Capítulo 32: ¿Quién eres? ¿Qué eres? Su nombre es.

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Sonic y Shiro iban en caída libre a una muerte segura, a unos aproximados quinientos metros se estrellaran contra el suelo de no pensar en algo pronto, fueron unos tontos por creer que podían confiarse y subestimar al enemigo, pero también fueron unos tontos por creer que podrían trabajar juntos.

"¡Todo es culpa tuya!" Sonic señalaba acusatorio a Shiro "No debí escucharte en primer lugar"

"¿¡Mi culpa!?" ahora era Shiro el enojado, mientras se señalaba a sí mismo de forma incrédula "¡Fue tu estupidez la que nos puso aquí, gran idiota"

Trecientos metros.

"Venga ya, si hubieras hecho lo que dije, no estaríamos en este aprieto" Shiro no podía creer lo estúpido que era Sonic o lo incompetente como para no seguir ni hasta la más simples de las instrucciones.

"No recuerdo aceptar que fueses el jefe" Sonic no era para nada admirador a la idea de dejarle ser el que dé las órdenes.

Docientos cincuenta metros.

Ellos podían ver a Flayre muy ocupada tratando de extinguir la manifestación de Dark Gaia con sus poderes shinto y fuego para purificarlo, así que no podrían contar con su ayuda.

En retrospectiva, esto pudo salir peor...

Hace unos minutos atrás.

Dark Sonic y Shiro chocaba fuerzas en un combate cuerpo a cuerpo reñido, patada tras patada, golpe contra bloqueo. Cabezazo contra puño, todo se permitía y aceptaba, los momentos en los que Dark colocaba distancia entre ellos era cuando Sonic se avecinaba desde su punto ciego con Caliburn listo para picarlo por la mitad, levantando una barrera en su cuerpo para brindarle una defensa contra la hoja sagrada y contraatacar volviendo a poner su atención en Shiro volviendo a la acción.

Por primera vez estaban colaborando contra su versión oscura, y cabe decir que no lo hacían nada mal; hasta se atreven a decir que no forman tan mal duo. Sonic y Shiro atacaron al mismo tiempo por distintos ángulos dejando a Dark con la aparente sensación de arrinconamiento, aunque para sorpresas de los otros dos; Dark atrapo con la mano desnuda la hoja de Caliburn y con la otra mano bloqueo a la vez que le sujeta con fuerza.

"Veo que se la pasan bien" Dark Sonic empezaba a cambiar de la forma base, a su transformación completa "Pero ahora es mi turno de pasarmela bien"

Ahora en su transformación completa, Dark Sonic despliega una velocidad arrulladora que ninguno de los otros pudo siquiera intentar igualar, lo que facilitó que desarmara a Sonic separando al caballero de su espada, y a Shiro le propicio un puñetazo en la garganta con la suficiente fuerza como para impedir que la fusión incompleta abrirse la boca para usar los poderes de su anillo. Y como ahora Shiro estaba sobre sus rodillas sujetandose la garganta en un intento desesperado por respirar, Dark Sonic puso toda su atención en su versión amable. Sonic quiso hacerle frente pero él mismo sabe que ni con su Light Speed puede llegar a igualar la velocidad máxima de Dark, con cada golpe que recibe, Sonic termina volando de un lugar a otro sin llegar a tocar el suelo gracias a que Dark le esperaba para darle el siguiente golpe cambiando su rumbo.

Repitiendo el proceso unas cinco o seis veces, Sonic es tomado del cuello con un agarre de hierro y manteniendo por encima del suelo al erizo, Dark le dio golpes repetidos a las costillas con su mano libre hasta hacerlo escupir sangre. Sonic sentía la falta de aire empezar a afectarle casi tanto como las posibles costillas rotas que ahora tiene, para su sorpresa, Dark le dejó ir para tener libres ambas manos y usar su velocidad para atacarle con un combo de golpes que se asemeja a una ametralladora por todo su cuerpo finalizando con una patada ascendente al rostro.

"Sigues tú" declara Dark Sonic volteando el rostro para ver a a Shiro todavía en el suelo.

El erizo rojo no llego a notar en qué momento el bastardo psicópata desapareció de su campo de visión, pero sí sabe decir que sintió muy bien el momento en el que su puño se estrella contra su cráneo casi sintiendo como si se lo destrozan con solo un golpe. Shiro también es mandado a volar por los aires como con Sonic, el que; por cierto, apenas estaba tocando el suelo tras la patada que recibió. La fuerza G a la que el cuerpo de Shiro es sometido por la velocidad del golpe, le impide siquiera mover los brazos o las piernas para intentar estabilizarse, en menos de diez segundos llegó a atravesar el campo hasta el bosque chocando con cuantos árboles se crucen en su camino hasta por fin detenerse tras chocar con uno particularmente grueso. Shiro no se considera una persona religiosa pero le reza a cualquier dios que quiera escucharle para que se lleve el dolor que siente por todas partes, una idea de que tal vez tenga uno o dos minutos antes de que Dark le alcance es desechada en el momento en el que oye pisadas que se están acercando más y más a su zona de aterrizaje, maldita sea él y su gran bocazas ¿cuándo aprenderá a mantener la boca callada? Ya se está pareciendo a sus amigos con malos hábitos para hablar cuando no deben.

Sonaze II: CrossfireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora