meli y Olivia esperándonos, Alberto se puso algo incomodo al ver que su cuerpo sujetaba a una de las chicas más hermosas de la escuela. Todos juntos entramos al lugar y todo sucedió como debía, el mesero de la entrada nos guió a nuestra mesa y antes de irse le di el regalo para que lo trajera al momento de pedir el postre, nos trajeron nuestra comida, que por cierto estuvo muy cara, y converse e hice reír a Alberto como en todas nuestras citas.
Llegó el momento del postre y le pedí al mesero que me lo trajera, Meli y su novia se rieron ya que les había contado todo el plan. El mesero llegó con una charola de plata y la coloco enfrente de Alberto.
Al momento de abrirla Alberto se sacó de onda un poco e inmediatamente me volteo a ver. Me levante de mi asiento, tome el regalo y me arrodillé enfrente de él diciendo: