Extrañas sensaciones

1917

Lista para salir del trabajo.
Un fin de semana con día soleado y caluroso.

Salgo de mi departamento para encaminarme al elevador.

-Que tal?- volteó a mi lado como el exorcista.

Damas y caballeros les presento a mi vecino:Alto, piel blanca, ojos verdes y cabello lacio castaño. Por si apariencia supongo que debe tener un abdomen que te moja pero no lo pienso descubrir o si?

-Hola- digo sin interés y para volver la vista al frente para esperar al elevador.

-Asi que tú eres mi excitante vecina, eh-vuelvo a girar mi cabeza pero esta vez con cara de fastidio. Quien mierdas se cree.

- Asi que tú eres el molesto vecino que no se ocupa de sus propios asuntos- digo con sorna, haber si así se calla el puto hocico.

- Ese soy yo, mi nombre es Stephen por cierto- mira nomas el metiche tiene nombre y es atractivo.
- No ,pues te felicito,¿que premio quieres? un diploma o un trofeo-Que ya sé calle, porque tarda tanto el elevador.

-¿siempre eres así de mal educada- ¿a ti que mierdas te importa? Pienso, mejor no lo digo.

-Mira la hora que tarde se me está haciendo, el sol se oculta,¿sabes creo que usaré las escaleras-digo comenzado a caminar a las escaleras y atando mi cabello en una coleta.

- pero apenas son las 9- escuchó que dice volteándome a ver.

-Nadie te pregunto- digo con una sonrisa sin llegarme a los ojos y con la boca cerrada,antes de abrir la puerta que da a las escaleras.

- por cierto, aún está en pie la propuesta de ayudarte en ya sabes que...- claro que sé de qué hablas idiota.

Antes de comenzar a correr por las escaleras, levando mi dedo de en medio y bajo las escaleras a trote.

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-Corre perra, corre!!!!- Me digo a mi misma.Los pondré al día, cuando creía que este día no podía empeorar, me salió de un callejón un perro callejero y comenzó a corretearme.

Y aquí estoy huyendo de un maldito perro.
Les daré una pequeña y corta descripción sobre el perro.
Ojos oscuros o eso parece, parece que tiene la noche en su mirada, da escalofríos, bueno cómo iba diciendo.
Orejas en pico, se ve musculoso, pelaje café, si mis conocimientos no me fallan es un puto Pitt Bull, la pregunta es y oh vaya que se debe hacer,quien mierdas deja a un perro de esa raza en la calle. Maldita gente. En serio estoy más preocupada por el animal que por salvar mi propio pellejo.
Bueno continuemos.

- Corre Perra!!!- grito medio cansada, antes de doblar a una esquina.
- Ya casi llegamos, no te rindas o seremos comida del perro.

Tengo miedo, demasiado, sé podría decir que llegue al punto en donde estás súper cansado y quieres hacer pis de los nervios.
Solo le ruego al cielo no hacerme encima.

Vamos, vamos!!!!
Estamos a una tienda de llegar.
-Corre!!!
Con eso doy por terminada mi persecución, entrando como loca por la puerta principal de mi trabajo y cerrando en azote haciendo un sonido en seco y atrayendo la atención de todo.
- En tu cara, perro estupido- grito antes de comenzar a bailar como gusano con sal.

El perro solo me observa en silencio, más le vale no esperar me hasta que salga.
En eso siento como soy jalada por el brazo, llevada a la cocina.
Ohh Fuck

- Que fue todo ese escándalo!!- Me gritan la gerente.¿esta perra quien se cree?
Les presento a la gerente, alta de piernas largas, rubia, piel medio rosada, y una mirada que te dice que lleva toda su vida oliendo mierda, que creían? Que iba a ser toda una belleza? Pues no mi cielos, es un esperpento esta mujer.
-Es que...- Me corta, pues déjame hablar.
- llegas tarde y todavía te poner a gritar y a azotar puertas!!!!

Ok les ahorraré el regaño, porque no quiero que sepan aún mi nombre y porque en parte me lo merezco.