Violet su amnesia y el prisionero de algo llamado Azkaban.

1. El regreso

(VIOLET)

Desperté de golpe y rápidamente me incorpore lo que no fue una gran idea, un fuerte dolor me recorrió todo el cuerpo y termino por un aun más fuerte dolor en mi cabeza.

-No te levantes niña- dijo una extraña mujer mientras se acercaba a mi.

Mire a mi alrededor habian varias camas dispuestas a lo largo de la habitación pero todas estaban vacías a excepción de la mia y una en la que se encontraba un chico, parecía dormir con tranquilidad.

-¿D-donde estoy?- sentía como si mi boca estuviera dormida y hablar me hacia sentir mas cansada.

-En la enfermería de Hogwarts- aquella voz hizo que la mujer se apartara un momento de mi y pude ver de quien procedia, venia de un anciano que tenia una enorme barba plateada y que en mi opinión parecia estar mas muerto que vivo.

-¿Hogwarts...?- no me sonaba de nada y ahora que lo analizaba mejor nada me parecia familiar.

-Es una escuela de magia y hechiceria y yo soy su director, Albus Percival Wulfric Brian Dumbledore.

Estaba completamente segura de que jamas me aprendería eso aunque por otro lado magia y hechiceria si me parecía familiar.

-¿Recuerdas quien eres?- la voz del anciano me saco de mis pensamientos y por fin me di cuenta que es lo que se sentia mal, extraño y confuso... no podia recordar mi nombre o cualquier otra cosa, no podia recordar nada.

                              • • • • •

Los últimos meses de clases en Hogwarts me la había pasado en la enfermería en mayor parte descansando mientras la señora Pomfrey con ayuda de algunos maestros trataban de sacar por completo el veneno que al parecer recorría mi cuerpo. Despues de unos dias más me dejaron pasear por el lugar mientras las clases transcurrían siempre con la condición de no alejarme demasiado.

Uno de esos dias el profesor Dumbledore me llamo a su oficina, era un lugar muy curioso y lleno de cosas interesantes que quería tocar pero no me atrevía a hacerlo.

-Siéntate un momento, tenemos que hablar de tu futuro- Dumbledore me observó mientras tomaba asiento, me parecía un viejito muy agradable y en estos ultimos dias me habia encariñado un poco con el.

-Primero que nada deberías tener un nombre incluso si no es el tuyo ¿Te gustaría elegir?

Me quede un segundo pensando pero el nombre no tardo mucho en llegar a mi cabeza, lo habia leído en algun libro de la biblioteca.
-Violet- dije con seguridad lo que hizo que Dumbledore sonriera.

-Bien Violet, si siguiera el protocolo tal como esta estipulado por el Ministerio de magia tendría que reportarte y ellos se encargarían de ti lo que no me parece una buena idea.

No tenia mucha idea de lo que hablaba pero estaba segura que no era lo mejor para mi, me daba la sensación de que si hiciera eso me terminaría perdiendo.
-¿Entonces que podemos hacer?

-Te daré un apellido muggle y te inscribire en el siguiente curso de Hogwarts, estoy completamente seguro que no te sera difícil ponerte al corriente con las clases.

Me sorprendió la confianza que tenia en mi y todo el apoyo que me daba.
-Me parece bien pero... ¿En que año y en que casa se supone que estaré?- había aprendido bastante de Hogwarts estosdías.

Dumbledore se me quedo viendo un momento y después se puso en pié, tomo un sobrero viejo y me lo colocó sobre la cabeza.

El sombrero comenzó a hablar lo que me hizo sobresaltar.
-Curioso... Muy curioso... - comenzó a decir con voz reflexiva
-Una Slytherin, estoy seguro... pero... pareces más valiente y decidida auque tu astucia sigue siendo innegable... realmente es curioso...- unos segundos que a mi parecer fueron eternos pasaron antes de que el sombrero por fin gritara con emoción -¡Gryffindor!-