Maktub ♡

10

—Yoongi, Yoongi... —Yerin trató de despertarlo de aquel trance— ¡Mírame! —y aquel grito si que fue exitoso.

—Lo siento. ¿Qué decías? —volteo a verla, ella frunció el ceño.

—Dime, ¿en qué piensas? —este suspiro, era demasiado evidente delante de los ojos de su pequeña confidente.

—¿Por qué lo dices?

—Soy tu mejor amiga, te conozco. Dime, ¿llamaste a Jimin? Aun no puedo creer que el señor Park lo expulsara sin que le temblará la mano si quiera. ¿Qué clase de padre haría aquello?

Sin dudas alguna, sería ese tipo de padre, y todavía más... —pensó el mayor.

—Yewon llegó ebria a casa a noche. —comentó, arrepentido en el mismo instante.

—¿¡Qué!?, ¿cómo?, ¿por qué? ¡Yoongi! ¿Qué demonios le hiciste? —reclamo molesta.

—Estas de broma, ¿verdad? —cuestionó alejando la mano de su oído ante los sucesivos gritos de la contraria— Estuve todo el domingo en la empresa.

—¡Exacto! —recrimino— "mande un mensaje", "ella entiende". —imito su inexpresivo rostro y tono de voz— Ash, sabía que la harías enfadar, idiota...

Yerin se encontraba enumerando todas las faltas de Yoongi como novio, hasta que la puerta se hizo oír.

—Kim. —mencionó Yoon al ver al chico, el cual reverencio al instante.

—Me dijo Yun... —sacudió su cabeza en modo de reprensión— La secretaria Choi, informó que me mando a buscar. —Yerin sonrió al verlo actuar de un modo tan tierno, acto que notó su amigo de años, y termino por suspirar.

—Sí, quiero disculparme adecuadamente contigo.

—¿Eh? —levanto su mirada incrédulo— ¿Disculpe?

—Lo que escuchaste. No debí reprender con dureza tú esfuerzo, después de todo, si hubieses arruinado los planos, completamente sería mi culpa por exigirte tanto. —se puso de pie para tomar su abrigo y abrochar los botones— En serio lo lamento, y realmente espero poder contar contigo de ahora en adelante.

—¡Por supuesto! —reverencio para que su mayor le pasará de largo, abriendo aquella puerta y saliendo de la oficina.

—En hora buena. —sonrió la contraria, el muchacho todavía no comprendía lo que acaba de ocurrir.

—¿En serio se disculpó? —susurro para sí mismo, ocasionando la risa de su mayor, este levantó la mirada apenado— Yo... no quiero decir que sea un idiota, pero... digo... no lo es... ash...

—Descuida. Min es un completo idiota, con todas las letras. —sonrió— Pero sabe reconocer cuando se equivoca, es un hombre al que no le cuesta nada pedir disculpas, esa es su mayor virtud. —camino hasta él para extender su mano.

—¿Eh? —musito el pobre sin comprender.

—¿Quiero tú teléfono?

—Claro... —lo busco en su bolsillo para entregarlo, directamente en su mano— pero... —la azabache sólo deslizó su dedo sobre la pantalla.

—¿Oh? No tienes patrón —comento asombrada para verle, este no dijo nada al verla cual niño pequeño, hasta que logró reaccionar.

—¿Por qué? —indago de pronto, la mayor sonrió ignorando su interrogante, concentrada en teclear sobre el aparato.

—Aquí tienes. —se lo entrego— Espero ver pronto aquellas fotos. —sonrió para pasar de largo hasta llegar a la puerta de salida— Kim Taehyung, ¿o debería decirte TaeKyung? —y sin más, salió de la oficina, dejando a un pobre Taehyung ruborizado para luego observar su teléfono.