1996

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Era una noche fría pero excelente para atreverme a hacer cosas.
Camine con tacones altos y un hermoso vestido negro ceñido al cuerpo de lentejuelas que brillaban con la luz.
La noche se sentía sombría pero eso no fue impedimento para sentirme segura de mi misma. Camine con la espalda erguida, dejando que mi cabello se ondeara con el viento.

Luces y oscuridad, era todo lo que podía ver.Me sentía viva, sentía la adrenalina correr por mi cuerpo, nada me impediría sentirme una fantástica en esos momentos. Así que me moví velozmente entre la gente y comencé a mover mi cuerpo, y a chocar entre la gente.Mis caderas se movían al ritmo de la música y mi cabello se ondeaba, me sentía sexy.Para estar rota me sentía increíble.

Sentí como unas manos desconocidas apretaban mis caderas. Me frote contra su entrepierna, una sensación demasiado placentera.
No tengo ni idea de cuánto tiempo pasó, pero me encontraba en el baño de chicas.Sintiendo como mi cuerpo era asaltando por el desconocido.

Mi cuerpo se calentaba, mi vagina se mojaba y yo lo único que deseaba era que nunca parara.

-sigue así-gemí, cuando sentí la boca del desconoció en mi cuello, más le valió al imbecil no dejar marcas.
Intento besarme y lo aleje.
-sin besos, no se, si tengas un ETS por ahí-Me observo cómo es de esperarse no se esperaba mi comentario y aparte estaba más ebrio que nada, probablemente despierte creyendo que se follo a su prima.

Continuó con su asalto.

-Mmmm mi nombre es...- me separé de él para mirarlo a los ojos y decir.

- No me interesa tu nombre ni tu vida, soy una chica buscado placer en un baño con un desconocido así que continúa en lo que estabas o lárgate- Me observó durante un corto periodo de tiempo, continúo  con su trabajo, bajo hasta mi entrepierna para luego subir mi vestido y bajar mis bragas.

-siiii continúa- gemí excitada en su oído.
Me levanto del suelo para sentarme sobre el lavamanos, beso mi vagina, la chupo en círculos haciéndome gemir como desquiciada

-Ahhhhhh- grite y gemí con todas mis fuerzas, tome su cabeza con fuerza con una mano y la acerque más a mi vagina, no me interesaba si estaba incómodo o no, solo quería sentir mi placer.
Con la otra mano me sujete al lavabo para tener mejor estabilidad.

-sisisisi- el chico gruñó, eso solo hizo que me excitara más.

Inicie un movimiento de caderas para mejorar la sensación de su cara contra mi vagina, con cada movimiento sentía que llegaba cada vez más rápido al climax.

Sus lamidas eran circulares y sus succiones solo aumentaron mi placer un poco más, me sentía extasiada. Llevaba tiempo sin sentir este placer.
Creo que es hora de dejar de pensar y dejarme llevar.

Una lamida,dos lamidas,tres lamidas, perdí la cuenta en cuanto llegue al climax.

Me corri en su boca,vi como el desconocido se limpiaba  la boca y me baje del lavabo. Subí mis bragas y baje mi vestido.

El chico comenzó a bajar sus pantalones, lo miré mal, que cree que hace.

- Que crees qué haces?- lo mire esperando una respuesta.
- es tu turno- con sólo decir eso solté una carcajada y lo miré de arriba abajo para señalarlo con un dedo antes de acercarme a la puerta.

- Si no lo creo, suerte para la próxima- y con eso salí del bar para dirigirme a mi casa.
Y así fue como terminó mi noche.

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