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Me aleje de ellos concentrada en no dejarlos bajar hasta que estuviera lo suficientemente lejos.

En ese momento, los solté y yo salí corriendo.

En la puerta principal, Lucas me estaba esperando en la camioneta.

Subí en silencio y arrancamos.

-¿Qué planeas hacer?

-Le quité su placa a Scott -le mostré la placa -pienso llegar y hacer que todos me hagan caso, ir a la bodega y proteger a los rehenes mientras tú me ayudas a matar a los terroristas

-¿Ese es el plan?

-Es lo mejor que tengo, si no se meten los soldados

-Bien

Durante todo el camino, ninguno dijo nada más. Lucas iba concentrado manejando mientras que yo vigilaba que no nos estuvieran siguiendo para detenernos.

Cerca del aeropuerto, había un caos, había desviaciones y muchos policías y soldados guiando el tránsito.

-Por ese camino -le dije a Lucas

Cuando estábamos por llegar, un soldado nos hizo la parada.

-No pueden pasar

-Somos de la OSI -le mostré la placa

La tomó y la miró por un momento antes de tomar la radio que tenía en el hombro y sin dejar de mirarnos, habló.

-Camioneta de la OSI por la entrada norte

-Adelante -fue lo que le contesto la otra persona

-Entendido

Me dio la placa y nos dejó pasar.

-Lo bueno es que no les dijo que éramos solo dos chicos

-Nos las arreglaremos cuando estemos allá -dije

Nos movimos con libertad, siendo vistos por soldados que ya habían recibido la orden de dejarnos pasar.

Estacionamos la camioneta donde había más autos y patrullas. Bajamos y un hombre que supongo era el líder, se nos acercó de inmediato.

-¿Ustedes son de la OSI? ¿Qué clase de broma es esta? -se burló 

-No es una broma -dije segura -venimos a ayudar

-Niña, mis hombres tiene todo bajo control

-Claro y por eso ya mataron a un rehén

-Es el precio

-No es el precio. Déjanos entrar, nosotros podemos con ellos

-¿Cómo es que dos niños pueden más que todo un escuadrón?

-aj -miré por todos lados una manera de demostrarle lo que podíamos hacer sin que los demás nos vieran

Miré un contenedor de color negro donde adentro se veía que estaban controlando pantallas y todas esas cosas.

-Venga -lo tomé del brazo y lo arrastre al contenedor -¿Puede pedirles que salgan? A todos 

-Niña, no tengo tiempo para juegos

-¿Puede pedirles que salgan? -repitió Lucas

El hombre suspiró cansado, pero lo pidió. Todos los de dentro salieron de inmediato y nosotros tres entramos al mismo tiempo que cerramos las puertas.

-¿Y bien?

Hice levitar las sillas y las cosas que había dentro. Ante su mirada atónita, las regrese a su lugar.

-Ambos podemos hacer lo mismo -dije

-¿Cómo...? Claro, la OSI -sonrió

-Déjenos entrar, encontraremos las bombas y salvaremos a los rehenes

-Mis hombres tienen un plan, no pueden solo llegar y querer entrar

Respire profundo.

Lo hice estrellarse contra la pared.

-Kayla, no -dijo Lucas

-Escúcheme bien, hay personas inocentes que están en riesgo mientras nosotros discutimos aquí. O me deja entrar por las buenas o entraremos por las malas

El hombre se me quedo mirando.

-... bien

Lo bajé.

-Daré la orden de que los dejen entrar

-Una cosa más -me miró esperando mi petición -ni una sola palabra de esto ¿Entiende? A nadie. Pide a los reporteros que no graben más, aléjalos, diles que es peligroso

-...Entiendo

-Bien

Pasó por nuestro lado con un poco de miedo y salió.

-Eres ruda cuando estás enojada

-Solo quiero salvarlos a todos, no merecen morir

-También yo quiero salvarlos

Lo miré con una sonrisa y él solo levantó los hombros.

Salimos del lugar y nos acercamos. El hombre estaba dando órdenes y al vernos:

-Ellos entraran -dijo

Los soldados con los que hablaba nos miraron sin creer lo que el hombre les decía, un par de niños en una misión
como esta, pero es su superior, deben obedecer.

Nos dieron chalecos y armas, por si acaso.

Nos pusimos las cosas y nos preparamos. Mientras un solado pasó por nuestro lado y pudimos escuchar como hablaban por el radio que llevaba en el hombro.

-Otra camioneta de la OSI -dijo el hombre del otro lado de la línea

Lucas y yo nos miramos al instante.

-Démonos prisa -dije

-Bien

No pedimos permiso, solo dimos la señal de que entraríamos.

Dentro, no había nadie, claramente. Todo estaba solo. Lucas estaba rodeado por su campo, al igual que yo mientras nos movíamos rápido.

-Estamos en la entrada -dije por un radio –¿Dónde están los rehenes?

-Lleguen hasta el área de registro de equipaje, a la derecha por el pasillo de solo personal autorizado, en la segunda puerta

-Bien

Comencé a correr por el pasillo seguida por Lucas.

Llegamos al pasillo y nos detuvimos.

-Tu cuida de los rehenes, sácalos y yo me encargo de los hombre -dije

-Pero, solo puedo sacar a dos rehenes por viaje

-Hazlo como puedas, yo me encargare de alejar a los terroristas y te daré tiempo

-Eso es peligroso

-Confia en ti, confía en mi, podremos con esto ¿Bien? -sonreí un poco para ayudar al momento

-...Bien

Respire profundo y entré.

No había nadie a la vista, la bodega era demasiado grande. Caminamos al fondo y comenzamos a escuchar los llantos de las personas.

-Son, 15 rehenes -le susurré -y solo 3 terroristas

-Bien

Respire profundo y comencé a contar.

-Uno... dos... tres 

La Resistencia El Fin (ParkJimin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora