Violet su amnesia y el prisionero de algo llamado Azkaban.

10. Gryffindor contra Ravenclaw

(VIOLET)

Cuando por fin parecía que todo se solucionaría ahora Ron y Hermione estaban tan enfadados que Harry y yo no veíamos ninguna posibilidad de reconciliarlos. A Ron le enfurecía que Hermione no se hubiera tomado en ningún momento en serio los esfuerzos de Crookshanks por comerse a Scabbers, que no se hubiera preocupado por vigilarlo, y que todavía insistiera en la inocencia de Crookshanks y en que Ron tenía que buscar a Scabbers debajo de las camas.

Hermione, en tanto, sostenía que Ron no tenía ninguna prueba de que Crookshanks se hubiera comido a Scabbers, que los pelos canela podían encontrarse allí desde Navidad y que Ron había cogido rabia a su gato desde el momento en que éste se le había echado a la cabeza en la tienda de animales mágicos.

Harry estaba convencido de que Crookshanks se había comido a Scabbers, y cuando intentó que Hermione comprendiera que todos los indicios parecían demostrarlo, la muchacha se enfadó con Harry también.

-¡Ya sabía que te pondrías de parte de Ron!- chilló Hermione -Primero la Saeta de Fuego, ahora Scabbers, todo es culpa mía, ¿verdad? Lo único que te pido, Harry, es que me dejes en paz. Tengo mucho que hacer.

Yo prefería no decir nada.

Más tarde pasabamos un rato hablando con los gemelos, Calem y Ginny.

-Vamos, Ron. Siempre te quejabas de lo aburrida que era Scabbers- dijo Fred, con intención de animarlo -Y además llevaba mucho tiempo descolorida. Se estaba consumiendo. Sin duda ha sido mejor para ella morir rápidamente. Un bocado... y no se dio ni cuenta.

-¡Fred!- exclamó Ginny indignada.

-Lo único que hacía era comer y dormir; Ron. Tú también lo decías- intervino George.

-¡En una ocasión mordió a Goyle!- dijo Ron con tristeza -¿Te acuerdas, Harry?

-Sí, es verdad- respondió Harry.

-Eso es un gran punto a favor rojos- dijo Calem mientras sacaba detras de mi oreja un par de caramelos que luego me regalo.

-Fue su momento grandioso- comentó Fred, incapaz de contener una sonrisa -La cicatriz que tiene Goyle en el dedo quedará como un último tributo a su memoria. Venga, Ron. Vete a Hogsmeade y cómprate otra rata. ¿Para qué lamentarse tanto?

Cuando Harry, Ron de invitado y los gemelos se fueron al entrenamiento de quidditch yo me quede con Calem.

-¿Has descansado bién? - me preguntó mientras inspeccionaba mi rostro más de lo necesario.

-Tanto como puedo- respondí y me aleje un poco -seguramente me veo muy mal, ¿cierto?

Calem nego con la cabeza -para nada, tienes un lindo rostro es sólo que veo cansancio... en tus ojos.

No pude evitar reír.

-No te rías boba, solo es la verdad se ven agotados.

-Creo que es lindo que te preocupes, con tantos problemas con esos tres no he tenido tiempo de cuidarme- frote mis mejillas para calentarlas un poco.

-Esos problemas casi siempre fortalecen la amistad así que no te desesperes.

Caminamos unos minutos por los alrededores del castillo hasta que vimos una extraña escena. Crookshanks caminaba entre algunos arbustos con una rata negra sobre su lomo.

-¿Esa es...?- dijo Calem más para si mismo.

-¿Crookshanks?- llame al gato que volteó a verme, se acercó un poco y así pude comprobar que sobre su lomo llevaba una rata de pelo negro brillante con extraños ojos rojos.