La Resistencia El Fin (ParkJimin)

23

-Matamos a uno -dijo Scott mientras corría a nosotros

Nos señaló una pared donde podíamos escondernos. Tomé a Kayla para levantarla y todos corrimos a la pared para estar seguros.

-¿Cuántos quedan? -preguntó Scott

-Uno -dije

-Bien -tomó la radio e informó la situación

-Me llevaré a Kayla -dijo Kenan -ustedes divídanse y busquen al otro hombre y las bombas. Los antibombas esperan para entrar

-Bien -dije

Todos miramos a Kayla.

-Tengo una idea, pero necesito que ustedes se encarguen del otro hombre

-¿Te harás cargo de las bombas? -pregunto Lucas

-Sí

-Ya no puedes más, estas cansada -dije molesto

-Estoy bien -se recargo en la pared claramente agotada -y si ustedes van a estorbarme, no me molestara guiarlos fuera, será mejor que estén lejos de la zona de peligro 

Comencé a sentir como mis pies dejaban el piso.

-Kayla, Kayla -dije rápidamente -bien, está bien, no te estorbaremos, nos dividiremos y buscaremos al otro hombre -nos dejó de nuevo en el piso

-Debo ir al centro de la pista -dijo ella -si esperamos a los antibombas, no alcanzarán a llegar y buscarlas

-Bien -dijo Kenan -que Lucas se quede contigo

Ella aceptó y Lucas igual.

-Nosotros nos dividiremos para encontrar al otro hombre, dos dentro y dos afuera

-Bien

-Vamos

Todos tomamos nuestros puestos.

Kayla y Lucas caminaron al centro de la pista, mientras que Dean y Kenan iban dentro y Scott y yo nos quedábamos afuera.

Todo estaba en silencio, no se escuchaba absolutamente nada, lo que me ponía más de nervios. Mis ojos paseaban por todos lados tratando de encontrar cualquier cosa que se moviera, pero todo parecía estar muy tranquilo. Podía ver a Scott a unos cuantos metros de mí, el cómo se movía lentamente mientras apuntaba su arma.

El fuerte tronido de un disparo nos tomó por sorpresa y más cuando le dio a Scott en el chaleco, pero de todos modos lo derribo.

-¡Scott! -lo llamé, pero en ese momento sentí como mis pies se deslizaban con rapidez por el piso y como Scott se arrastraba igual.

Ambos quedamos debajo de un avión y después vi como Lucas era arrojado a nosotros hasta quedar a un lado de mí.

Kayla hizo un movimiento con su mano y de inmediato el tercer hombre apareció por los aires, era el mismo hombre que Scott conocía, el ex soldado de Kenneth.

-¡No podrás escapar todo el tiempo, joya! -sonrió desquiciadamente

Kayla

Me sentía mareada, las cosas me daban vueltas y la cabeza me palpitaba, pero entendía un poco lo que me estaba diciendo.

En la bodega había tenido que mover cajas, maletas, enormes estanterías, detener balas y cubrir a los rehenes, eso me había cansado demasiado. 

-Ellos te están siguiendo y con esto... ya disté tu ubicación

Tomó algo en sus manos y de la nada una explosión me aturdió demasiado al punto de hacerme caer al piso y escuchar un zumbido en mis oídos.

Para cuando abrí los ojos, el hombre se recuperaba del golpe que se dio cuando lo dejé caer con fuerza al suelo. Mi hermano y Scott aparecieron corriendo por la puerta y... el avión donde había dejado a Jimin, Lucas y Scott... uno de los turborreactores había explotado.

No.

Había fuego por todas partes y el avión estaba muy dañado.

Muchachos

El mismo sentimiento de cuando Miah murió, el mismo miedo y coraje me invadieron como una descarga eléctrica.

Me levanté del suelo y tomé al hombre por los aires.

-Lo vas a lamentar -gruñí

Su corazón en mis manos, el modo en el que le clavaba las uñas lentamente, enterrándolas lentamente lo hizo gritar de dolor, pero quería que sufriera.

El humo de disperso un poco y de entre el fuego, comencé a ver un campo color violeta. Lucas había logrado protegerlos a todos, Scott estaba bien, Jimin estaba bien, él.

Jimin

Abrí los ojos y el fuego parecía rodearme. Lucas estaba de pie a un lado de mí y Scott estaba en el suelo aun recuperándose. Lucas había logrado salvarnos a todos.

Llevé mis ojos a Kayla quien nos miraba con una sonrisa en su rostro. Pero cuando se aseguró de que estábamos bien, volvió a mirar al hombre que mantenía en los aires y después de hacerlo gritar por un momento, lo mató. Dejó su cuerpo caer pesadamente contra el pavimento mientras ella se dejaba caer de rodillas.

Kenan y Scott corrieron a ella al igual que nosotros.

-Kayla -Kenan la tomó en brazos

Se veía mal, apenas podía mantener los ojos abierto y su nariz comenzó a sangrar.

-Le diré a los antibombas que entren -dijo Dean tomando su radio

Pero la radio salió volando y se hizo pedazos en el aire, como si alguien la hubiera aplastado con la mano, cual lata de soda.

Todos miramos a Lucas.

-Yo no fui

-Kayla, ya basta, ya fue suficiente -dije molesto

Pero ella parecía no escucharnos. Se alejó de los brazos de Kenan y levantó las manos al cielo. De inmediato 8 bombas con reloj corriendo se amontonaron sobre nosotros. Aun nos quedaban 2 minutos antes de que explotará.

-¡Ya basta, Kayla! -gritó su hermano, pero ella no escucho

Ambos nos miramos y lo entendimos. Kenan sacó el frasco de la bolsa de su pantalón y con la yema de sus dedos tomó un poco, se acercó a ella y lo dejó sobre su piel.

Esperaba que funcionara, pero lo único que hizo fue que ella se mareara un poco.

Kenan me miró con cara de susto y yo igual ¿Cómo es posible que esto no funciono?

-Kayla -la llamé

Un campo rodeo las bombas, poco a poco hasta que todas estuvieron dentro de una esfera, y las mantuvo así hasta que el reloj llegó a cero. En ese momento, las 8 bombas comenzaron a explotar una tras otra, creando un impresionante brillo que nos hizo desviar la mirada de lo cegador que era.

Se sentía una leve brisa caliente proveniente del fuego de las bombas, pero era soportable.