Capítulo 4

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-Hola chicos soy Doug hijo de Tontín recuerdan, Tontin, Doc, tímido, felíz, gruñón, dormilón y... Jayjo- se presentó.

Vi que se puso algo nervioso al mirarme así que aproveche para presentarme.

-Evie, hija de la reina malvada- dije mientras me acercaba a él.

El negó un par de veces y respiró profundo.

-Ok, respecto de sus clases yo, puse algunos requisitos, historia de leñadores y piratas, la seguridad en Internet y algunas correctiva inicial- dijo.

-Adivinare ¿nueva clase?- dijo Mal y el asintió- rápido, el dormitorio espera-

Mal comenzó a caminar escaleras arriba y la comenzamos a seguir.
Cuando pase al lado de Doug se me quedo mirando y no pude evitar sonreír.

-Ah, si, sus dormitorios están allá- dijo Doug y todos comenzamos a caminar de regreso- Tontin, Doc, tímido, felíz, gruñón, dormilón y...-

-Estornudo- dijo Carlos.

Caminamos por un largo pasillo hasta que Doug nos indicó cual era nuestro dormitorio y se fue a llevar a Jay y a Carlos al suyo.

Cuando entramos no pude evitar emocionarme, es hermoso, limpio, ordenado y con cosas tan finas y lindas.

-Wao este dormitorio es muy...-

-¡Asqueroso!- dijo Mal.

-Tienes razón, es muy asqueroso- dije para que no viera mi emoción.

-Oh, se que voy a necesitar filtro solar- dijo mirando las enormes ventanas y la gran iluminación que entra por estas- Evie- dijo señalando una de las ventanas, así que fui a cerrarla- ¡Wu! así está mucho mejor-

Aunque este más oscuro me sigue pareciendo hermosa.




💎💎💎





La noche llegó y Mal y yo decidimos comenzar con el plan, así que fuimos al dormitorio de los chicos. Cuando entramos Carlos estaba jugando frente a un televisor y Jay pues...

-Jay ¿Que haces?- le preguntó Mal.

-Se llama... robar-

-Ok ¿Cual es el punto?-

-Bueno ammm Mal, es como comprar lo que quieras, pero sin pagar-

-Jaja Hacemos eso o dejamos todo como esta y lo buscamos cuando ¡conquistemos el mundo!-

-Suenas igual que tu mamá- dije.

Mal cada vez más trata de ser como Maléfica.

-¿Enserio?- dijo con orgullo.

-Tu hazlo a tu modo, y yo lo haré al mio- dijo Jay.

Carlos llamó a Jay para que fuera a jugar un video juego que estaba en la tele, jajaja parecen niños emocionados.

-¡Chicos!- nos llamó Mal- recuerdan que vinimos aquí por un trabajo-

-Hada madrina bla, bla, bla, varita mágica bla, bla, bla- dijo Jay sin dejar de jugar.

¡Jajaja!

-¡Esta es nuestra oportunidad!, de provarnos ante nuestros padres- dijo Mal y todos la miramos, incluso Jay dejo de jugar- De provarles que somos malos, despiadados, inhumanos y crueles ¿si?-

-Si- dijimos los tres.

-Evie el espejo-

Nos acercamos a la mesa y saque mi espejo mágico.

-Espejito espejito en la... en mis dedos, la varita del hada madrina... quiero-

Uff rimar no es tan fácil como pensé.

Mire el espejo y nos mostró la varita enseguida.

-¡Ahí está!- dije.

-Esta muy cerca- dijo Carlos.

-Espejo mágico no tan cerca- dije y el espejo me mostró el mundo entero- acercalo- dije y se fue acercando- acercalo- continúe- ¡acercalo!-

-¿Puedo volver a mi juego? pase al nivel tres- dijo Carlos.

-¡Alto!- gritó Jay.

-Esta en un museo ¿saben donde queda eso?- dijo Mal.

Carlos tecleó en la computadora y la giró a nosotros.

-A 3.7 kilómetros- dijo.

Todos lo miramos con admiración por lo rápido que fue eso.

Pero sin perder mucho tiempo nos paramos y comenzamos a salir del dormitorio.

-Vamos- dijo Mal y comenzamos a correr.

Mire atrás y Carlos se había quedado jugando.

-¡Carlos!- lo llamé.

-¡Ya voy!-

💎💎💎

Llegamos al museo, <<caminando debo agregar>> y comenzamos a caminar por sus alrededores buscando una entrada no tan llamativa.

-El espejo- dijo Mal.

-¿Tengo mal el maquillaje?- pregunté.

-Si, escucha si tienes ganas puedes ver donde está la varita mágica- dijo de mamá gana.

Aveces es muy odiosa.

-Claro- dije, seguí las indicaciones del espejo- por aquí-

Caminamos por un pasillo con columnas blancas y llegamos a lo que parece la puerta trasera del museo, algo así como salida de emergencia.

Las puertas son de madera pero la mitad de arriba es en cristal, por lo que podemos ver lo que hay adentro del lugar.

Hay un seguridad medio dormido en una silla cerca de la rueca de Maléfica.

-¿Esa, es la rueca de tu madre?- dijo Jay.

No pude evitar reír al igual que Carlos.

-Si, es algo tonta- dijo Carlos.

-Es mágica, no tiene que verse siniestra- dijo Mal- Mágica amiga llego la hora que mi víctima se duerma ahora- Mal leyó un hechizo de su libro e hizo unos movimientos con su dedo-

Inmediatamente el guardia se acomodó más en la silla y se durmió.

-Impresionante- dijo Jay con ironía.

-Si, que susto- dijo Carlos y volvieron a reír.

-Ok ahora verán- dijo Mal y volvió a buscar un hechizo en su libro- Pincha su dedo, pincha y quema, que mi enemigo luego se duerma-

Vimos al Guardia levantarse de la silla e ir a la rueca y pinchar su dedo como lo hizo Aurora cuando estaba bajo el encantamiento de Maléfica, luego se acostó en el suelo y quedó profundamente dormido.

-Ahora no es tan tonta eh- dijo Mal y intento abrir la puerta pero está cerrada.

-Atrás, amigos- dijo Jay.

Al parecer tiene planeado romper la puerta de una patada.

-Facilidad, velocidad, no pateare pero se abrirá- conjuro Mal y la puerta de abrió de inmediato.

Aunque no lo suficientemente rápido para evitar que Jay se lanzara y cayera al piso asiendo un quejido de dolor asiendo que todos nos rieramos.

Always DevieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora