La Resistencia El Fin (ParkJimin)

37

(2 meses después)

La OSI nos seguía vigilando por si alguien aún seguía persiguiéndonos, pero nada había pasado en este tiempo.

Mamá, Lucas y su padre seguían con los ojos no violetas, eso es lo que me ha dicho Jimin cuando se lo pregunto. Ellos dos habían hecho las pases y ahora se llevaban mucho mejor que antes, habían regresado a su casa, pero nos mensajeábamos con frecuencia y él vendría en una semana para visitarnos.

Perdí por completo el año escolar, no me molestaba, ahora estábamos de vacaciones y me daría tiempo de decidirme si regresar o mejor tener clases en otro lado, me daría tiempo de acostumbrarme por el hecho de que ya no podía ver.

Mamá se vino a vivir con nosotros y después de mucho tiempo, volvíamos a ser una familia.

En cuanto a mí, me golpeaba seguido, tenía moretones en los brazos y en las piernas, seguido me tropezaba y tiraba cosas. Era más torpe que cuando podía ver, pero aun así, no me molestaba, todos a los que conocía y quería estaban bien por lo que había hecho y eso me daba mucha satisfacción.

-Mamá ¿Sabes dónde deje mi teléfono?

He vivido en esta casa por un año y ahora que no puedo ver, me muevo como si jamás hubiera estado aquí y no la conociera.

Choque con una pared, pero mamá logró meter la mano entre mi brazo y la pared para que no fuera fuerte el golpe.

-¿Estás bien? -preguntó ella

-Sí, sí -sonreí divertida

-Aquí está -lo dejó en mi mano

-Gracias

-¿A qué hora dijo que venía Jimin?

-A las 4 ¿Qué hora es?

-Las 4

-ow

Aún no me ponía los zapatos, por lo que mamá tuvo que traérmelos para que no saliera corriendo y fracasara en el intento.

Para cuando Jimin llego, entró directo a casa por mí, me tomó de la mano y con cuidado me llevó hasta el auto.

Iríamos a pasear.

Fuimos a comprar un helado y cuando lo tuvimos, caminamos por el parque hasta que Jimin me tomó de la cintura y me guío para que me sentará en una banca.

-Tienes dos moratones más que los de la última vez

-mmm... se me cayó una pluma y me golpee con la esquina de la mesa y después me golpee con la esquina de mi mesa de noche cuando me giré durmiendo, eso hubiera sido lo mismo si pudiera ver

-Ten más cuidado -sentí como masajeaba un poco en los moretones

-Soy torpe de nacimiento, aún trabajo en eso

Sentí como dejaba su cabeza en mi hombro y como seguía comiendo su helado al igual que yo.

-¿Cómo está el día? -pregunté

-Soleado, no hay nubes es el cielo, estamos debajo de la sombra de un árbol y por eso no hace calor, no hay personas cerca, pero hay un papalote en forma de medusa, en el aire, cerca de nosotros

-¿No te aburre estarme describiendo todo?

-Pra nada -levantó la cabeza

Nos quedamos en silencio por un tiempo y pudimos escuchar música.

-Creo que hay una especie de festival, supongo que de ese lugar es que viene el papalote

-¿Quieres ir? -pregunté