Perfectos Infieles | Saga Perfectos || Hot PAUSADA

DOCE

¿Cómo ha podido cambiar tanto mi vida en un año y poco? 

Ahora me siento tan libre que estoy a punto de enfrentarme a todo el mundo en este evento, en el que dejaré de ser la chica escondida detrás de una máscara y un látigo para convertirme en Skyler, la chica de los negocios que triunfará en américa de aquí a nada. 

Me muero por ver la cara de mi padre cuando me presenten para dar el discurso de bienvenida, me muero por ver como se queda al escuchar lo que tengo que decir, lo que diré de él delante de todo el público. Se va a morir y no hay cosa que me dé una satisfacción más grande que estar allí para ver como se le cae la cara de vergüenza. 

-- Sky... ¿estás segura de esto? -Pregunta Asher a mi espalda. Tratando de contenerse para no quitarme el vestido negro que llevo puesto. 

Un precioso vestido de Dior, con escote en forma de corazón, pegado al cuerpo y largo hasta el suelo, con un corte que deja ver mis estilizadas piernas. 

--Estoy más que segura, estoy eufórica, estoy exultante... -Me giro y ando lentamente hasta él. 

Cojo su corbata y tiro de él hacia mí, después de todo, es quien ha estado conmigo en todo momento en estos últimos tiempos. 

-- Llevo esperando esto mucho tiempo, tanto que parecía interminable. Si no hubiera sido por ti, quizá no hubiera llegado tan lejos. Quizá me hubiera estancado en esa tristeza que me reinaba. Es por eso que debo darte las gracias. Gracias por estar conmigo todo este tiempo, gracias por quererme tanto, gracias por apoyarme y hacerme sentir tan bien. Gracias Asher... -Él me sonríe levemente y besa mis labios delicadamente. 

No se merece lo que pasó con Jared hace unas horas, no se merece que lo haya engañado de esa manera pero tampoco creo que hacerle daño en este justo momento sea lo mejor, le quiero, como algo más que a un amigo, le quiero y creo que me duele hasta hacerle daño. Le abrazo con fuerza y él me corresponde con un beso en el pelo.

-- Ve a por todas y recuerda que yo estaré a tu lado pase lo que pase esta noche. --Beso de nuevo sus labios y le sonrío. 

Es la hora de mi debut, es el momento que tanto llevo esperando y no pienso aplazarlo un segundo más. No hago  más que escuchar mi nombre y Asher me coge del brazo para bajar junto a mi por las escaleras que nos llevan hasta el escenario. Una entrada digna de una diosa. 

Bajamos lentamente, ante la atenta mirada de las doscientas personas que debe haber en el hotel. Una vez llegamos al escenario Asher me deja un pequeño beso en la comisura de los labios y me da un pequeño azote que solo siento yo y me pone aún más eufórica. 

Miro al fondo para encontrarme con sus grandes ojos mirándome, asombrado y asustado, diría yo, y eso es lo único que me hacía falta para afrontar esto con más ganas. 

-- Buenas noches señores y señoras. Me complace ver como esta gala ha recibido tanta atención, quiero daros las gracias a todos por haber venido y hacer de este proyecto, algo posible. Como muchos ya saben, para mi siempre ha sido muy importante que todas las personas de mi entorno puedan vivir como se merecen, sin ningún tipo de discriminación, acorde a como lo hago yo porque, que yo tenga una empresa, no implica que deba aprovecharme de mis empleados. Les aseguro que lo que está a punto de suceder va a ser un bien para todo estados unidos, un proyecto que gracias a su financiación y todos los apoyos que está recibiendo me dejará ayudar a todas las personas posibles. -Hago una pequeña pausa para tomar un poco de agua y seguir. -- No muchas personas saben todo lo que he tenido que sufrir para llegar hasta aquí, lo que muchas mujeres tienen que sufrir para poder conseguir que el pan llegue a la mesa. Los desprecios de tu padre, de la persona por la cual estas aquí el día de hoy... por que sí, hay muchos padres a los que les encanta hacer daño a sus hijos. - Se escuchan voces de asombro. -- Muchos reniegan de ellos, les intentan aplacar pero no, yo no soy de esas papá. Soy Skyler McGregor y voy a hacer todo lo que esté en mi mano para llegar a lo más alto. Con todo esto solo quiero deciros que este nuevo bufete de abogados tendrá su sede en nueva york, es un lugar donde atenderemos todas las llamadas de personas que nos necesiten para lo que sea. Y esto no queda ahí, vamos a luchar contra los abusos, contra la corrupción política, voy a hacer todo lo que esté en mi mano para limpiar este país de las sucias ratas que nos gobiernan, de esas personas que solo buscan su beneficio y quieren enriquecerse a costa de otros. -Sonrío al ver la cara de enfado de mi padre. -- Muchas gracias a todos y que empiece la fiesta. 

Todo el mundo aplaude fuertemente y yo estoy saltando en mi interior, todos sabemos que no se atreverá a acercarse demasiado para no llamar la atención, le acabo de llamar rata sucia y apestosa delante de muchos de sus "amigotes" pero lo que él no sabe, es que esos señores, son los que me cuentan a mi todos sus secretos, sus pasiones y sus venganzas. Los tengo, literalmente, cogidos por los huevos y si, es una sensación agradable. 

Una vez he bajado del escenario cojo una copa de champan de las que están repartiendo los camareros por toda la gran sala cuando alguien me la quita de las manos me doy la vuelta para encontrarme con sus ojos canela, su smoking perfecto y su cara de niño malo mirándome con desaprobación. 

-- No bebas esto. -Levanto una ceja cuando siento que alguien coge mi mano y se que es Asher. 

-- ¿Algún problema con un indeseable, cariño? -Recalca la palabra cariño y eso me hace sentirme poderosa. 

-- No amor, todo está bien, ya sabes, solo alguien de mi pasado que se cree que me conoce. -Le arrebato la copa y la llevo a mis labios suavemente para darle un pequeño sorbo. 

Me doy la vuelta aún cogida de la mano de Asher y aún sintiendo sus ardientes ojos pegados a mi espalda, ese enfado que le caracteriza y que para mi, ya no es más que un niño enfadado porque algo que quería ya no es suyo. 

La noche va avanzando con tranquilidad, algunas conversaciones con inversores, muchos halagos por parte de las mujeres de la sala a las que les encanta que alguien tenga las agallas para poner a todo el mundo en el sitio que les corresponde, si supieran lo que hacen sus maridos conmigo por las noches, se escandalizarían. Pero lo más extraño de todo es que me siento bien, estoy en mi salsa literalmente. Me gusta ser el centro de atención. 

-- Ese discurso parecía ser más de un político que de una empresaria y no te apellidas McGregor - Dice lo último más bajito y eso me saca una sonrisa. 

Me giro para quedar frente a frente y hablarle directamente a la cara. 

-- Voy a destruirle, señor presidente.