I Like It, Girl. «MYG; BTS»

38

Todo el día con alguien no quiere decir que sean algo, solo pueden ser mejores amigos y eso sería todo... O al menos es dice Nat cada vez que se pierde en su mente.

—¿Nos vemos mañana?

Habló la bajita antes de levantarse de la cama ajena con una sonrisa.

—Si, ¿Mañana habrá clases?— el pálido también se levantó antes de que ambos se mirarán a los ojos. —Solo digo..

—Mañana no empiezan las clases, recuérdalo. —susurró la joven antes de que sus mejillas se volvieran rojas. —Buenas noches, Yoon-ah.

—Digo lo mismo, Nat. —se dedicaron una linda sonrisa antes de que la joven se fuera de aquel dormitorio ajeno. —Dulces sueños.

—Dulces sueños, ¡Yoon!— la chica entró a su dormitorio antes de acostarse en su cama para mirar su oscura habitación.

—He estado pensando mucho, pero creo que no sirve de gran cosa.. —murmuró Nat antes de suspirar profundamente. —Tal vez, sea mejor actuar que pensar.. ¿Pero cuando?— los pensamientos de aquella chica se revolvían mientras más tiempo pasaba pensándolo. Y eso le hacía confundirse demasiado.

Hay días dónde te cuesta dormir porque traes problemas o muchos pensamientos y eso fue lo que exactamente le pasó a Nat cuando abrió la puerta de su departamento dando la bienvenida a otra mañana helada.

—¿Porqué tiene que hacer tanto frío aún? —chilló la joven mientras su pelo aún enredado chocaba contra su rostro, ni siquiera se había cambiado su pijama. —Oh vamos, tengo que comer algo o me moriré..

La joven se apresuró y compro lo de siempre, un café recargado y unos pequeños alimentos para llegar bien.

Volvió a su habitación pero noto que la puerta de su vecino se encontraba abierta. Iría a visitarlo, ¿Porque no?

Abrió un poco y asomó su cabeza antes de tomar aire para enseñarle su mejor sonrisa pero no logro su cometido.

—Hola YunSoo.. se que ya no hemos hablado, y está bien. No seríamos pareja para la eternidad, nadie dura para siempre enamorada.

Sus ánimos cayeron justo como si de una montaña rusa se tratara.

“¿YunSoo?” pensó antes de asomarse un poco más. Debió haber escuchado mal, muy mal.

—¿Qué haces espiando a las personas? Es de mal gusto. —un aliento se estrelló en su cuello, logrando estremecerla.

Se separó de la puerta y la volvió a dejar como estaba antes de dar la cara a aquella voz.

—¿Qué te importa, YunSoo?

—YoonGi, me acaba de invitar a su habitación.. ¿No es obvio? Vengo porque de seguro quiere que volvamos a ser algo.

Y a Nat casi se le resbalaban sus cosas si no fuera por un ruido proveniente del dormitorio ajeno.

—¿Qué pasa aquí?

Salió aquel pálido con un rostro algo serio, como cada día de su vida, seria.

—¿Nat, YunSoo? ¿Ahora que pasa aquí? —aquella bajita miró sus pies.

—Ella empezó, además mírala. ¡Parece una vagabunda! — todos tienen un límite, también Nat.

Camino sin decir nada a su dormitorio y dejo en su cama sus alimentos.

—Es una cobarde, ¿No crees eso? —ahora hablaba con aquel pálido que rodó los ojos.

—La cobarde eres tú, ahora mírate. No traes la ropa más costosa del mundo, solo eres una cualquiera. —defendiendo con capa y espada las cosa horribles que le dijeran a la bajita.

—¡Que cruel! Yoon..

Las palabras quedaron en el aire cuando recibió un doloroso puñetazo en toda la nariz de parte de la bajita.

—Calla tu maldita boca, tu eres solo una rata de coladera. — gritó con todas sus fuerzas antes de darle ahora una bofetada en toda la mejilla. —No vuelvas a hablar de mi, prometo a la próxima dejarte peor. —salió de ahí hasta su dormitorio donde apenas llegó a su cama empezó a llorar, odiaba a YunSoo, ¿Porque tenía que ser tan cruel?

Unas lágrimas falsas abundaban en la otra habitación donde un pálido le ponía una venda a la nariz sangrando de aquella chica alta y guapa.

—¿Para que querías que viniera, cariño?

El pálido solo le extendió una carta antes de alzar una ceja.

—Eso es todo, solo léela. —la alta la tomo y negó con una sonrisa.

—Ya se lo que dirá, ¡Si quiero volver contigo! —el pálido esquivo el gran abrazo que iba dirigido hacía el. —¿Qué pasa cariño?

—¿Enserio sabes leer? Debiste haber leído lo principal. —señalo sutilmente con su dedo la parte frontal de la carta.

—“No es una carta de amor.” —murmuró la joven con una mirada apenada. —Ya lo sabía, solo estaba fingiendo. Voy a leerla afuera, ¡Con permiso! — se fue y aquel pálido tenía que cerrar los ojos rogando que todo saliera bien.

—¿Podemos vernos?

—No estoy de humor, vete con YunSoo. ¿De acuerdo?

Y el pálido soltó una carcajada antes de contestar el mensaje.

—No estoy con ella, le acabo de declarar la guerra. ¿Entonces, podemos vernos?

—¿Te han dicho que eres un tonto?

El pálido había ganado una pelea absurda de nuevo, jamás podría perder si se trataba de Nat, aquella bajita que le sacaba unas grande sonrisas.

—Me debes un café, el mío se ha enfriado...

—Te compraré dos.

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Ashley Zoe🍭

Son hermosos, solo eso chauj