Omegaverso.
Llegas a este mundo con la esperanza de poder encontrar a la persona que compartirá el resto de su vida a tu lado, aquella que va a amarte con todo su corazón y cuya sonrisa será tu total alegría, pero...
¿Y si no la encuentras?
Eso se p...
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Quisiera saber quién es el que encendió el botón de regreso en el tiempo y hoy me obliga a vivir una vez mas la etapa más oscura de mi vida.
Creí haber superado la amargura de ver a mi mejor amigo dejarme atrás pero solo me engañaba a mí mismo, porque lo que siento equivale a años de resentimiento forzados a permanecer encerrados en un compartimiento muy pequeño...y están a punto de estallar ¿Qué fue lo que terminó por desencadenar este malestar? La nueva intervención de Rin en nuestras vidas y todos los esfuerzos que hace por adueñarse de la atención de mi mejor amigo...pero no es igual a como fue cuando éramos niños, esta vez lo siento diferente, más intenso al menos, como si acabara de entrar en una súbita carrera en su contra, con el corazón de Haru como nuestra recompensa principal, y admitámoslo, el pelirrojo tiene mucha más experiencia a la hora de competir que yo...no porque vaya a rendirme solo por eso.
Estoy en casa ahora, la noche ha caído desde hace varias horas y toda mi familia debe estar durmiendo con total tranquilidad, pero yo no; continúo sentado frente a mi escritorio, tratado de terminar todas mis tareas atrasadas. Sé que no es el mejor momento para distraerme, pero tampoco es que pueda evitarlo cuando Haru entra y sale de mi cabeza a voluntad.
Unos suaves golpes en la puerta llaman mi atención y al instante veo la alta figura de mi padre asomarse por la misma:
-Es tarde- me advierte, pero contrario a lo que podrían suponer, no se ve molesto conmigo
-Lo siento. Terminaré esto en unos minutos más, papá- pese a mis palabras, igual lo veo entrar y sentarse en mi cama con los brazos cruzados y la mirada un poco perdida en un punto lejano
-Tu madre está preocupada, Makoto- dice finalmente revelando la verdadera razón por la que ha venido a mi habitación a estas horas de la noche, supongo que para él es un momento en que nadie va a interrumpirnos, pero para mí es más como una situación sin salida -Últimamente pareces tener la cabeza en las nubes, a diario dices que no tienes hambre y tampoco duermes bien, no es sano en un muchacho en crecimiento
-Estoy...bien, en serio
-Puedes hablar conmigo de cualquier cosa, lo sabes, hijo
-Lo sé- es mi más sincera respuesta porque este es el hombre en quien siempre quise convertirme al crecer: seguro y confiable, pero develar mi debilidad ante él, me haría sentir como que le estoy fallando...eso no me gustaría de ninguna manera; no quiero preocuparlo más de lo que ya está y aun así, mi padre está aquí tratando de darme confianza... -Y en realidad...- prosigo tomando una decisión algo arriesgada -Si hay algo. Papá... ¿Cómo haces que tu pareja destinada te quiera?
-Vaya temas más profundos que se te ocurren, Makoto- me dice y como lo veo sonriendo, yo también me relajo confiando en que tenga esta respuesta que parece tan difícil gracias a mi inexperiencia pero que igual necesito -Bien, escucha. Creo que, si alfa y omega nacieron destinados a estar juntos, no tendrían que hacer nada para llamar su mutua atención o su afecto; si este omega es tu pareja destinada, ten por seguro que te ama con la misma intensidad con que tú lo haces
