Tras varios encuentros más de Simón y Juan Pablo con las pelirrojas, estaban teniendo un día normal vigilando la frontera. Era uno como todos los días hasta que vieron a Viviana correr bordeando el límite, estaba vestida con una capa color verde caqui, su pañuelo rojo y también un puñal en la mano.
Juan Pablo la llamó varias veces; esta continuó corriendo. Isaza y Simón fueron tras ella.
-¡Viviana! Detente, ¿dónde vas? - gritaba Isaza.
La siguieron hasta que llegó a las celdas. Ella entró seguida por ambos chicos, hasta que se encontró en el pasillo donde estaban los guardias y sin pensarlo mucho Viviana apuñaló a John.
-¿Cómo haces esto? - le gritó Simón furioso intentando pararla.
-Ni me toquéis o lo mato - dijo ella apoyando el puñal en el cuello de Markos.
-¿Qué quieres a cambio de irte? - preguntó Simón.
-Liberen a Juan Pablo Villamil - dijo en con un tono frío.
Isaza, que estuvo parado de la sorpresa, una vez se reincorporó, salió corriendo en busca de Francisco Javier. Después de que Juan Pablo Isaza salió del lugar apareció Sebastián Yatra, este armado con un rifle; empujaron a Simón y acercaron a Markos al precipicio cercano.
Markos estaba apunto de morir a manos de la pelirroja, pero llegó el ejército de los triángulos negros y Yatra empujó al chico.
Entre el ejército se encontraba Juan Pablo Isaza agarrando a Juan Pablo Villamil para que no escapara.
-¡Viviana, Sebas! - gritaba Villamil desesperado por reencontrarse con sus amigos.
-¡Juan Pablo! - contestó Viviana mientras se dirigía hacia él.
El ejército estaba a poco de capturarla, pero Isaza gritó:
-¡Deteneos!
Y dejó huir a Viviana y Sebastián. Los soldados lo miraron, pero como él tenía el cargo más importante de allí, les ordenó:
-Ustedes no hablaran de esto, solo se escaparon.
Acababa de vender su alma por la chica que había querido.
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-Viviana, ¿por qué mataste a Markos? - le preguntó Isaza muy decepcionado con ella.
-Su muerte fue "natural" - respondió ella.
-No, no lo fue - afirmó Simón muy enojado.
-La gravedad es una causa natural.
Tras este comentario, Simón estuvo a punto de golpearla, pero Nathalia le detuvo.
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