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-Están analizando la de mamá -dije

-¿Dónde tienen el tuyo? -preguntó mamá

-A un lado del tuyo

-¿Puedes traerlo?

-Eso creo

-Trae un nuevo frasco y una aguja -dijo Lucas

Me concentre en tirar la charola donde estaban las muestras de sangre, más algunas cosas más para que se hiciera un caos y no se dieran cuenta de que mi muestra faltaba.

Los científicos se asustaron al escuchar como la charola y una mesita movible se caían y tiraban todas las cosas haciéndolas salir volando por todos lados.

-Eres un estúpido -dijo el científico que nos sacó sangre a uno que iba pasando por el lugar y que parecía ser el culpable -recojan doto ¡Rápido!

Una jeringa, un nuevo frasco y el mío, salieron volando sin que nadie de los científicos se dieran cuenta.

Abrí los ojos y atrapé las tres cosas en la mano cuando aparecieron volando por entre los barrotes.

-Genial –sonrió Lucas

-Rápido, que no tarda en regresar la onda –dijo Max

Entendí para qué era la jeringa y el nuevo frasco. Lucas se levantó la manga de su camisa mientras que mamá tomaba la aguja y Max usaba el listón que mamá estaba usando para hacerse una coleta como la liga alrededor del brazo de Lucas para que su vena saltara a la vista.

Mamá le clavo la aguja a Lucas y comenzó a llenar el frasco con su sangre, mientras yo le quitaba a mi frasco la etiqueta para al final pegarlo en el nuevo y me guardaba mi muestra en la bolsa de mi pantalón.

-Llévatelos –dijo mamá

Volví a tomar las cosas, la aguja y el frasco nuevo para regresarlos a su lugar. El frasco lo dejé debajo de un mueble mientras miraba como todos lo buscaban desesperados, planeaba dejar la aguja en algún lugar que ellos no notaran tan pronto, pero al final solo logre arrojarla lejos antes de que la onda volviera y ya no pudiera ver más.

-¿Qué paso? –preguntó mamá cuando supongo volvieron a sentir el hormigueo en sus manos

-Regrese el frasco, pero la aguja apenas la alcance a lanzar

-¿Lejos? –preguntó Lucas

-Sí... creo

-Está bien, lo que importa es que ya tienen el frasco de la sangre

-Pediré ir al baño y lo tirare por el inodoro –dije

-Buena idea

Me di la vuelta para sacar el frasco de mi bolsa y meterlo entre mi sostén y que en caso de que ellos me bolsearan, no creo que se atrevan a tocar mis pechos... espero.

-Alguien –llamé –necesito algo

En cuestión de minutos un hombre apareció.

-¿Qué quieres?

-Quiero ir al baño

-No

-No puedes impedirme ir al baño

Suspiró cansado y rodó los ojos.

-Que sea rápido

-Entre más rápido me dejes salir, más rápido regresare

Sacó unas llaves de su bolsillo al igual que su arma, apunto a los demás mientras me dejaba a mi salir de la celda.

-Manos arriba

Sentí como colocaba el cañón de la pistola en mi espalda y de ese modo me llevaba por el pasillo hasta que llegamos al baño. Más que darme escalofríos la sensación de cañón contra mi cuerpo, me daba miedo que se le fuera a escapar un disparo.

-Tienes 5 minutos

-Dame más, soy una chica... ¿Entiendes?

-10, anda –me empujó

Entré al baño y saqué el frasco de mi sostén, le quite la tapa y tiré el contenido en el escusado mientras que el frasco lo envolví en papel de baño y lo tiré al bote de basura de modo que se mezclara con la demás basura y no se notara lo que era.

Esperé unos minutos más, me lave las manos y salí.

-Manos arriba

Regresamos a la celda y el hombre volvió a irse.

-Hecho –dije y todos los demás suspiraron de alivio al igual que yo

Ahora por lo menos podíamos estar más tranquilos.

Los cuatro nos sentamos en el suelo y nos quedamos en silencio.

-Oigan -levanté la mirada

-¿Qué pasa? -preguntó Lucas

-¿Recuerdas la vez que te perseguí?

-aja

-El cómo hice que la camioneta viajara desde tu casa hasta donde nosotros estábamos

-Sí -sonrió, creo que entendía en lo que estaba pensando ahora

-¿Qué? -preguntó mamá

-Puedo hacer que las cosas se mueven desde lugares lejanos

-¿En serio?

-¡Sí! Puedo mandarles un mensaje, puedo no sé... escribirles una nota o en computadora o en algún lugar para decirles que suban a las camionetas y se preparen, que esperen por mi y traerlos hasta aquí

-Pero... eso es demasiado desgastante ¿No?

-Es eso o esperar a que ellos nos encuentren por su cuenta, es la única opción que tenemos

No parecían estar muy conformes con la idea, tampoco yo está del todo segura si funcionaría, pero era lo único que teníamos.

-Antes de que comiencen a experimentar con nosotros -dije -tenemos tiempo

-...Inténtalo -dijo mamá

-Bien

Los tres se concentraron en sus manos, esperando que el hormigueo pasará para avisarme.

-Ahora -dijo Lucas

Me senté en el suelo y cerré los ojos para concentrarme. No sé qué tan lejos puedo llegar con esto.

Era difícil querer ir más lejos, mi cerebro se concentraba en cosas tontas en el camino y eso me hacía perder tiempo.

Me detuve en una mujer que miraba su teléfono, en un hombre que hablaba por teléfono, en un perro que dormía en el jardín, en un hombre que compraba un café, en un gato que caminaba elegantemente sobre una barda y en una chica que estaba sentada en una banca en el parque escuchando música con sus audífonos.

-Concéntrate -dijo mamá en voz baja

-Es lo que intento... es difícil

Las calles las conocía y simplemente seguí por ellas en dirección a la OSI.

-Llegué -dije

-Bien, bien

Intentaba buscar a Jimin o a Kenan, o papá, o a alguien que fuera apropiado para recibir el mensaje. 

La Resistencia El Fin (ParkJimin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora