La cicatriz ( Drarry/Harco)

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Aviso: este capítulo tiene escenas hot.
Disfruten.
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Las vacaciones al fin habían llegado. Draco se encontraba yéndose a la parada de autobús para luego irse a su casa. Estaba saliendo de la biblioteca luego de despedirse de Harry. Caminaba tranquilo hasta que alguien lo agarró fuertemente del cuello y lo empujó contra los casilleros.

Los pasillos se encontraban vacíos ya. El rubio se encontraba tratando de asimilar lo ocurrido. Miró a su atacante y no se sorprendió a ver a Ron parado ahí. Estaba con los puños cerrados y apretaba la boca haciendo que esta pareciera una pequeña línea. Draco se reincorporó y miró con cierta molestia al pelirrojo.

- ¿Qué quieres, Weasley?- gruñó el rubio.

- Aléjate de Harry.

- ¿Por qué? No es tuyo ni nada por el estilo- se acercó Draco más al chico- Además, fue el quien se acercó.

- Aléjate de mi mejor amigo.

- No es tuyo, Ron- exclamó Draco.

El pelirrojo se abalanzó nuevamente a su oponente. Cayeron fuertemente en el piso y Ron logró subirse arriba de su enemigo. Le pegó una piña en la mejilla, que rápidamente fue devuelta por Draco. El rubio trataba sacárselo de encima, pero se le hacía difícil. Ron trataba de pegarle. La situación continuó hasta que unos pasos aparecieron.

El pelirrojo se salió rápidamente de arriba de Draco y recogió sus cosas. El otro hizo lo mismo. El conserje pasó con sus cosas y ni se percató de la situación de los dos adolescentes. Ron bufó y se dirigió a su acompañante.

- Aléjate, Malfoy- dijo duramente- Aléjate o si no te arrepentirás- luego de decir aquello, se encaminó hacia la salida.

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La noche estaba un poco fresca, pero era soportable. La música de las fiestas se escuchaban por todos lados. Harry estaba acostado en su cama con sus auriculares puestos y la mirada fija en el techo. Mensajes llegaban sin parar y sabía de quien se trataba: Ron. Había estado insistiendo que le contara que hacían en la biblioteca Draco y él. No sabía de donde había sacado tanto interés el pelirrojo sobre aquellos simples encuentros.

Vale destacar que gracias a esos encuentros, Malfoy y Harry estaban más unidos. Charlaban, se reían, compartían opiniones, se ayudaban en las tareas... Mientras se encontraba con el rubio en la biblioteca, su cicatriz molestaba levemente. Cuando pensaba en él, llegaba hasta doler.

Agarró su teléfono y se dirigió al chat que tenía con el rubio. Se mantuvo mirando la pantalla por varios minutos. No quería sonar molesto, pues ese día a la mañana se habían visto. ¿Y si Draco estaba ocupado? Sus dedos comenzaron a golpear el colchón de su cama de manera nerviosa. Suspiró y escribió.

- H: Hola Malfoy, ¿estás?

Leyó el mensaje ciento de veces, hasta que decidió apretar " enviar ". Dejó el teléfono a cierta distancia de el y se quedó observando el techo. Luego de unos minutos, le vibró el celular.

- D: Me sorprende Potter que me escribas a esta hora, ¿no deberías estar durmiendo?

- H: Ja ja, que gracioso eres. Solamente es que me aburro y bueno.

- D: ¿Soy tu única opción?

- H: Nunca dije eso.

- D: Hm... ¿que harás esta noche?

- H: Mirar el techo mientras escucho música, ¿por qué?

- D: ¿Quieres que nos encontremos?